bad guy¹ - loki; thor ragnarok

𝖘𝖊𝖎𝖘

𝖘𝖊𝖎𝖘 . 𝖋𝖆𝖑𝖑𝖎𝖓' 𝖆𝖑𝖑 𝖎𝖓 𝖞𝖔𝖚
( seis: fallin' all in you )

Mal abrió sus ojos como platos al ver al dios del trueno salir con su cabello cortado. Soltó un grito ahogado, y Loki le tapó la boca casi de inmediato.

— ¿Quieres que nos atrapen o algo? — la chica le dirigió una mirada irritante a Loki, y quitó la mano de encima de inmediato — Nos tomarán de rehenes si saben que lo conocemos...

— Por una vez en tu vida Loki — el mencionado alzó una ceja — cállate. Y no me detengas.

La chica se paró y caminó hacía afuera de aquel piso, en donde se encontró con un pasillo con unas cuantas luces y una ventana al final. La chica sonrió victoriosa, corrió hacía la ventana, la rompió, y con un hechizo en susurro se cambió de prendas rápidamente a su ropa de batalla.

Mal exclamó otro hechizo, y terminó transportandose a la nave de la chica morena que había visto más temprano esa noche.

Valkyria, al verla, soltó un grito y después rompió en risas.

— ¡Por Odin! — Mal abrió sus ojos sorprendida y sonrió — Si, si, ya me di cuenta de que querías estar conmigo. Tu noviecito, príncipe de Asgard ¿te dejó o algo?

Ahora Mal rió, negando y tomando una cerveza de por allí.

— Loki nunca podría dejarme — dijo la chica —. Murió. Supuestamente. Por eso como que dejamos de ser... Algo.

Valkyria negó, divertida.

— No siquiera sabes si eran algo formal, ¿verdad? — Mal asintió, tomándole a su cerveza — ¿Desde cuándo se conocen?

Mal alzó una ceja, pensando.

— Unos cuantos meses — dijo Mal —. Lo conocí cuando escape de mi madre ella... Digamos que tiene planes para nada agradables, y es conocida de los reyes, o bueno de los que eran los reyes; de Asgard. Entonces me tomaron bajo su cuidado y me volví un poco cercana a él, pero al poco tiempo murió en batalla.

— Supuestamente — dijo Valkyria, repitiendo las palabras de la bruja.

— Si — dijo ella — después resultó que estaba suplantando a Odin y después vino todo lo de mi madre y... Ya no quieres saber nada.

Valkyria rió.

— Soy Valkyria, un gusto.

— Malorie. Un gusto igualmente.

Fue entonces cuando un grito eufórico se escucho de la arena. Mal frunció el ceño y caminó hacía el pico de la nave para ver de que se trataba.

Era Thor, celebrando algo. Malorie al principio no entendió a que se refería, hasta que vio al increíble Hulk enfrente de él.

La chica comenzó a reír a carcajadas, imaginando que Hulk le iba a romper el trasero a Thor si este festejaba demás.

— ¿Qué? — preguntó Valkyria. Mal la volteó a ver y sonrió.

— Es Hulk, lo conocemos — la morena alzó una ceja, sorprendida — es un vengador. Y tiene unos poderes increíbles. Y es mitad hombre, solo que se ha quedado atrapado en el hombre verde por un largo rato.

— Ah... — Mal asintió.

Después de los largos festejos de Thor, el mismo lo trató de calmar. Obviamente no pudo, y terminó siendo aplastado varias veces.

Mal sabía que Loki estaba lejos, pero parecía que lograba escuchar su risa y ver su sonrisa maliciosa. Ese hombre era realmente sorprendente.

Y claro, después de unos segundos de pelea, Thor terminó inconsciente y Mal solo sonreía al ver que si le habían pateado el trasero.

La verdad era que si, su propósito al principio había sido salvar al dios del trueno pero al final se terminó entreteniendo con la pelea.

— Supongo que es hora de que me vaya — dijo Mal —. Eres una buena compañía.

— Tú también niña hechicera — Mal rió, asintiendo.

La chica susurró un hechizo y se transportó a la salida del Coliseo, en donde se encontró con un enfadado Loki. El de cabello cenizo negó con la cabeza y la tomó del brazo con fuerza.

Mal estaba a punto de protestar, pero recordó que lo había dejado solo y mejor se quedó callada. Aunque sí soltó uno que otro quejido, y Loki sólo rodaba los ojos ante esto.

Al llegar al lugar en el que se estaban quedando, Loki la empujó a la cama y Mal frunció su ceño.

— Me dejaste solo.

Aquí estaba el problema. Mal sabía que Loki odiaba estar solo, y es por eso que siempre regresaba.

— Loki, perdóname, no quería pero...

— Pero te moleste, y mejor te fuiste.

La chica no dijo nada.

— Maldita sea Mal — se sentó al lado de ella en la cama, hundiendola ante su peso —. Hice esto por nosotros. Pensé que, tal vez, te gustaría estar a solas conmigo de nuevo. Pero no estaba ni cerca ¿verdad?

Mal puso su mano en la de Loki. El de cabello negro la miró con esperanza.

— Bueno, por lo menos hubieras empezado por un café ¿no?

El Dios del engaño rió, negando con su cabeza.

— Las bromas no mejorarán la situación.

— Pero esto sí.

Mal lo tomó de la mejilla, y dirigiendolo a su cara, le plantó un beso suave y cálido.

Loki se sorprendió, y se dejó llevar por el momento. Tomó a Mal de la cintura y la acercó a él. Ambos se estaban regocijando con el beso, disfrutando cada esquina de sus bocas como si fuera el último minuto de sus vidas.

Cuando se separaron, Mal miró a Loki con una sonrisa.

— Siempre sabías que me gustabas ¿no? — preguntó la de cabello morado.

— Ajá — dijo el dios — ¿Tú sabías que me gustabas también?

Mal rió, juntando su frente con la de él.

— Oh, querido — Mal parpadeo, poniendo sus ojos de color verde claro — yo no te gustaba. Estabas cayendo completamente enamorado por mi.

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