Respiró de nuevo intentando que ésta vez sus pulmones pudieran retener el oxígeno por más tiempo, pero era casi imposible, sus nerviosos y las ansias de saber que Louis Tomlinson estaba en ese cuarto de hotel, esperándolo, lo estaban volviendo loco. Claramente ya había hecho ese tipo de cosas antes, escaparse de su casa para no dar explicaciones al día siguiente, e ir a un hotel a encontrarse con el hombre que tocara esa noche, pero, la excitación de saber que Louis era el mejor amigo de su papá y que estaba prohibido, lo hacía sentirse más increíble todavía; era casi lo mismo que pasaba con Diego, siendo el marido de su mamá, pero no era para nada comparable, con Louis hubo deseo desde la primera vez que lo vio, desde la primera vez que lo vio con esa cara de placer que jamás había visto antes. No era lo mismo.
Comprobó de nuevo si era la puerta correcta en el mensaje que Louis le había enviado dos horas antes, avisandole donde y a qué hora se iban a ver. En el momento a Harry no le había gustado la idea de que el mayor mandara y dijera lo que iban a hacer, siempre era Harry quien mandaba en sus relaciones, pero lo dejó pasar, sólo esa vez, sólo porque se trataba de ese sexy hombre del que no se podía resistir.
Levantó la mano para tocar la puerta, pero antes de que su mano rozara la madera, la puerta se abrio dando paso a una completa oscuridad. Harry fruncio los labios confundido y tragó, no se esperaba que todo estuviera oscuro; dudó un momento en entrar, era extraño que Louis aún no apareciera para recibirlo, pero de todas maneras lo hizo, tragandose sus dudas. Cerró la puerta detrás de él y se formó un nudo en su garganta al no ver nada, era un conocido enemigo de la oscuridad, así que eso no le estaba agradando del todo.
–¿Louis?– susurró a la oscuridad, aún pegado a la puerta, esperando a que en cualquier momento se prendieran las luces. –Si estás aquí, contestame por favor.–
Sintió unas manos en su cintura que lo hicieron dar un pequeño brinco y se pegó más a la puerta listo para salir en cualquier momento si algo salía mal. Aún no estaba seguro de que Louis fuera el que lo estaba tocando.
–¿Louis?– preguntó de nuevo.
–Shhh.– se escuchó de la otra persona.
Harry cerró los ojos, aunque no había mucha diferencia de la oscuridad de la habitación.
Dejó que las manos subieran hasta su pecho y suspiró por como se sentía el roce con sus pezones.
Notó la erección que había comenzado a despertar desde antes de entrar al cuarto y suspiró de nuevo. A pesar de estar a oscuras y no saber con claridad que la persona que lo estaba tocando de esa manera era Louis, se sentía terriblemente excitado con la situación, tenía que reconocer, y hacer algo para sentirse mejor.
Harry subió sus manos y tocó los brazos de la otra persona, era hombre, sus brazos eran grandes y fuertes, estaba más seguro de estar con la persona correcta; siguió su camino hasta llegar a su cuello y hundir sus dedos en el cabello de esa persona, era suave. Cerró con fuerza sus dedos tomando una gran cantidad de cabellos en ellos y los haló hacia atrás con un poco de rudeza para poder posar sus labios en esa delicada piel del cuello que el otro hombre ofreció docilmente; su miedo se había ido, estaba completamente seguro de que era Louis.
Mordió una parte del cuello de Louis sin importarle que le doliera y luego lo succionó, estaba seguro que dejaría una marca, era lo que quería; escuchó un gemido de placer combinado con un poco de dolor del otro y sonrió en su cuello.
–Eso te va a salir caro.– susurró Louis con voz grave, excitado por el momento.
–No me importa, cobramelo como quieras.– susurró Harry de regreso con su corazón latiendole a mil.
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Juguemos a ser amantes. [Larry S.]
FanfictionLouis Tomlinson parecía tener una vida planeada, hasta que el hijo de su mejor amigo decidió hacerle una propuesta difícil de rechazar, a pesar de no ser lo correcto, pero... ¿Qué hay de malo en jugar un poco?