no estoy loco, solo dividido

Capítulo 3: un mes después

Un mes ha pasado desde que el albino fue internado en el hospital, en todo ese tiempo la casa no fue la misma que antes, no hubo risas ni escandalo durante semanas, y cuando llegaba a haber eran más llantos que nada. Sus hermanas y padres han ido a verlo constantemente. Todas, con la excepción de Lynn JR. Ella no se atrevía a ir a visitar al chico, decía que no podría ni verlo a la cara después de todo lo que provoco su actitud para con su hermano.

Lori – vamos Lynn, debes de salir de ahí en algún momento – decía la mayor al otro lado de la habitación de sus hermana deportista

Lynn, tirada en la cama y tapada con las sabanas hasta la cabeza – déjame en paz, no quiero salir hoy

Leni – pero has estado ahí desde hace una semana, ni siquiera comiste en todo el día de ayer, y papá hizo tu favorito

Lynn – les dije que no quería salir, ya déjenme sola

Lucy – no puedes seguir así hermana – dice la gótica apareciendo atrás de la deportista

Lynn - ¡AHHHH! Lucy, deja de hacer eso, además, como entraste, creí que había cerrado con seguro

Lucy – tengo mis métodos – se voltea a ver una rendija de ventilación abierta – pero eso no importa, debes de salir de esta depresión, ni siquiera yo puedo soportarte así

Lynn – para ti es fácil decirlo, tú no mataste a tu hermano

Lucy – suspiro, ya te hemos dicho cientos de veces que ni fue tu culpa, ni lo mataste

Lynn – solo lo deje en coma... un coma del que probablemente no despertara

Lucy – de eso no sabemos, podría despertar en cualquier momento

Lynn – eso llevo escuchando desde que ingresó al hospital y no más nada... te soy sincera, empiezo a perder la esperanza de que salga de ese lugar

Lucy – por favor, no vuelvas a decir algo como eso – decía mientras soltaba unas cuantas lágrimas – yo sé que el saldrá de esto... yo lo... lo sé... él tiene que... ¿a quién quiero engañar? Yo también lo empiezo a dudar – se soltó a llorar por la tristeza.

Lynn se levanta de su cama y va donde su hermana menor esta para consolarla – lo siento Lucy, no quería que te pusieras así, discúlpame

Lucy – pero ¿qué pasa si de verdad no despierta? No sé qué hare sin mi hermano

Lynn – yo... no lo sé, no sé qué haremos si llegara a pasar eso, pero lo que sí sé es que pase lo que pase, aquí estaré para ti y las demás, no debí haberme aislado así, fui muy egoísta

Lucy – sí, sí lo fuiste, pero lo entiendo, estas cargando con todo el peso de esto y no aceptas que solo fue un accidente, por favor, deja de culparte y ve a ver a tu hermano

Lynn suelta lágrimas en silencio y abraza a la gótica – de acuerdo, lo hare, pero solo si vienen conmigo, no puedo hacer esto sola

Lucy – dalo por hecho, ahora bajemos a desayunar, papá hizo Hot Cakes con moras

Lynn – vallamos, me muero de hambre

Así, las dos chicas bajaron a encontrarse con el resto de la familia en el comedor. Cuando llegaron la deportista fue abordada por sus padres y hermanas, preguntándole como se sentía, que cambio y un sinfín de preguntas más que no alcanzo a entender por el bullicio que había a su alrededor.

Lynn – ya basta por favor, comamos mientras hablamos ¿ok?

Lynn Sr. – de acuerdo, siéntense todos, ya les traigo los Hot Cakes