Esa Virgen Fue Mía [EDITANDO]

42.Marco III

Me estoy volviendo absolutamente loco. No puedo parar de pensar en ella, mi conciencia se encarga de recordarmela cada cinco minutos haciendo que sea imposible mi concentración en el trabajo.

De vez en cuando me permito mirarla unos segundos desde mi despacho y son pequeños momentos como cuando empieza a moverse de un lado a otro nerviosa, se hace un moño con un lápiz o la cara que pone en la sala del café al degustar su capuchino, todos esos momentos que conforman lo mejor de mi día.

Hoy no había ido a la oficina por pasar su día con Mark. Solo su nombre es un puñetazo.

Puede que esta mañana haya sido un poco idiota al ponerla en esa situación pero esta vez han sido a mi a quien han afectado los celos.

Pero pensar en que ella ha gemido mi nombre con él es como un subidón de adrenalina por mi cuerpo y a la vez pensar que el ha estado con ella de esa manera me mortifica (que me esperaba,son novios)

- ¿Estás bien?- dijo Aiden, mientras esperaba el taxi para irme a casa

-Si- mentira una vez más

-Marco....te conozco lo suficiente como para saber que no es así.

-¿Y que quieres que te diga?

-¿Tal vez que sigues sintiendo cosas por mi hermana?

Cazado- Aiden tengo novia

-Y ella novio y se nota a kilometros que sigue sintiendo cosas por ti

-Madre mía menudo abogado defensor tiene Liv- reí. Ella sigue sintiendo cosas por mí, pensar en eso aceleró mi pulso

-Ríete pero al final siempre acabáis juntos

-Excepto esa vez en la que la dejé por que creíais que no podíamos tener una relación a distancia

-¿ y me equivoqué?- punto bajo y tenía razón.

Mi taxi llegó y yo le di una palmada en el hombro- mañana nos vemos para ver el mundial

-Trae unas cervezas y por cierto resistirte no te valió de nada la última vez y tampoco valdrá ahora.

El taxi arrancó y la frase de Aiden se clavó en mi mente.

Tenía un millón de sentimientos encontrados, sentía algo por ella eso estaba claro y negarlo más tiempo no iba a funcionar pero por otra parte estaba Diana. Echarla a un lado con todo lo que me ha ayudado a la mínima que aparezca Liv tampoco es justo para ella.

No tengo ni idea de que hacer, ni de como sentirme, que emociones puedo aceptar y cuales no es simplemente frustrante.

Llegué a casa y en el sofá me estaban esperando de brazos cruzados Luca y Gian

-¿No habíamos quedado el lunes? ¿Que hacéis aquí? - me quité la americana y la dejé en una silla

-¿Cuando nos ibas a contar que Liv está aquí?- empezó Gian

-Y que encima trabaja contigo- siguió Luca

Mierda- Os lo iba a decir pero no quería que os preocupaseis

-La chica que te rompió el corazón ha vuelto y encima trabaja contigo ¿ como no nos vamos a preocupar?

-Sois unos exagerados

-Dime que no has vuelto a sentir algo por ella- dijo Luca

Quise decir algo, quise negarlo, pero las palabras no salieron

-¡Mierda Marco!

-¡Que quieres que haga yo no controlo lo que siento!

-Estas bien jodido- añadió Gian

-Tu lo has dicho, pero no puedo hacer nada

-La hemos visto con su novio

-¡Pero te quieres callar!- Luca le pegó una colleja a Gian

-No me voy a coger una depresión por que habléis de ello. Yo mismo he conocido a Mark hoy por la mañana y no parece mal tío

-Pero aún así tienes ganas de matarle y enterrar su cadaver ¿adivino?- touche, me alegraba de que Liv me hubiera superado pero verla con él es una sensación de angustia constante.

-¿Y Diana?¿Cómo se lo ha tomado?

Suspiré- le montó una escena de Liv en el trabajo

-Ya te he dicho que no anda muy equilibrada el echo de que te la presentara Valentina no daba muy buena espina.

-Diana tiene miedo, eso es todo, se siente amenzada por ella

-Y tanto,solo hay que verte

-Lo que Gian quiere decir- le corrigió Luca- es que no te preocupes, tus supuestos sentimientos por Liv es solo la impresión de haberla vuelto a ver tras tanto tiempo, solo eso, así que dentro de unas semanas todo se calmará y volverá a la normalidad.

Lo dice como si fuera fácil pero eso es por que no ha conocido a Liv. No creo que pueda superarlo, por que nunca lo he echo y nunca lo haré.