¿Amor? [Chirú // Violentometro]

〘 O 9 〙

「💙」

— ¿Deliciosa, no?.- Pregunto la capital argentina a su amigo peruano, quien había probado una pequeña porción de carne asada recién cocida.

— ¡Claro! Debería llevarme un poco de esto.- Dijo Lima entre risas, la verdad, el sabor era agradable.

— Lastimosamente, esta carne es muy difícil de encontrar en estas fechas. Pero tengo un poco para ti.- Contesto riendo mientras acariciaba la mejilla del menor.

— Gracias, supongo - Susurro, dejando al argentino acariciar su mejilla.

Un celoso Santiago se encontraba atrás masticando su porción de carne algo enojado, ¿Cómo era posible que el limeño lo dejase por el narizón? Se sentía ofendido, aunque, ellos ya habían discutido, así que Lima lo mandaría a la misma mierda si se acercaba.

— ¿Tu padre vendrá?.- Preguntó Buenos Aires a Lima, le agradaba Perú, así que le pidió a su padre que se encargara de llamarlo.

— Claro, vendrá con Chile, no están muy lejos.- Dijo el de amarillo mientras tomaba un poco de refresco.

— Uh, Chile…- Comento con desagrado, pero bueno, él estaría con su crush aprovechando que este había discutido con Santiago.

Era ya mediodía y el sol estaba a su favor, refrescando a los visitantes, algunos estaban en sus épocas de invierno, por lo esto venía bien a algunos. Toda Latinoamérica y Centroamérica se encontraba allí, incluyendo a algunos hijos de estos, por suerte el espacio de Buenos aires era grande y podían caber muchos países.

Disfrutar un delicioso almuerzo, ¿Qué más podían desear?

Una pareja ingresó al hogar, siendo recibidos por Venezuela, quien se encontraba cerca y decidió saludarlos.

— Perú, Chile, ¿Cómo están?.- Pregunto con una leve sonrisa mientras tomaba un poco de la bebida que tenía en su vaso.

— Nosotros nos encontramos bien, por suerte nada ha ido mal.- Contesto Perú algo incómodo, no le había dicho nada a Chile sobre lo que escucho ayer para evitar problemas, por suerte no noto sus lágrimas.- ¿Y como te encuentras tú, Venezuela?

— La crisis sigue en pie, cada vez duelen más estas grietas.- Dijo tocando aquellos agujeros que llamaban la atención de cualquiera.- Pero bueno, todo pasara.

— Tranquilo, así sera.- Contesto Perú con una sonrisa, afirmando que estaba apoyandolo.

El peruano conversaba con Venezuela, pero el chileno simplemente estaba callado, sentía como algunas miradas eran hacia el y digamos que no estaban mirando como si quisieran tenerlo allí. Se sentía incomodo, quería regresar a casa lo antes posible, lo único que quería era a su pareja.