Capítulo XX

6 3 0
                                    

Ema |Débora|

Nos encontramos todos desayunando como toda una familia feliz. Daniel no tiene ni idea de que recuperé la memoria y espero que siga así por el momento.

Llevé un pedazo de melón a mi boca. Le di una rápida mirada a Aiden quien comía tranquilamente frente a mí, a mi lado izquierdo estaba Candy y a mi derecha se encontraba Daniel, Mavis también se encontraba en la mesa desayunando junto a nosotros ella se encontraba a mano derecha de Aiden.

—No entiendo por que la servidumbre tiene que comer con nosotros. –miro a Mavis, quien me mira con desagrado.

Todos en la mesa posaron su mirada en mí. —Débora, comportate por favor.–habla Daniel mirándome seriamente.

—¿Por que tendría que hacerlo? Por decir la verdad. –digo mirando a Mavis fijamente. —Ella debería comer en la cocina como todos los demás empleados. –callo un momento. —¡Ahh sierto! Ella no es como los demás empleados de esta casa, por que los demás no se acuestan con su jefe para demostrarle confianza.

—¡VASTA DÉBORA!

—NO ME LLAMES DÉBORA MI NOMBRE ES...

Flashback

Ema necesito tu ayuda.

—¿Quien de ustedes es Ema Thirlwall?

—Oh Ema veo que estas libre.

—¿Ema eres tú?

—Chicos ya, vamonos Ema.

—Hija no me digas que tu y Ema son lesbiana y por eso es que se mudaran juntas.

Hermione solo te llamo para avisarte que mañana iré a visitarte a tu departamento con Yeri te la quiero presentar.

—Algo que siempre quise hacer, perdoname Ema.

—¿Ema?

—¡Ema!

—Sigues siendo la misma Ema de siempre pero más hermosa y mejorada.

Ema quería pedirte disculpa por averte gritado por un simple helado.

Ema, nun...ca ol...vides que te amo.

—Lo siento mucho Ema.

—Haber Ema ¿que sucede contigo?

Ema tu eres mi hija y ella la mujer que amo.

Fin de Flashback.

Esos y algunos otros recuerdos llegan a mi mente. En todos dicen mi nombre.

—ES EMA HERMIONE THIRLWALL, ME LLAMO EMA. –le respondo a Daniel quien se queda sorprendido por lo que le acabo de decir.—TU DÉBORA ESTÁ MUERTA, MUERTA.

—¿Qué dijiste?

—Lo que acabo de decir. –digo con simpleza.

—Mavis encargate de ella, no podemos permitir que abra la boca y nos caiga la policía. –abrí los ojos como platos al ver como Mavis me apuntaba con un arma.

—Daniel no puedes matarla. –dice Aiden.

—¿Quién me lo impide? –pregunta el con una sonrisa burlona.

Territorio De Enanas |2|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora