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Jughead:

Abrí lentamente los ojos y intenté ver dónde estaba.

—¿Dónde estoy?

—Vaya, hasta que despiertas— dice un chico saliendo de la oscuridad

Creo que lo he visto antes.

En eso el hace una rara señal.

—Hola Juggy— dicen

—¿Betty?— pregunté no muy seguro

—No, pero no tarda en llegar— dice una chica de cabello castaño con rosa.

Escucho unos pasos y logró ver a mi padre junto a Betty.

—Betty, ¿Qué rayos hago aquí y por qué estoy amarrado?

—Todos afuera— ordenó FP

FP me ve serio y Betty solo de cruza de brazos.

—¿Dónde estamos?— pregunté

—Sin hablar— me ordenó Betty

Guarde silencio.

—Creo que alguien se a portado muy mal, ¿No crees FP?— le dije Betty

FP se acercó a mí.

—Seré claro hijo, quiero saber ¿Dónde me escondiste la droga?

Mierda...

—¿Para que la quieres? ¿Están importante para ti la droga? ¿Incluso más que tu propio hijo?

—Tu eres lo más importante para mí hijo pero quiero que entiendas que la droga también lo es ya que al momento de que tu interrumpiste la entrega se volvió un peligro tanto para ti como para todos nosotros

—¿Por qué?

—Por tu culpa una de las bandas con las que teníamos un tratado de paz y digo teníamos porque ya no lo tenemos, nos está buscando y quiere su droga. Y no es que nos interese dónde está pero si no de la damos en menos de 6 horas ellos acabarán con nosotros— explica Betty

—Les diré dónde está pero por favor ya sueltenme

—Uh, creo que no se va a poder—dijo Betty

—¿Qué?— pregunté incrédulo

—No te desatare hasta que haya resuelto este problema que has causado, tómalo como un castigo. Ahora dime dónde está la droga Jughead— dice mi papá

Suspiré.

—Está en las orillas del río Sweet Wather, hay un árbol marcado con un signo de interrogación

FP asintió.

—Vuelvo después de hablar con los fantasmas, Betty cuídalo

—¡¿Qué?! ¿Por qué siempre me pones de niñera?— se queja ella

—Tu también estás castigada señorita

—No te portes como un padre ahora FP

FP niega con la cabeza y se va.

—Entonces...¿vienes seguido por aquí?— dije para romper el hielo

Betty sonrió.

—¿Quieres saber?— contestó

—Creo saber la respuesta

Betty dio media vuelta y camino hacia la salida.

—¿A dónde crees que vas rubia?

—Por algo de comer

—¿Y piensas dejarme aquí?

—Si

Hay veces que no me sorprende la sinceridad de esta chica.

—Por favor no me dejes aquí solo

Betty me miró.

—¿Por qué debería quedarme?

—Porque estás enamorada de mí y no dejarías a este galán solo en donde quiera que estemos

Betty rodó los ojos.

—Haré como que no dijiste nada de eso y me quedare porque no soy tan mala persona y porque te tengo un poco de lastima

—Yo sé qué te gustó Elizabeth

—¿Cómo me llamaste?

—Rayos...yo...por favor no me golpees de nuevo

Cerré los ojos esperando algo.

—Nadie me llama así excepto mi...

Abrí los ojos y miré como Betty se sentaba en el suelo.

—¿Estas bien?— pregunté

—¿Por qué odias tanto a FP?— pregunto de repente.

No me esperaba eso.

—Es una larga historia...creó

—Tenemos tiempo—

—FP Jones antes de ser una serpiente era un hombre trabajador y dedicado a su familia, recuerdo que cuando tenía alrededor de 7 años paseaba por mí vecindario y miré a un niño jugando en su casa del árbol entonces corrí a casa y le dije a papá, el dijo que si quería podíamos hacer una para que jugará, estaba muy emocionado y ese mismo día comenzamos a construirla, duramos alrededor de 1 o 2 semanas haciendo la casa y cuando por fin estuvo lista pasó algo. Estaba jugando tranquilamente a los piratas en la casa del árbol y entonces llegaron unos hombres de traje y tocaron la puerta de mi casa...ese día nos hecharon de la casa ya que mi padre no había pagado la renta entonces él se vio obligado a decirnos que no trabajaba en una constructora desde hace un tiempo y el dinero con el que llegaba a casa era producto de su otro trabajo, desde ese momento todo cambio. Mi hermana Jelly Bean y yo lo mirábamos cada vez menos y cuando lo hacíamos el ya no era el mismo padre cariñoso que era y a mi madre la trataba con indiferencia...la verdad no quiero contar más

—Vaya...pensé que era algo así solo porque eras un chico rebelde y estúpido

—Y ya que estamos hablando de padres ¿Por qué no vives con los tuyos?

—Simple, no tengo padres

—¿Están mu...

—No, ellos me abandonaron cuando era niña— suelta como si fuera lo más normal del mundo

—¿Y FP te adoptó o algo por el estilo?

—Se podría decir que si, él fue la figura paterna que nunca tuve

—¿Y que se siente ser una serpiente?

—Es... divertido

Betty y yo seguimos hablando de cosas estúpidas hasta que le dio hambre y me desató para ir al bar de las serpientes por algo para saciar su apetito, su gran apetito.

SerpentsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora