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Antes de empezar a contar mi historia, me gustaría contarles un poco sobre mí. Mi nombre es Akari Kinomoto y soy una omega de la manada de Zorros Dorados, más exactamente, la hija pequeña de la familia principal (Kinomoto) y líder de la manada. La verdad es que es una manada de semizorros comunes, solo hay una familia semizorro dorado, la mía.

(Me gustaría poder poner una foto pero no tengo idea de como hacerlo, así que cualquier cosa, publicare las fotos de los personajes en la conversación ok? Disculpenme ;^;)

Como todos los otoños, todas las manadas de la ciudad realizamos un
Festival de la Cosecha, simbolizando el cambio de las estaciones.... y de los de la manada. Normalmente, todos los mayores de 18 años deben estar casados o comprometidos para esta fecha. En cambio, los pequeños como yo, (16años) que recién tuvimos nuestro 1er celo, debemos ir al festival a buscar pareja.Comúnmente, las parejas son decididas desde antes de que nazcamos, dependiendo del los títulos y poderes de las familias.

Había salido con mis padres, mi hermana y su esposo, Hanako (madre-omega), Kaoru (padre-alfa-líder de manada), Natsuki (hermana-omega) y Akira (alfa). Esto era un milagro, mi hermana se había enamorado de Akira en su adolescencia, pero como dije antes, mis padres ya la habían comprometido con una familia de más poder. Pero un mes antes de la boda, ellos decidieron fugarce de la ciudad para ser felices.

Esto enojo mucho a mis padres ya que mancho él nombre de la familia y su reputación en la sociedad. Así que, ya no la reconocen como parte de la manada como castigo, pero, al menos se hablan. Ahora, ella vive con su familia política y ha conseguido un buen trabajo y logran mantenerse entre todos. Pero a mi no me van las cosas tan bien como a ella.

Después de ese suceso, mis padres pusieron toda su atención en mi. Tenia que acompañarlos a un montón de reuniones y festejos importantes con los lideres y herederos de otras mandadas, tanto de nuestra comunidad, como fuera de esta. Como tal, me volví la heredera del título de la familia, y cualquiera que se casara conmigo, terminaría con un título en la familia principal, y quizás, siendo él próximo líder de la manada.

  Cuando me encontraba pensando esto, me fije que mis padres estaban distraídos y mi hermana y su esposo ya se habían ido. No pude resistir y aproveche la oportunidad para escapar, escapar de mis padres, de mis deberes, de todo. Solo quería ser libre de todo eso por una noche y disfrutar del festival como cualquier chica normal de 16 años.
 
                                .....

Estaba paseando por todo él festival, había estado jugando algunos juegos y comprado muchos dulces. Él festival estaba a punto de explotar de tantas personas que tenía, lobos, zorros, leopardos, y muchos más. Los niños corrían por todos lados, jugando y riendo y las luces de los faroles tenía tonos en naranja, rojo, rosado y morados, colores de otoño, que le daba un aire mágico a la plaza. Estuve caminando un pequeño tiempo sin rumbo, riendome o quedándome asombrada por todo lo que veía. Aunque viniera todos los años, jamas dejaría de ser un lugar magico, hasta que reconocí a alguien en la multitud.

Camine hacía él muy silensiosamente para que no me notara, y cuando estuve atrás de él, puse mis manos sobre sus ojos.

-Quien soy?- dije juguetona.

-La chica más infantil del mundo? - Quitó mis manos de sus ojos y se giro para mirarme a la cara aun aguantando estas y sonriendo pícaramente.

-Moooo~, Hideki eres malo, sabes que no soy infantil, solo me gusta divertirme, me duele que pienses eso de mi- Le reproche con un puchero y una falsa indignación para luego reírme.

-Quieres que te crea que estas dolida cuando te ríes en mi cara?- No pudimos evitas reirnos por la ironía de la situación y nos dirigimos a un banco en un puente sercano.

{OMEGAVERSE} 🍁Luces de Otoño 🍁Donde viven las historias. Descúbrelo ahora