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1. 𝙰 𝚁𝚞𝚜𝚜𝚒𝚊𝚗 𝚍𝚎𝚊𝚕

𝐍𝐨 𝐡𝐮𝐛𝐨 𝐮𝐧 𝐚ñ𝐨 𝐝𝐞 𝐬𝐮 𝐯𝐢𝐝𝐚 𝐞𝐧 𝐞𝐥 𝐪𝐮𝐞 𝐬𝐮 𝐩𝐚𝐝𝐫𝐞 𝐚𝐥 𝐦𝐞𝐧𝐨𝐬 𝐮𝐧𝐚 𝐯𝐞𝐳 𝐧𝐨 𝐦𝐞𝐧𝐜𝐢𝐨𝐧𝐚𝐫𝐚 𝐚 𝐬𝐮𝐬 𝐫𝐞𝐥𝐚𝐭𝐢𝐯𝐨𝐬 𝐝𝐞 𝐥𝐚𝐜𝐚𝐬𝐚 𝐫𝐞𝐚𝐥 𝐏𝐞𝐭𝐫𝐨𝐯𝐚, y sus estrictas  reglas de comportamiento ...

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𝐍𝐨 𝐡𝐮𝐛𝐨 𝐮𝐧 𝐚ñ𝐨 𝐝𝐞 𝐬𝐮 𝐯𝐢𝐝𝐚 𝐞𝐧 𝐞𝐥 𝐪𝐮𝐞 𝐬𝐮 𝐩𝐚𝐝𝐫𝐞 𝐚𝐥 𝐦𝐞𝐧𝐨𝐬 𝐮𝐧𝐚 𝐯𝐞𝐳 𝐧𝐨 𝐦𝐞𝐧𝐜𝐢𝐨𝐧𝐚𝐫𝐚 𝐚 𝐬𝐮𝐬 𝐫𝐞𝐥𝐚𝐭𝐢𝐯𝐨𝐬 𝐝𝐞 𝐥𝐚𝐜𝐚𝐬𝐚 𝐫𝐞𝐚𝐥 𝐏𝐞𝐭𝐫𝐨𝐯𝐚, y sus estrictas reglas de comportamiento en respecto a cada miembro de la familia. Aleksis no había crecido apegándose a ese reglamento, pero cuando los hombres que las habían encontrado las llevaron a arrastras de vuelta a la mansión en el campo y su tío al verla le había dado un fuerte golpe en la mejilla supo deducir que fugarse por semanas no era algo aceptable en ese reglamento, especialmente si eres una princesa y has llevado a tu hermana menor contigo.

Aleksis recibió el golpe sin poder responder al tener a dos hombres sujetándola de los brazos y una funda cubriendo su cabeza con dos miserables agujeros para pode respirar, solo pudo escuchar los gritos de Karolina pidiéndole al Duque que parara, pero el la ignoro y volvió a darle una cachetada a Aleksis en la misma mejilla. Ella podía sentir el ardor en su piel y el calor de una reciente marca, aun así, se mantuvo en silencio esperando que no se avecinaran mas golpes.

Trato de observar a través de los pequeños huecos de la funda y pudo notar que la mayoría de muebles a diferencia de la ultima vez que había estado ahí, ahora estaban cubiertos por sabanas blancas y las varias alfombras de diversos patrones de lana estaban enrolladas en el suelo. Los grandes ventanales que se expandían hasta el techo estaban sellados y cubiertos por extensos telones de tela. Aleksis pudo deducir que no iban a estar ahí por mucho tiempo, pero ahora a donde irían?

No podía volver a Rusia a menos que esperaran muerte, el mismo destino que sus padres recibieron por parte de los Bolcheviques y varios miembros de su familia que nunca se había cruzado en su vida. Ivan y Elekna Petrova habían cumplido todos los factores necesarios para mantener a sus hijas alejadas de la monarquía. Haber vivido toda la vida en una casa de verano en el campo lejos de la extravagancia de la ciudad y enseñar a sus hijas a ser liberales en comparación con el rígido protocolo ruso había funcionado. En lo único que Ivan y Elekna habían fallado fue en morir demasiado pronto.

Ahora Aleksis y Karolina estaban bajo las manos del ultimo monarca de la familia, el gran duque Leonel Petrovich, junto a su tía y su prima Tatiana que desde el momento que Aleksis la vio supo que se iban a desagradar bastante. No había estado equivocada. Tatiana y sus formas desensilles de actuar habían sido una de las razones por las cuales Aleksis había buscado escaparse en primer lugar.

Aleksis pensó en las ultimas semanas mientras los hombres las jalaban a ambas a la oficina de su tío. Habían viajado en silencio bajo los alias de Alessia y Caroline, no buscando llamar la atención. Durmieron en diferentes posadas mientras Aleksis conseguía dinero vendiendo partes de su antigua joyería y los diamantes de una pulsera que Karolina había tenido consigo cuando tuvieron que escapar del país. La cantidad fue mas que suficiente para poder conseguir un transporte hacia América, donde no les fueran a pedir documentos.

Golden Chain-𝐓𝐇𝐎𝐌𝐀𝐒 𝐒𝐇𝐄𝐋𝐁𝐘Donde viven las historias. Descúbrelo ahora