Cafeteria

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     —Bien Thunder, ojo en la mira, lente enfocado y...-Click- Listo, ahora solo esperar a que se revele. -Tomé un sorbo del café. No es como el de mi abuela pero está bien,¿Qué más puedo esperar? Sentir ese caliente acariciar mis mejillas siempre me daba paz.

     Mientras estaba en mis pensamientos y sensaciones, la foto se revelaba despacio dejando ver la imagen. Siempre consideré que era un buen fotógrafo, pero nunca fui modesto en este aspecto, siempre me gustó y me apasionó el mundo de la fotografía y no veo ninguna foto desperdiciada siempre se le puede sacar lo bueno y el provecho.

— Esto tardará un rato- suspiré viendo a través de la ventana.

     Todo se veía con total normalidad hasta que vi pasar a una chica, esos rizos pelirrojos, ojos claros y sus pecas color miel se hacía notar, pero cruzó la calle y desapareció entre los árboles del parque.

— Diablos, si solo hubiera tenido la cámara en mis manos-suspiré con decepción.

—Chico, aquí tengo sus waffles con fresas, aquí tiene el jarabe.

—Muchas gracias, muy amable señorita.

—No hay de qué, disfrute y buen provecho.

—Muchas gracias igual- espera ella no esta comiendo Thunder. Pensé con total vergüenza.

—Perdone señorita a veces mi mente tiene fallos - exclamé intentando arreglar el error.

—No se preocupe joven a todos nos pasa -dice ella entre risas.

    Mientras se iba poco a poco, vi como la polaroid ya se había revelado, — Quedo bien para mi gusto, a la vez que mastico un bocado de la comida siento mi teléfono sonar y vibrar.

—¿El hospital?, ¿para que sera?, ¡Buenas!

— Si, ¿Thunder Lovegood?

— El le habla.

— Se preguntará por que lo llamara el hospital. Bien a pasado una situación, su abuela acaba de tener un accidente y no sabemos si se repondrá, lo necesitamos urgente.

     Al escuchar esas palabras, sude frio, mi corazón palpitaba pero en un ritmo leve, sentí una presión en el pecho como si alguien agarrara mi alma, como alguien sujeta a una persona del suéter. Reaccione rápido y mantuve la calma, —se positivo Thunder, ella es fuerte ella es ¨Wonder Woman¨.

— Si claro ire de inmediato.

— Lo esperamos.

     Y así me encontraba yo, un joven de 18 años corriendo bicicleta por toda la ciudad, como a un niño que le acababan de robar su juguete en kindergarten. Corría lo mas veloz que podía intentando olvidar, esquivar y evitar a toda costa la realidad que se sentía.


























PD: Esta es mi primera historia espero que les guste, siempre quise escribir y por fin tuve los ánimos. Espero que la disfruten.


Nos vemos pronto:

Gady

P O L A R O I DDonde viven las historias. Descúbrelo ahora