09

397 13 1
                                    

Amaya.

abrí mis ojos de repente causando que la luz Blanca me de un fuerte dolor de cabeza, lo único que se escuchaba era el sonido de la maquinita a mi lado que marcaba los latidos de mi corazón.

—buen día —saludo la enfermera que me ponía una nueva transfusión de sangre—

—pensé que me iba a morir —reí haciéndola sonreír —

un dolor en el estómago me hizo dejar de reírme y hacer una mueca de dolor.

—no hagas ningún esfuerzo —toca mi hombro.

asenti y le sonreí.

—tu mamá y tu novio estaban preocupados, les avisaré que ya despertaste —avisa —en seguida vendrá el doctor a revisarte

—muchísimas gracias .

la enfermera salió y cerre nuevamente los ojos.

era un alivio increíble. Estaba dentro de todo bien y gracias a la anestesia no sentía tanto dolor.

la puerta de la habitacion se abrió, entró mi mamá y Ignacio que tenian una cara de preocupaciones notoria.

por mi parte sonreí, era tanta la felicidad de estar bien que dudaba que alguien me la quitará en este momento.

nunca deseé tanto estar viva como esa noche.

—estaba tan preocupada, mi amor —mi mamá me abrazó —

—ma, estoy bien —sonreí y la separe de mi— enserio.

no era que no me gustará su abrazo,si no qué su brazo estaba encima de mi herida y ya me estaba haciendo doler.

—quiero que me digas todo Amaya, tengo que poner la denuncia —explica secando unas lágrima que aún tenía en su rostro —

—no quiero hablar de eso ahora —ella entendió al instante —la enfermer  dijo que estaba mi novio, ¿desde cuando tengo novio? —bromeó —

—desde que llegaste a noche y Ignacio tuvo que decir que era tu novio para tener noticias tuyas —explicó mi vieja —

asenti y le regale una sonrisa a igncio que solo me miraba .

—no estoy muerta, no me mires así —me queje  —

—¡Amaya! —ahora se quejaba mi vieja — no diga eso nunca más —me apuntó con su dedo —

rodó sus ojos y salió de la habitación de la clínica algo enojada por mi comentario.

—ella tenía mucho miedo —hablo acercándose a la camilla— teníamos —se corrigió —

—yo tenía el triple de miedo que ustedes, fue bastante orrible  —el asintió — gracias por estar.

—te prometí que siempre estaría para vos —sonrió y tomó mi mano— si bien estamos peleados, siempre vas a ser una de las persona más importantes en mi vida

le sonreí nuevamente y sólo me quedé mirándolo.

aún echa mierda y todo seguía siendo uno de mis primeros pensamientos, y el no ayudaba mucho que digamos en este momento, incluso me enloqueció saber que dijo ser mi novio, aun que fuese mentira.

—disculpe —hablo el Doctor entrando provocando que Ignacio soltara mi mano — vengo a revisar a la paciente.

Ignacio asintió y dejó un beso en mi mejilla antes de salir dejándome sola con el Doctor.

—la herida no fue muy profunda pero lo suficiente para que perdieras demasiada sangre —señaló a la aguja que enviaba sangre a mis venas—tuvimos que hacer una operación para quitar la bala enterrada y luego cocimos toda la herida, que lamentablemente quedará una marca.

mordi mi labio disgustada por la idea de una cicatriz en mi abdomen.

—te daré unos medicamento para el dolor y tendrá que cambiar las venda en tu abdomen —comentó mientras chequeaba la máquina —le diré a tu novio que este al tanto que hagas el cambio de vendaje —sonrió — pasarás la noche acá y luego te dejaré ir.

—gracias doctor —le devolví la sonrisa —entre los dos —nos señale a ambos —no es mi novio, es mi mejor amigo

—valla caí de nuevo en esa mentira — bromeó

asenti sonriendo.

—un gusto conocerla señorita Santillán —apretamos las manos — igual le diré que este pendiente de eso —señaló la herida y salió de la habitacion—

Esperándote; ECKODonde viven las historias. Descúbrelo ahora