La maldición de Allegra

Capítulo 2. En cuerpo ajeno

La melodía suave de "The Climb"  de Miley Cyrus sonaba en el radio despertador, Allegra pensó ¡¿Diablos de dónde viene esa música cursi?!, atolondrada por el sueño se despertó restregando sus ojos para encontrarse en una habitación que no era la suya, pero que solía recordar bastante bien.

Era lila con tonos rosa, algo pequeña, al fondo un pequeño escritorio sobre el cual descansaba una portátil blanca y múltiples peluches, estaba repleto de libros justo como recordaba, una biblioteca con antiguas películas un tv y algunos libros más se hallaban más allá, las paredes llenas de afiches de One Direction, Selena, Miley y otras estrellas adolescentes... sí, alguien no había superado sus 13 años...

Aquella era la habitación de Emma, ella la recordaba, pasaban mucho tiempo allí cuando aún eran amigas, la pregunta era ¿Qué carajo hacia ella en aquel lugar?... ¿estaba soñando?.

Se levantó necesitaba ir al baño porque su vejiga estaba a punto de estallar, llamó en voz baja un par de veces a Emma, ella tenía que tener una explicación, lo último que recordaba era haberse dormido en su cama, ¿como había ido a parar allí?, ¿acaso de verdad era una pesadilla?, pero se sentía tan real!... pensó que tendría que dejar de tomar esas pastillas para dormir la hacían alucinar.

Luego de hacer pis notó algo extraño, sus manos... no las había visto hasta ahora, eran tan pálidas, sin dudarlo se acercó al espejo del baño con miedo, y lo que vio la hizo paralizarse, el rostro frente a ella era el de Emma, comenzó a tocarse desesperadamente el rostro, su cabello, esto tenía que ser una pesadilla, Dios sus senos habían desaparecido, sin previo aviso soltó un grito.

Esto no podía estar pasando, era el peor sueño o alucinación que había podido tener. De pronto escuchó la puerta de la habitación abrirse.

-Emma cariño estas bien?, no me digas que volviste a encontrar la araña de tu hermano en el baño.- esa era la voz de la madre de Emma, Allegra salió del baño con miedo y se encontró con la señora Wyland, estaba dejando dinero en la mesa de noche.

Al mirarla sonrió, se acercó y la besó en la mejilla, Allegra estaba como en un trance totalmente confundida.

- ¿Fue la araña verdad?, Nick es un desastre con sus cosas, de seguro se escapó de nuevo, le diré que venga a sacarla antes de irse al colegio, te dejé dinero, come en la cafetería no me ha dado tiempo de hacer desayuno, te amo cachorrita.- la mujer la besó en la frente y se marchó dejando a Allegra en mitad de la habitación.

Esto no podía estar pasando, tenía que ser un sueño, se acostó en la cama y cerró los ojos con la esperanza de abrirlos y hallarse en su casa pero eso no pasó, de inmediato comenzó a llamar a Emma entre susurros ella tenía que estar por allí, ella tenía que saber que mierda estaba pasando.

De pronto sin avisar Nick abrió la puerta del cuarto, sólo llevaba una toalla colgando en su cintura y Allegra no pudo evitar clavar su mirada en el definido cuerpo del chico, estaba chorreando agua y sus hombros estaban minados de pequeñas pecas.

- Mamá dijo que Dixie te asustó, ¿donde está?.- Dijo el chico buscando con la mirada.

- Ah?.- fue lo único que ella pudo contestar.

- Dixie, mi araña... Levántate Emma pareces un puto zombie, reacciona, ya es tarde.- Agregó el chico entrando al baño.

Salió unos minutos después.

- No está, ¿dónde la viste?.

-Ehm... salió... s..salio por el pasillo.- mintió, no podía decirle que ella no era Emma... él no le iba a creer, ¿a quién engañaba ni ella misma se lo creía?.

- Bien, si la vez de nuevo avisame tengo que meterla en su caja de vidrio.

Dio media vuelta y se alejó de allí cerrando la puerta tras de si.