No puedo creerlo. Otra vez arruinado el momento con Nathaniel. Aún me pregunto cómo es que sabe en qué momento debe llamar.
-Nath- Lo llame incómoda.
-Puedo notar que no estás disfrutando esto- Estaba algo apenado pero ambos teníamos nuestros latidos y respiraciones aún agitados.
-No es eso- Volví a ver la pantalla de mi celular y Adam había terminado la llamada- Tengo que hacer una llamada importante.
-¿De quién es esa llamada tan importante?- Pregunto con el ceño algo fruncido.
-Tranquiló, es que tengo que llamar a Adrián para saber si podríamos pasar este verano en su casa- Lo tome de su mano- Y tú estás invitado.
-Eso me encantaría amor- Es la primera vez que alguien me dice amor. Es muy empalagoso.
-Okey...creo que deberíamos entrar de una vez- Entramos de nuevo a mi casa y ambos observamos que en el comedor los cubiertos estaban casi listos, lo que significada que era hora de comer.
Aún no tenía apetito pero no quiero que mis padres sospechen nada. Además, tengo que hacer una llamada a Adam.
La comida fue algo aburrida ya que Nath les robó por completo la atención a mis padres hablando de su importante partido este viernes. Después de la comida Nath se tuvo que ir y mis padres regresaron a su trabajo que los absorbía por completo así que yo subí a mi habitación.
No convivo mucho con mis padres pero a perderlos de vista por todo un mes. Me quedo con un desayuno y una comida juntos como una familia normal.
Al estar ya en mi habitación y sola, decidí devolver la llamada a Adam.
-Adam: Hola.
-Hola.
-Adam: ¿Por qué no respondiste mi llamada?- Eso significa que no estaba enterado que Nath estaba conmigo.
-Estaba ocupada con mi tarea.
-Adam: ¿Y ya haz acabo tu tarea?
-Mmmm si de hecho la acabo de terminar hace unos minutos- Dulces mentiritas
-Adam: Pues arréglate que esta noche paso por ti.
-Y no crees que es sospechoso que vengas por mi un martes en la noche.
-Adam: ¿Tienes algún otro día libre?- Tal vez me haga un tiempo para salir el viernes con Adam. Después de todo los partidos de Nath no duran mucho.
-El viernes voy a estar libre pero dime la hora y el lugar.
-Adam: A las 9:00 pm. ¿O tiene algo más que hacer con el niño rubio?- Alguien más se siente amenazado.
-No. A las 9:00 esta perfecto.
-Adam: Entonces nos vemos pequeña. Te llamaré el viernes para recogerte. Otra cosa, te tendré un regalo.
-Claro señor Pierre. Besos.
Termino la llamada y pongo mi celular en mi escritorio.
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Mi Pequeño Pecado
RomanceMarian Portela es una chica de 17 años la cual aparenta ser la típica chica perfecta, lindo rostro, carismática, buena estudiante y con la vida prácticamente arreglada. Entre sus intereses está la fascinación por jugar con los chicos y ver cómo uno...