Love, tragedy and a happy ending. Larry Stylinson - Mpreg

Capítulo VI

LOUIS' POV

Esta semana había sido, sinceramente, agobiante. Los antojos de Harry parecían multiplicarse con los minutos y ponerse mas extraños cada vez. Apenas y había logrado dormir unos cuantos minutos porque extrañamente sus antojos solo salían a flote por las noches. Harry estaba demasiado sensible, se quejaba constantemente que esta gordo y que es mi culpan pero el verdadero problema no es ese; es que no he podido descansar en absoluto.

A la sexta noche supe que iba a enloquecer; el antojo de ese día eran "albóndigas con sirope de chocolate". ¿Dónde carajos voy a conseguir albóndigas a la 1:45 a.m?. Golpeé el volante del auto con fuerza, llevaba exactamente una hora y media conduciendo pues no podía encontrar ninguna cafetería abierta cerca de casa y si no volvía con las jodidas albóndigas estaría en serios problemas.

Unos treinta minutos después- ya sumaban dos horas fuera de casa- como por arte de magia apareció frente a mi una cafetería, esperaba que tuvieran albóndigas. Aparqué el auto y me dispuse a entrar al lugar. Seguía vistiendo mi sexy pijama de perritos pero ¿a quién va a importarle la vestimenta a estas horas?. Sonó la campanilla arriba de la puerta y una chica con cara de pocos amigos estaba detrás del mostrador.

Buenas...noches. Quisiera una orden de albóndigas con... Sirope de chocolate. Por favor- hice mi pedido de la forma más normal que pude. La chica me miró de una manera extraña pero dijo nada. Entró a la cocina y a los pocos minutos apareció con una cajita en sus manos y una botella se sirope de chocolate.

¿Quieres el sirope en las albóndigas?- preguntó sin ningún interés.

No, si pudieras ponerlo en otro deposito te lo agradecería.- la verdad es que era !mejor así. No sabía si Harry en verdad fuera a comer eso. La chica terminó de preparar mi orden, me cobró y salí de ahí lo más rápido que pude. Volví a casa.

Pasé por la cocina para tomar un tenedor y subí a la habitación para darle a harry sus albóndigas. Entré a la habitación solo para encontrar a Harry dormido plácidamente. Dejé salir un suspiro cansado, puse las cosas en la mesita de noche y me dirige a la cama rogando que el despertador se apiadara de mi y no sonara nunca.

***

Sentí como si solo hubiera dormido 5 minutos. Los ojos me escocían y el maldito despertador no dejaba de sonar. no tenía ánimo alguno de levantarme, sentía que la cabeza me iba explotar, mis horas de sueño se habían reducido a cuatro cuando mucho; no entiendo como es que aún sigo con vida.

Lou-lou.- sentí unos brazos enroscarse en mi cintura.- levantaté dormilón, se te hará tarde.- dijo Harry mientras repartía besos en mi cuello y espalda evitando que volviera a dormir gracias a la corriente electrica que sus labios enviaban a mi piel. salió de la habitación sin decir nada más. me levanté y fui directo al baño, me cepillé los dientes y entré en la lluvia artificial de agua fría.

quince minutos después ya estaba listo para ir al trabajo, estaba de muy buen ahora lo cual no sé si fue por el agua fría o la manera en la que Harry me despertó, supongo que lo segundo es mas probable. escaleras abajo, un olor a café y tocino me dio la bienvenida. en la cocina estaba Harry preparando el desayuno, no recuerdo cuando fue la última vez que lo había hecho.

Buenos días, bebé.- le di un beso en la mejilla y lo abracé por la espalda reposando mis manos e su vientre, formano circulos imaginarios en él.

Buenos días.- respondió dándome un pequeño beso en los labio y siguió cocinando.- pronto el tocino y los huevos estarán listos, cariño.- dijo él.

¿irás hoy a trabajar?- escudriñé en el refrigerador por un poco de jugo de naranja.

Si,Ivan dice que todos preguntan por mi y la verdad extraño pasar tiempo ahí, aunque no podré hacer mucho esfuerzo físico por un tiempo.- sirvió el desayuno y lo llevó donde yo estaba. le ayudé con los platos mientras el se sentaba junto a mi.