Amnesia ( Libro 2 de "La Elegida")

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Tras decirle a Tim que no tienes donde quedarte, el té lleva a donde vive.

Le explicas sobre tu amnesia, que solo tratabas de escapar de ese hospital y recuperar tus memorias, solo ves como Tim niega decepcionado una y otra vez mientras hablas. Claro, aún no podías contarle sobre la sombra y lo que había pasado antes de la amnesia, ni siquiera de mi.

— y se te hizo buena idea ir al bosque más cercano a dejar que te mate lo que sea que había ahí— dice sarcástico mientras saca una pastilla de un frasco.

Poco antes te había explicado sobre las pastillas, son para controlar un desorden de personalidad que tiene desde hace tiempo, algo te dice que tiene que ver con la máscara de características femeninas que se posa en un mueble.

Te da miedo suspirar de frustración, el aire tiene este distintivo olor a cigarros, se nota que Tim no se molesta en salir a fumar y en vez de eso solo decide hacerlo adentro, probablemente con la excusa de que solo el vive ahí y que puede hacer lo que le plazca.

— no podía solo caminar por la puerta principal diciéndole adiós a todo mundo—

—buen punto, pero aún así no debiste de ir tan adentro del bosque, es peligroso, no solo el operador está ahí— se para del sillón y va a abrir una de las ventanas, tal vez se dio cuenta que el olor a cigarro te está molestando — este lugar es como un parque de diversiones para locos, asesinos, sucesos sobrenaturales...y justamente el bosque Rosewood es donde se esconden... parece que simplemente desaparecen cuando entran ahí — mira pensativo hacia el inmenso bosque cruzando unas cuantas calles, un letrero titulándolo como el parque Rosewood.

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Jason había alcanzado a ver cómo el único Tim Sutton te había salvado del hombre alto mejor conocido como el Slenderman, palo, para los amigos.

Frustrado, deja salir un grito de furia hacia el auto, te habías vuelto a escapar y no soportaba eso, pero tiene que ser listo para que no lo vuelvas a odiar y pase lo anterior.

Mira como señor Glotón termina de tragarse a una de sus víctimas que había tratado de usar para llenar el vacío que dejaste cuando te internaron en ese hospital...

Sabía que no debía de haber dejado vivir a la chica... la chica que te contó la verdad ese día.