Shinso Hitoshi

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Ahí iba, Shinso Hitoshi, caminando a su ya acostumbrado paso lento mientras admiraba los árboles y el cielo encima de él, caminando hacia la U.A para llegar a su salón de clase: 1-C estudios generales.
Ya casi llegando a la entrada de la academia, algo o mejor dicho alguien, chocó contra su brazo para pasar corriendo. Al sentir el impacto, ___ Hideaki paró en seco para voltear a ver a la chica o chico que acababa de recibir tal golpe.
-Oh- exclamó -¡Shinso! Discúlpame, vengo algo alborotada- dijo ___.
Y se le notaba, con su mochila en un solo hombro y un poco de libros en su otro brazo.
-No te preocupes ___- Se acercó a ella y le acarició el cabello mientras pasaba de largo de ella. -Que te vaya bien Hideaki, a la salida te espero para regresar juntos a casa.-
-Claro- dijo ___ y después empezó a caminar hacia su salón de clase: 1-a curso de héroes.

Ambos fueron por caminos diferentes.

Shinso Hitoshi y Hideaki ___ se conocieron desde pequeños. Ella fue la primera en no alejarse de él y opinar que su kosei era genial.
Desde ahí, Shinso no ha podido sacar de sus pensamientos a la chica de mente prodigiosa como su mismo apellido decía. Hideaki: chica inteligente.
Esa chica capaz de analizar las cosas y mil posibilidades rápidamente, que ama leer, resolver rompecabezas y armar su cubo Rubik, esa chica con lentes de contacto o de pasta depende a como ella se sintiera ese día. La misma divertida y determinada chica, sociable y carismática.
La misma a la que Shinso no puede sacar de su mente.
La única capaz de bloquear el kosei de Shinso por su misma mente prodigiosa.
Ella, a diferencia de él, logró entrar al curso de héroes por sus tres koseis y esa gran mente.
Aún así, los mejores amigos y... la crush de Shinso.
___
Luego de un cansado día de escuela para ambos, ___ salió de su salón de clase los más rápido que pudo para no hacer esperar más a Shinso. Guardó rápidamente todas sus cosas en su mochila y salió no sin antes despedirse con un "hasta mañana" general para sus amigos.
-¿Te hice esperar?- dijo la chica.
-No. De hecho acabo de salir.- Mentira. La clase de la chica se había prolongado diez minutos. Por lo cual, Shinso ya llevaba unos doce minutos esperando a la chica.
-Oh, bueno. Oye Shinso, muero de hambre.- sonrío -¿Me acompañas a por unos mochis o algo?- terminó de decir la chica al mismo tiempo que volteaba a ver al peli-morado.
-Claro- dijo Shinso. Agradecido de poder pasar más tiempo con ella.
-¿Cómo te ha ido hoy?- Le preguntó Shinso. -Bastante bien. Pero ha sido muy cansado y... ¿recuerdas del rubio musulmán del que te hablé? -Shinso asintió- Se puso a pelear contra Midoriya dejándole heridas bastante graves. Pero Midoriya ha progresado mucho así que también logró lastimar al rubio.- Shinso podía sentir la admiración que la menor sentía por ambos. No lo pudo evitar, y trató de entrar a su mente para obligarla a dejar de hablar sobre ellos y descubrir si la chica sentía algo por uno de ellos. Porque debía admitirlo, lo ponía celoso.
-Ya te dije que no puedes y no debes entrar a mi mente, Hitoshi- ___ río y Shinso bufó. -Maldigo a tu mente, __.- La chica sonrío para después, pedir unos mochis en el puesto que recién habían llegado. Shinso aprovechó ese momento en el que ella no podía verlo por estar tan concentrada viendo qué mochis se llevaría para analizar cada una de sus facciones que a él tanto le encantaban.
-¿Quieres otro?- Le dijo la chica mientras ella elegía otro. Se quedó observándola y aprovechó ese momento de distracción para ordenarle algo. <<Dame tú el mochi>> Los brazos de la chica como por arte de magia tomaron uno de ellos y lo sacaron de la caja.
-Para, Shinso- Dijo ___ para salir del trance y morder el recién sacado mochi.
