¿Porque Confío?

1. Hacia allí

Realmente quería salir de allí a ver el mundo de fuera. Aún no estoy del todo convenciada pero llevo planeando esto durante muchos meses.

Tenia un plan para escapar bien planeado en mi mente. Esperé hasta que todos estuvieran dumiendo, me levanté y fui a la habitación de la directora para coger la llave, de la puerta, la vi estaba allí encima de la mesita de noche, estaba a un paso de cogerla, cuando veo una luz de linterna que traspasaba el cristal de la perta, no sabía que hacer, tenía mucho miedo, seguidamente, me escondí en un hueco que había entre el armario y la pared, estuve bastante tiempo con los ojos cerrados, de pronto abro los ojos y giro la cabeza lentamente para ver si el guardía seguía allí y es cuando sonreí aliviada porque no veía nada, cogí la llave y rapidamente me deslice por el pasillo a la perta principal, la abrí y salí entre la libertad y yo solo había una puñetera puerta de hierro. Escalé la puerta y salí a fuera.

Huí lo más rápido possible para alejarme del orfanato. De pronto me encuentro en un camino oscuro, se escuchaban unos terroríficos ruidos, estaba horrorizada, estaba completamente sola en medio de la nada. Seguí caminando, detrás de unas montañas se veía el sol aparecer. Por lo menos empezaba a ser de día y podría ver por donde caminaba.

Estaba muy cansada, solo quería llegar ya a algun pueblo para poder, pedir comida y agua en alguna casa. De pronto una enorme sonrisa se dibujó en mi cara, estaba viendo una humilde casa al final del camino.

Aceleré el paso, es cuando siento un golpe en la nuca que me hizo perder la conciencia, lo último que recuerdo es ver una sombra que se me hacercaba.

***

Abrí los ojos, veía borroso, una señora de cincuenta y tantos años se me hacercaba. Ella me preguntó si estaba bien. Yo no podía hablar asin que asentí con la cabeza. Entonces ella me acarició el pelo y me dijo que no tuviera miedo que ella solo quería ayudarme. Poco a poco me iba encontrando mejor. La señora llamada, Esmeralda, me cayó muy bien.

****

Esmeralda un día por la mañana me dijo que ella se iría a comprar. Y yo como soy muy cotilla empecé a inspeccionar por la casa. Veo unas escaleras que parecían conducir a un sotano, tenia un presentimiento muy raro, por ello, baje lentamente por las escaleras, intentando ver lo máximo possible, pero tampoco podía ver gran cosa ya que estaba todo muy oscuro.

Me entra un escalofrio y siento como una mano se me hacerca al hombo y me toca...