BatLantern: HIMYD

I. Espontáneamente Prince

— Sabes, nunca hemos conocido tu historia con nuestro padre — agregó aquel joven de ojos azules profundo —. ¿Tan malo estuvo en ese entonces?

— No estuvo tan mal Dickie — el chico de cabello negro lo miró mal —, si no, nunca estuviéramos aquí. Literalmente.

— "Literalmente" deberían callarse los dos — bufo el segundo de ellos.

— Tt, parecen vecinas chismosas.

— ¡Damian!

Jason trató de controlar a Tim, que iba con las intenciones de pelear con su pequeño hermano Damian, que al verlo se puso en forma de ataque.

Dick se levantó rápidamente y se sentó en medio de ellos; apaciguando la conversación pero sin dejar de tener contacto con el mayor de todos: Bruce Wayne.

— ¿No dirás nada? — preguntó una vez más, mirándolo con aquellos ojos de cachorro que hacía a temprana edad.

— Ni siquiera te hace caso — contestó Jason rodando los ojos —. Y mejor para nosotros, no quiero saber la cursilería que paso en ese entonces.

— No es para tanto — rodó los ojos Timothy —. Podría ayudarte a conseguir alguien que te ame.

— Tt, el idiota de Drake tiene razón.

— ¿Idiota?

— ¿Razón?

— ¡Basta! — Richard los miró —. Podrían callarse sólo una vez por amor a-

— Así comenzó — agregó Bruce interrumpiendo al primer Wayne de los cuatro, llevándose las miradas de sus hijos —. De la manera más espontánea que ustedes podrían imaginar — bajo el periódico y los miró.

— Tt, en serio empezará? — se cruzó de brazos mientras se acomodaba en aquel sillón.

— Creo que si — asintió frenéticamente Tim y se acomodó alado de Jason.

— No te pongas cómodo, que tal vez me iré en cuando empiece — se cruzó de brazos Jason.

— Sólo déjalo que empiece — sonrió Dick pasando su brazo por los hombros de Damian.

Bruce negó con media sonrisa, dejó el periódico en la mesa y suspiró:— De acuerdo, la historia en cómo conocí a su padre básicamente se trata de como falle al hacerlo.

{Chicos, hay algo de una palabra que siempre me tuvo en la mente desde que pude saber todo lo que tenía que cruzar hasta conocer a su padre; y esa misma palabra, define lo que sucedía día a día.}

Clark caminaba de un lado a otro en busca de aquellos papeles que tanto necesitaba, era treinta minutos antes de que el reloj marcara las 12 am de un día como martes.

— Deja de estar así, quieres? — Bruce lo miró desde la puerta de la pequeña cocina que estaba en su departamento.

El pelinegro lo miró y negó rápidamente:— Has visto el folder beige que había puesto aquí — señaló en la pequeña mesita que está aún lado del sofá —. Estoy noventa y nueve por ciento seguro que lo dejé aquí ayer.

— Puede que Kripto se lo haya comido — contestó sin darle importancia mientras bebía de su taza de café —. Ó desaparecieron con magia.

— Tengo que estar en menos de una hora en el Daily Planet — rascó su nuca ya algo frustrado, caminando al rededor de la sala.

El sonido de la puerta siendo abierta se escuchó:— ¡Hey! — saludó el ojiverde cerrando la puerta tras de él —. ¿Cómo va el día?

— Debo agradecer a cualquier entidad por tu llegada — Bruce lo miró —. Clark no encuentra sus papeles.