-Odio que puedas hacer eso- gruñó Hitoshi. -Me amas- dijo ella al mismo tiempo que sonreía. Y claro que la amaba, la amaba de una manera que ella aún no comprendía. No como amigos, él la deseaba, la protegía, de verdad la amaba. Pero se limitó a sonreír mientras oscurecía y ambos emprendían su camino a casa, juntos.
___
<<Abrázame>> ordenó Shinso. Tratando de buscar calor esa noche tan fría.
-No Shinso- dijo ___. Bloqueando el poder de Shinso. -Nunca entenderé las cosas que me pides. No sé por qué me pides lo que... me pides.- dijo ella confundida. -Esa mente tan prodigiosa y no eres capaz de entender algo tan sencillo- respondió Hitoshi -¿sencillo? ¿Qué es sencillo de esto? Porque yo no lo encuentro nada de sencillez. Tengo una mente prodigiosa según tú pero no el poder de leerte la mente, Hitoshi- reprochó la menor. -Siempre trato de ordenar lo que quiero que hagas en el momento, ___.- trató de evadir el tema. -Entonces ordéname lo que estes queriendo ahora.- Le dijo ella. -Prometo que no bloquearé tu kosei- sonrío. -¿__ estás segura? Sé que no te gusta que te ordene las cosas- dijo -¡Oh vamos Shinso! Es una de las pocas oportunidades que te doy. ¡Aprovécha! No importa si lo haces, yo te dejé-
-Pero...- reprochó él.
-Ya te dije que está bien. Adem...-
<<Bésame>>
Ni bien la chica terminó de decir su oración cuando Shinso ya había tomado el control de su mente, tomando las mejillas de la chica entre sus manos los más rápido que pudo y estampando sus labios con los de ella rápidamente. Antes de que ella bloqueara su kosei. Pero él se sorprendió cuando se dio cuenta de que ella... no lo hizo.
Shinso la besó de una manera apasionante pero dulce. Tratando de saceárse con sus labios y eliminar de una vez por todas ese sentimiento de necesitarla que siempre tenía.
La chica trató de separarse por la falta de aire y la sorpresa.
<<No te separes>>
Y como por arte de magia, los labios de la chica se volvieron a estampar contra los de él. Shinso cada vez dejaba mostrar el deseo que le tenía. Esa falta de ella que lo atormentaba en las noches. La quería eliminar. Precisamente lo que estaba haciendo ahora.
Shinso la tomó firmemente de sus caderas con un brazo y la atrajo más hacia él mientras que con el otro, estrujaba su cabello. La necesitaba, nunca se había atrevido a decirle pero la quería y la quería ya.
Ella volvió a separarse.
<<No te separes>>
Pero esta vez, los labios de la chica no volvieron a juntarse con los suyos. Lo había bloqueado.
Shinso volteo a verla, viendo su ceño confundido y su rostro pálido ruborizado mientras su pecho subía y bajaba rápidamente.
-Y-yo...- trató de buscar las palabras Shinso pero no encontró ninguna. Lo único que se le ocurrió en ese momento fue ordenarle nuevamente que se acercara a él, que se acercara a él y lo besara como lo había echo segundos atrás. Pero la chica bloqueó nuevamente su kosei. Dejando a un Shinso confuso y triste. ¿Por qué lo bloqueaba ahora y no cuando se lo ordenó por primera vez? -No podré aguantarme así, ___. No me puedes dar todo eso y arrebatármelo así nada más. Te deseo, te quiero muchísimo...- No hubo respuesta de parte de la fémina.
<<bésame... por favor>>
Ordenó él por última vez, como su último intento.
Pero ella no obedeció. Shinso derramó un par de lágrimas por la confusión, la tristeza, la rabia de pensar que había acabado con su hermosa amistad y la impotencia. La impotencia de necesitarla y querer tomarla de una manera posesiva. La quería para él. Quería sus labios en los suyos, quería que las manos de ella acariciaran su cabello, quería que no pudiera besar a nadie más que a él, quería estar en las noches con ella en su cuarto abrazándola de una manera protectora para sentir su delgado y largo cuerpo junto al suyo, quería acariciar sus finos y cortos cabellos, quería demostrarle que era suya, que era suya y de nadie más.
