Seducción: Como convertirse en La Amante de mi marido

Capitulo 1

-¡¡¡¡¡Feliz cumpleaños a ti, feliz cumpleaños a ti, feliz cumpleaños querido Yaten, Feliz cumpleaños a ti!!!- gritaron todos los presentes entre risas y bromas, - Mordida, Mordida, Mordida- cuando Yaten trato de dar la típica mordida, Seiya y Taiky lo obligaron a enterrar la cara en el pastel hasta la orejas, y todo se rieron a carcajadas con la cara de payaso de pastel que tenia.

-me llamaron de la oficina, me tengo que ir- dijo Diamante a Serena con susurros, la había apartado del grupo para que no lo oyeran, pues no quería que su hermana se molestara por que se iba en medio del cumpleaños de su sobrino.

Serena lo vio con ojos de ternura, - claro que si amor, nos vemos en la casa mas tarde- dicho ésto le dio un tierno beso en los labios, - ve con cuidado, y trata de no trabajar tanto-

Diamante asintió y le dio un beso en la frente, - no te vallas muy tarde, recuerda que los niños mañana tienen ingles y catecismo-

Serena asintió y hablo con el mismo tono que él, - no te preocupes, pero no creo que los niños se quieran ir tempano, lo mas seguro es que me vaya al rededor de las 10 u 11 de la noche-

-ok, maneja con cuidado, nos vemos muñeca- y le dio otro beso en la frente.

-mamá, mamá, mira, me tocaron un montón de dulces de la piñata- vino corriendo Rini  con una montaña de dulces que no le cabía en las manos, Serena le sonrió y la ayudo a cargarlos, - donde están tus hermanos, espero los ayudaras a conseguir dulces- 

No había terminado de decir la frase y vino corriendo Zafiro hecho un mar de lagrimas seguido de Armando que no estaba mejor que su hermano, - Mamáaaaa- lloraba el pequeño, - Lini no me dio duchessss- Serena miro con el ceño fruncido a su hija, pero no le dio tiempo de decir nada, pues Armando le pisaba los talones, -Mamiii, Mamiii, Lini me quito mis duchesss-

Serena vio ahora a su hija con mas intensidad, - ¿ que me tienes que decir señorita?- le pregunto y la niña tartamudeo, - es que ellos solo estorban mamá, todos estamos grandes y ellos no saben romper piñata-

-pues por eso y por que eres una buena hermana vas a dividir tus dulces en tres partes iguales-

La niña quedo pálida por la decisión de su madre, pero por la mirada "asesina" que su progenitora le lanzo, no se atrevió a replicar, - si madre- dijo la niña resignada y con la mira baja.

Serena disimulo una sonrisa, - muy bien, esa es mi niña- le dijo y le beso la frente, - vamos niños - se dirigió a sus gemelos, - extiendan las manos, su hermana va a compartir sus dulces con ustedes- como por acto de magia los dos pequeños bribones dejaron de llorar y dibujaron unas lindas sonrisas.

-¿como se dice?- pregunto Serena.

-glachias lini- dijeron al unisono, mientras su hermana torcía el gesto resignada a tener que compartir su botín.

-tus hijos son hermosos- le dijo Beryl una de sus cuñadas, - gracias- contesto Serena llena de orgullo.

-¿oye, donde se metió mi hermano?-

-tuvo que irse, problemas en la obra, ya sabes-

Kaolinete torció el gesto, la otra hermana de Diamante que había escuchado al acercarse con un plato de pastel - ese hombre se va a enfermar de algo, no debe de trabajar tanto, siempre sale corriendo por llamas de la oficina, debe de aprender a delegar responsabilidades, mira que todo su cabello ya esta blanco y es muy joven-

Serena asintió mientras veía jugar a sus hijos cerca de la piscina, - ya sabes como es, le gusta controlar todo- les contesto a ambas mujeres, alo que que ellas asintieron con resignación.