Shock, eso fue, un maldito puñetazo directo al corazón. No sabía que hacer o decir y era como si me hubiera colapsado.
Sentía dos partes de mí buburjeando, la que quería avalanzarse sobre ella como en la escena de "la maldita lisiada" en la telenovela María la del Barrio.
Otra parte de mí sentía que se iba a derrumbar al instante y esas dos opciones comenzaron una lucha interna hasta que ganó la segunda parte.
Marco se separó al instante- ¡¿Pero a ti que te pasa?!- y al girarse me vió-Liv escuchame yo no he sido ella...
Pero yo me había ido, cerré la puerta y comencé a llorar.
-¡¿Liv que ha pasado?!- dijeron casi al instante pero yo colgué la llamada.
Lo que tanto había temido estas semanas se acababa de materializar delante de mí y sabía que esto iba a salir bien y aún así lo había forzado.
-Olivia tienes que escucharme- Marco entró en la habitación - esto no es mi culpa yo no sabía que ella...
-¡¿Qué no lo sabías?!,¡Te lo he dicho mil veces y no me has querido hacer caso!
Cogí mi maleta y me dispuse a salir.
-No, no lo hagas, porfavor Olivia.
-Marco esto no funciona ¿es que no lo ves?
- Sí funciona Olivia tienes que ignorar tus celos.
-¡¿Mis celos?! ¡Es muy fácil desde tu posición,tu eres el que se queda aquí con ellas, yo soy la que se va a miles de kilometros a esperar que le pongan los cuernos! ¡No pienso pasarme los años de universidad esperando tus llamadas o mensajes o mordiendome las uñas pensando en que estás con otras!
-¡De eso va una relación Olivia, de confinza! ¡Alomejor el problema es que no estás preparada para tener una!
Fue una puñalada directa. Apreté los puños e intenté controlar las lágrimas que habían vuelto a inundar mi visión.
-Olivia yo...lo siento no quería decir...
-¿Sabes qué Marco? El que no está preparado para una relación eres tú, te crees que puedes hacer lo que quieras sin que tenga consecuencias eres un inmaduro y encima te haces el sorprendido. ¿Quedar con tus conquistas delante de tu novia? ¿De verdad piensas yo voy a asentir y quedarme sentada en el sofá sin rechistar?
-Olivia porfavor no lo hagas,no acabes con esto.
-Tú eres el que lo ha acabado, no yo.
Se quedó quieto intentando decir algo pero no se salían las palabras, no me sorprende yo misma me estoy dejando llevar por mi primer impulso pero se que estoy haciendo lo correcto.
Cogí la maleta y bajé. Necesitaba salir ya de allí y volver a casa aunque tuviera que adelantar el vuelo.
Al salir llamé a un taxi y esperé que Marco no bajara, por que si me miraba me arrepentiría de mi decisión y en ese momento no necesitaba más dudas.
Pero lo hizo y en cuanto lo noté detrás de mi, mi corazón volvió a latie frenético cómo la Liv de hace un año cuando le veía por los pasillos.
-¿Ya está? ¿Me estás dejando? ¿Estás abandonado todo lo que hemos tenido?
-Marco, porfavor no me hagas esto más difícil- no quería mirarlo, no podía- te quiero más de lo que piensas pero esto no funciona y tu lo sabes. No volver a casa con este miedo, lo siento.
Me cogió suavemente el brazo- Estos meses hemos estado bien, porfavor, no me hagas esto..te quiero.
Algo dentro de mí se reblandecio y tuve un fuerte impulso de abrazarle y besarle pero me conozco y se cómo sería continuar con esto. Me veo a mi, no estando atenta en clase pensando en si alguna chica estará con él,con el temor de que alguna vez saliendo de fiesta o en la universidad olvide que tiene novia al cruzarse con cualquiera de sus anteriores amantes
-Marco esto es probablemente la cosa más dolorosa que he hecho en mi vida y al renunciar a ti, renuncio a una parte de mí pero no puedo con lo que conlleva esta relación.- el taxi se paró enfrente de mí y metí la maleta en el maletero intentado seguir sin mirarle.
Pero en ese momento, me cogió obligándome a mirarle y me besó.
Fue un adiós,un beso cargado de ansias y desesperación, como si ambos quisieramos disfrutarlo al máximo sabiendo que era el último.
Se separó un poco y vi como tenía las mejillas mojadas no sabía si de sus lágrimas o de las mías- Porfavor te lo suplico no lo hagas
Intenté controlar el lloro de mala manera y él me abrazó-Te quiero Marco y ojalá podamos volver a chocarnos de nuevo con otras circunstancias.
-¡Señorita es para hoy! ¡o se va ya o me marcho!
Asentí me separé, le di un beso en la mejilla y le limpié delicadamente la lágrimas qué rodo por su cara.
Me di la vuelta y me fui a meter en el taxi pero antes oí la voz de Valentina.
-Te lo dije, no fue buena idea traerla y antes de que se fuera habríais roto.
Cerré la puerta de golpe y ahí no pude retener el llanto.
-¿A dónde señorita?
-aereopuerto-fue lo único que pude decir con la voz quebrada. Le iba a echar tanto de menos que dolía físicamente, las lágrimas no paraban de salir y tenía la sensación de que algo me oprimía el pecho.
El coche arrancó y yo eché un último vistazo desde el cristal de atrás a Marco que permanecía inmóvil hasta que se transformó en un punto en la distancia.
¡Que nadie se piense que este es el final de la historia! Este es un capítulo muy triste y con el que he sufrido escribiendolo pero todavía quedan muchos capítulos y mucha historia esto sólo es el principio.
¡Nos vemos en el próximo capítulo!
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Esa Virgen Fue Mía [EDITANDO]
Teen Fiction[2 parte de "Esa Virgen es Mía"] A pesar de las distancias Liv y Marco deciden continuar con su relación tras marcharse a la universidad. Pero la calma de esos meses no durará mucho y es que cuando Liv viaja a Italia para visitarle las cosas se tuer...