2. ¿Quien eres?

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Capitulo anterior: Cuando en un momento siento como una mano que me estaba tocando el hombro...

De pronto empiezo a gritar e intentar subir las escaleras lo más rápido posible, estaba cagada de miedo. Subí arriba para poder escapar, cuando escucho la voz de un chico que está detrás mio, diciendome que él sabe toda la verdad. Y la gran pregunta que rondaba en mi cabeza -¿Pero que gran verdad? Seguía aterrada, pero esas palabras no dejaban de resonar en mi cabeza queria saber de que verdad estaba hablando. Estaba a punto de abrir la puerta, pero me paré, me giré lentamente, delante mio estaba parado él, un chico joven, palido, con el peso ocuro y los ojos claros, de un precioso azul marino.

Estaba flipando, tartamudeando le intente decir, de que verdad estaba hablando, cuando el de pronto me interrumpe para preguntarme como me llamaba.

- Mi nombre es Harvey ¿y tu? - le pregunté un poco nerviosa.

- Austin- me dijo hacercandose a mi.

- ¿Como es que estabas en el sótano de casa de Esmeralda?

- Me enviaron para ayudarte. Ya se tu historia - Me dijo

- ¿Que sabes? - Le pregunté desconcertada.

- Tus padres siguen vivos - Me soltó de golpe.

...
No dije ni una sola palabra. ¿Como sabe eso?, ¿Quie es él? ¿Que cojones?
Todas estas peguntas me dejaban desconcertada. Que hago ahora.
¿Me quedo para decubrir que verdad se esconde detrás de esto? Sentía confianza cunado estaba con él, pero esque no lo conozco de nada.

Finalmente me decidí se que suena muy loco, pero quise confiar en el.

- Vale ¿me puedes decir como sabes eso? - le pregunté

- Porque soy.... soy..... vampiro.

- ¡¿Que?! - grite

- Que soy vampiro - dijo mostrandome sus colmillos

***

Me quería morir, joder, porque me pasan estas cosas, no lo entiendo, un vampiro ¿enserio?
No sé tenía un presentimiento de que tenía que confiar en el.

En mi cabeza sonaba irónico. Estoy hablando con un vampiro.
Ya está yo quiero recuperar a mis padres si este vampiro sabe donde estan mis padres tendré que confiar en él.

Con una sonrisa me dijo que lo siguiera y sin decir ni una palabra lo seguí. Salió de casa dirigiendose al bosque del pueblo, me daba mal royo, pero igualmente seguí detrás suyo, parece como si me hubiera embrujado. Entramos al bosque, el sol se empezaba a poner. Entonces sí que me conciencé de que estaba siguiendo a un deconocido que encia es vamipiro a un bosque. Miraba a todos lados, ya estaba ascureciendo.

- Venga - me dijo para que acelerara el paso.

Asín que le hice caso y caminé a su lado.

- A donde vamos?

- Iremos a mi cueva...

De repente un gran trueno sono, del susto salte y me escondí entre sus brazos. Una riallera salió de él. Entonces me alejé,esto es raro no sé porque cada vez que lo miraba una gran sonrisa de idiota se dibujaba en mi cara.

- ¡Aqui! - dijo señalando con el dedo.

Estabamos a muy pocos pasos de la cueva cuando de pronto veo una sombra, la misma sobra que vi al principio antes de marearme, se metió entre los arbustos. Tuve un mal presentimiento, sentía que algo iba a pasar. Intenté hacer como si nada y seguir a Austin.

{***}

La cueva estaba protegida por una gran piedra la cuál se abrió con la mano de él. Por dentro estaba iluminada por unas pequeñas antorchas al rededor. Cuando mas profundo entraba más fuerte era el presentimiento. Él muy confiado me agarró la mano, me sonrojé e intente quitar mi mano, pero cuanto más la intentaba apartar me agarraba mas fuerte.
De pronto abre la boca y dice.

- No me sueltes la mano, ahora vamos a bajar a mi escondite.

- ¿Donde está? - pregunté muy seria.

- Ahora lo verás.

- Ahh- grite

La tierra se abrió por la miatd y empezamos a caer abajo. Cerré los ojos, no vi nada hasta llegar abajo.
Parecía una carcel, estaba todo oscura y la iluminación era de color rojo sangre. Todos los que pasaban me miraban como si me quisieran comer. Agarré a Austin, entonces me llevó a una gran casa.

- Dequien es esta casa? - le pregunté

- Mi hogar dulce hogar... - dijo el muy simpático.

- ¿Aún no se porque me has traido aqui? - le questioné.

- Todo a su tiempo.

Entamos en su casa y no había nada. Él me llevo a la planta de arriba. Allí estaba su habiatación. Era una habitación como las tipicas habitaciones de los científicos malvados.

- Esperame un momento aquí - comentó Austin.

- Bueno vale no tardes - le dije con una sonrisa.

Salió de la habitación, de pronto escucho la cerradura de la puerta cerrarse.

Austiiiiin- grité

¿Porque Confío?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora