La alarma comenzó a sonar estruendosamente, anunciando que tenía que levantarse para ir a clases.
De un manotazo apagó el endemoniado aparato que le estaba robando la calma.
Desganado se sienta sobre el futon mientras restriega sus ojos en un intento por acostumbrarse a la oscura habitación.
Al lograrlo, se levanta perezosamente y va al baño.
Luego de unos cuantos minutos estaba con el uniforme puesto, desayunado y listo para ir a la UA.
Salió de casa, cerró la puerta tras de sí y empezó a caminar.
Había llegado temprano, como la mayoría de las veces.
Así que aprovecho para echar una pequeña siesta en su pupitre.
Un golpe en la puerta del aula le hizo levantar la cabeza rápidamente creyendo que sería su profesor-larva llamado Aizawa, sin embargo, no espero ver a Midoriya con el rostro pegado a la puerta.
—Midoriya-kun es peligroso que tengas esos golpes—decía el presidente de clase haciendo movimientos robóticos con las manos.
El mencionado sobo su frente y soltó un suspiro.
Para luego...
Sonreír.
Planeta tierra llamando a Shoto ¿hola?
Lo sentimos, el joven Todoroki se encuentra en Izukuplanet.
La puerta del salón se abrió bruscamente, al mismo tiempo que se oían unos gruñidos.
Desvío la vista para ver quién era. Debió imaginarlo.
Era el siempre bestia nunca inbestia, Bakugo Katsuki.
Seguido del siempre suicida Kirishima Eijirou.
Iba a regresar a Izukuplanet pero, la voz ronca de su profesor le puso en alerta.
—Siéntense. — advirtió sentándose en la silla tras su escritorio. — tal y como lo dijimos ayer, haremos el resumen de una novela, creo que los grupos están formados ¿no?
Su mirada se poso rápidamente en sus alumnos, para luego mirar el papel entre sus manos.
—Bien.
Luego de una explicación sobre lo que debía llevar el trabajo, la campana sonó.
Aizawa dio un suspiro para levantarse de su silla y salir del aula, probablemente para ir al salón de profesores y echar una siesta.
A los pocos minutos...
Un portazo.
—Todo está bien, ¿Por qué? Porque estoy aquí —anunció el muy querido profesor de Educación física.
Toshinori Yagi.
El tiempo con él pasaba increíblemente rápido a diferencia de las clases con el profesor de Inglés y Español.
Finalmente llegó la hora del almuerzo, Todoroki estaba listo para ir a almorzar y ya.
No iba a quedarse ahí mirando como un pelmazo al chico de pecas, no jamás, el tenía dignidad.
No... Jamás...
Jodida mierda y entrale con lo mismo...
La sonrisa esa, exterminadora de heterosexualidad.
Y no, la cosa no termina ahí, el muy lindo tenía esas pecas...
Si. Pecas.
Pecas gloriosas que estaban salpicando sus mejillas, estúpidas y sensuales pecas.
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Regalame una sonrisa-Tododeku
FanficA Shouto le encanta ver esa sonrisa. Le encanta como ilumina cualquier día. Le encanta la manera en que hace saltar su corazón. Incluso estaba seguro que esa sonrisa podía opacar al mismísimo sol en verano. O tal vez curar el cáncer. Le encanta la...