-N-no necesitabas controlarme para que yo lo hiciera Shinso- dijo ella. Shinso volteo con sus hermosos ojos irritados por las lágrimas y sus mejillas mojadas por las mismas. Y ella... lo tomó nuevamente, lo besó. Tomó su cabello y jugó con él unos segundos. Pero Shinso no reaccionó. Ella río aún besándolo y tomó sus brazos para enrollarlos ella misma en su cintura y regresar sus brazos al cabello de Hitoshi. Por fin, reaccionó. La atrajo a él nuevamente, queriendo pegar más sus cuerpos aunque ya no fuera posible, haciendo el beso más agresivo y necesitado por ambos. Shinso la pegó a una pared cercana de una de las casas del vecindario por el que cruzaban y la hizo saltar. Tomó sus piernas entre sus fuertes brazos y se besaron así, unos momentos más. Separándose momentáneamente por aire y juntando de nueva cuenta sus labios desesperadamente.
Shinso mordió el labio inferior de la chica pícaramente y finalmente, se separó de ella.
Se quedaron mirando unos segundos y Shinso empezó a reír. Aprovechando que la estaba cargando, le dio vueltas riendo. Estaba feliz. Ella lo había correspondido. Y lo había echo por su propia voluntad. Ella comenzó a reír también, siendo contagiada por la risa de Hitoshi.
-Quédate conmigo esta noche- Le dijo él. Ella accedió. Sus padres no lo ven nada raro ya que llevan haciendo lo mismo desde que son pequeños. ___ trató de bajarse de Shinso pero no la dejó y la llevó a su casa cargándola y ella abrazándolo como koala mientras le daba uno que otro beso en el cuello y mordiéndolo de vez en cuando aprovechando la cercanía que tenían.
Llegaron a casa de Shinso y subieron a su cuarto.
Shinso finalmente la soltó y le prestó una camisa que le iba demasiado grande de pijama.
Shinso se cambió lo más rápido que pudo y se acostó en la cama con ella.
Ella hacia un lado y el hacia el otro. Eso creía ___. Pero Shinso la tomó y la juntó a él, entrelazando sus piernas y enrollando sus brazos en el torso de la chica.
-Hitoshi estás muy... alborotado.- dijo ___.
-No sabes cuando te deseo y necesito, ___. De verdad no lo sabes. He querido tomarte desde hace ya tanto tiempo. Siento que no es real.- Dijo mientras hundía su cara en el cuello de la fémina y lo mordía, besaba y lamía provocativamente. -Hitoshi me vas a dejar marcas- decía ___ mientras el seguía jugando en su cuello.
-Ya cálmate un poco Hitoshi.- rió___. Pero él no paraba. Así que la fémina, con su kosei de agua, le tiró un chorrito de la misma por el dedo índice en la cara.
-Te quiero pero bájale un poco a la intensidad.- rió ella mientras veía la cara levemente mojada y confusa del chico.
Él sonrío y la juntó todavía más a él.
-Te quiero muchísimo- dijo Shinso. Correspondiendo a la "confesión" que ella le acababa de hacer sin darse cuenta.
La chica reaccionó y se puso roja. Tan roja, que podría pasar desapercibida por un puesto de tomates. Río nerviosa y Shinso la miró con ternura para después depositar un beso en su nariz y otro en sus labios.
-Ya, a dormir. En una de esas te dan otros arranques de necesidad y no te paro- dijo ella y acarició el cabello del contrario. -No estaría mal.- dijo él. Y la besó nuevamente. -Ya Shinso, me vas a tragar.- bromeó ella.
Se vieron a los ojos un rato más y ambos cayeron dormidos.
-•-•-•-•-•-•-•-•-•-•-•-•-•-•-•-•-•-•-•-•-•-•-
1938 palabras.
Me dio un ataque de necesidad. Estoy sola y necesito a alguien que me ame de esta manera.
Esto fue lo que me salió hoy jajssajaj. Literalmente necesito a Hitoshi.
PAPASITOOOOOOOOOOOOOOOOO
OOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO

Espero les haya gustado. Cualquier pedido en los comentarios o por privado. Solo pongan con quién, con o sin lemon 😏 🍋 y de qué quieren que se trate.
Nuevamente, espero que les haya gustado. Me despido, ¡hasta otro shot!

BHNA ~One Shots~ pedidos abiertos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora