Capítulo 19 "¿Única?"

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Un par de días después de toda la situación, las cosas parecían haber regresado a la normalidad.

Soonie estaba sentada en el sillón que tenía afuera de su balcón, tratando de controlar su sentido auditivo y de olfato, meditando en la partida de Celestine y en las cosas que esta le había dicho antes de irse.

Flash Back

-Aunque quizás tu no lo desees mi niña, ellos terminaran siendo como tu- aquellas palabras impactaron en la mente de la chica –Algunos no tendrán opción y los otros lo elegirán.

-¡NO!- exclamo alterada la chica y con la mirada teñida de esmeralda -¡No lo hare!- insistió –Yo no elegí este destino Celestine y tú lo sabes, es una tortura que no le hare pasar a mis hermanos- hablo, creyendo que con eso daría por cerrado el tema, pero no se esperaba el argumento que la morena mujer tenía.

-El volverá Marie- fue todo lo que dijo para dejar helada a la chica –Yo lo he visto- hizo referencia  las visiones que en contadas ocasiones la bruja llegaba a tener –Nunca dejo de buscarte y tu imagen es bastante pública ahora, así que no le será difícil dar contigo- la chica no sabía si gritar, llorar o morir en ese momento –El solo quiere venganza por tu partida y me imagino que recuerdas sus métodos para hacerlo- aquel comentario, desencajo a la chica.

Claro que recordaba los procederes de Elijah, como olvidar tales masacres cuando alguien se atrevía a desafiarlo, recordar tanto derramamiento de sangre le provocaba nauseas.

-Algo podre hacer Celestine- intento pensar en algo positivo para evitar la situación –El futuro es impredecible y lo sabes, tu visión solo es un aviso, pero estoy segura de que puedo cambiarlo.

-Mi niña, hay cosas que son inevitables y quizás en tu lucha por cambiarlo, salga peor y alguno de ellos muera- por más que Soonie quería contradecir a la bruja en aquel argumento, estaba claro que no podía -Tu única opción, es que cuando suceda, vayas con EL, y reclames esta tierra- Soonie abrió los ojos como platos, jamás pensó que llegaría a ese estatus.

Fin del Flash Back

Soonie seguía sumida en sus pensamientos, hasta que escucho la voz de Tae gritar su nombre y al estar tan a la defensiva, no dudo en bajar a velocidad sobre humana y con los colmillos de fuera hasta la sala donde todos se encontraban.

El grito de Jin retumbo por toda la estancia al ver a la chica en postura de ataque y todos se pusieron alertas.

-Soonie- hablo Tae con calma -¿Estas bien?
La chica miro hacia todos lados, vio a sus hermanos asustados y a Hyun-Soo a la expectativa.

-Tae ¿Por qué gritaste?- cuestiono la chica con los ojos teñidos de magenta –Pensé que pasaba algo malo- se excusó.

-Lo siento Soonie, es que me emocione con la noticia que nos dio Hyun-Soo hyung- respondió mostrando su hermosa sonrisa.

La chica solo suspiro.

-¿Qué noticia?- pregunto algo desganada y sentándose en el sofá junto a Jin, quien al momento pasó su brazo alrededor de los hombros de la chica y la atrajo hacia si para recostarla y que su cabeza quedara sobre su regazo.

A Jin le encantaba cuidarla como si de verdad fuera su hija, también a Nam-Joon le encantaba ver la relación que su pareja tenía con la chica y a veces el dejaba ver un extraño lado paternal hacia ella y Yon-Soo adoraba que Jin peinara su largo cabello lila con sus dedos, la relajaba mucho y los intentos de A-ppa Nam por cuidarla, como ella le decía, le causaban gracia.

-Pues...- comenzó a hablar el manager –Las agencias de Corea nos reunimos y dada la temporada, decidimos organizar una fiesta de Halloween para ustedes, será hoy 27 de octubre a las 10 de la noche, ya le mandé a Nam-Joon la ubicación del lugar- repitió a Yon-Soo lo que ya había comentado a los chicos.

Todos estaban emocionados, la idea les gustaba, algo para despejarse después de tantas cosas vividas en las últimas semanas.

-Entonces hay que ir de compras, no tenemos mucho tiempo- hablo Jin con la euforia marcada en cada pequeña palabra y mirando la hora en el reloj de muñeca de Nam, el cual marcaba las 9:45 am –Suban a alistarse nos vamos en 15- indico y ayudo a Soonie a incorporarse.

Todos se pusieron de pie inmediatamente, la mayoría subió corriendo por sus cosas, excepto dos parejas.

-Sera divertido Yoonie- comentaba un triste Jungkook, quien aún no lograba convencer a su novio de que Soonie era una buena chica y que jamás les haría daño.

-No vas a convencerme Jungkook- refutaba como siempre –Algo malo pasara, lo presiento, a lo mejor no con ella, pero su mundo no creo que nos traiga nada bueno- decía al tiempo que se tiraba sobre la cama y cubría su rostro con los brazos.

-¿No iras con nosotros?- pregunto Kookie con la voz quebrada, ver la actitud de su novio y que por su diferencia de opiniones su relación se había distanciado un poco, le dolía sobremanera.

-No- respondió cortante –No pienso disfrazarme.

-Está bien- respondió el chico –Volveremos más tarde- salió cabizbajo y cerró la puerta de su habitación.

-No sé si sea buen idea ir a esa fiesta Tae- comentaba Soonie mientras guardaba en su pequeña mochila sus lentes oscuros y su cubre bocas.

-¿Por qué lo dices Soonie?- cuestionó Tae –Esas fiestas siempre son divertidas- la emoción se le podía notar al chico a kilómetros.

Ante esa mirada tan bella, Soonie no se atrevió a decir más, no quería arruinarles la fiesta a sus hermanos con sus miedos.

Tendría que guardarse todo eso para ella, mantenerse alerta siempre y darles más sangre de la necesaria si era preciso, pero ninguno de sus hermanos moriría, o seria convertido.

Todos salieron rumbo a la tienda de disfraces.

Estando ahí, todos, a excepción de Jungkook y Soonie, corrieron por los enormes pasillos.
Ambos iban caminando, mirando sin mirar realmente los disfraces que había en la tienda.

-¿Está todo bien oppa?- pregunto la chica sin más.

El chico la miro y por más que trato no pudo evitar que sus ojos se anegaran de lágrimas.

-No mucho Soonie- respondió y una lagrima rebelde resbalo por su mejilla, que él se encargó de limpiar de inmediato –Yoon-Gi sigue molesto y distante- la chica sintió una enorme tristeza invadirla, que por suerte fue ocultada por las lentillas cafés que utilizaba cuando salía en público –Trate de convencerlo de que tu eres buena y dice que quizás tenga razón, pero que aun así, tu mundo está lleno de peligros y que algo de eso nos puede afectar- aquellas palabras, por más simples que parecieran, tocaron en lo más profundo de la chica.

Si tan solo ella hubiera sido más precavida eso no hubiera pasado y el más pequeño de sus hermanos no estaría sufriendo.

-Veras que pronto todo estará bien Kookie oppa- fue lo único que se le ocurrió decirle, la culpa la estaba carcomiendo lento y trato de mostrarle al chico la mejor sonrisa que tenía, este se la devolvió, pero fue bastante notorio que no sirvió de mucho, ya que la sonrisa no llego a sus ojos.

Siguieron avanzando entre los pasillos de la tienda, hasta que dieron con sus hermanos riendo a carcajadas.

-Hola- dijo Soonie llamando la atención de Ho-Seok.

-Hola Soonie- respondió –A Tae se le ocurrió una muy buena idea- comento y comenzó a reír nuevamente.

-¿Cuál?- pregunto la chica.

-Nos disfrazaremos todos de vampiros- respondió Tae y rio también, pero se contuvo al ver el rostro inexpresivo de la chica -¿No te agrada la idea Soonie?- pregunto temeroso.
La chica lo miro, no podía argumentar nada ante aquella carita de cachorro abandonado que ponía Tae.

Lo único que pudo hacer, fue sonreír a modo de aprobación ante la ocurrencia de Tae.

-¿Quieres que busquemos uno para ti?- pregunto Jin en tono maternal, igual que siempre que se dirigía a la chica.

-No oppa- respondió de inmediato y giro su mirada en torno a los demás pasillos buscando algo que usar –Usare ese- dijo al tiempo que señalaba un vestido en tono melón, algo pomposo, con listones, lazos y guantes negros y un fondo blanco, con un pequeño sombrero al tono del vestido y una gargantilla de listón y encaje a juego.

-Mmm ¿Estas segura linda?- pregunto Jin mostrando un atisbo de desconcierto en su mirada.

-Si oppa- respondió un poco más entusiasmada la chica –Es de un anime que me gusta mucho- comento, acercándose a la chica que atendía el lugar y pidiendo el disfraz en su talla.

Regresaron a casa y antes de comenzarse a alistar, Jin les preparo la comida.

Todos comieron en silencio, se sentía un poco de tensión en el ambiente. Fue hasta que todos terminaron de comer que el silencio fue roto por los platos y cubiertos que se recogían de la mesa y por la voz de Nam-Joon.

-Amm... Yoon-Gi- hablo el chico, pero antes de terminar de hablar, el pálido chico respondió lo que supuso su compañero le iba a preguntar.

-Si Nam-Joon- hablo con el fastidio marcado en su voz –Si iré, no voy a dejar que Jungkook vaya solo a esa fiesta- termino de hablar y le lanzo a Yon-Soo una mirada bastante complicada de descifrar, pero que aun así causo que el gris se apoderara de los ojos de la chica.

La noche comenzó a llegar y así como en su evento de presentación, Jin se encontraba en la habitación de Yon-Soo, ayudándole a alistarse para la fiesta.

El traje que Soonie compro, venia con una peluca, unas lentillas diferentes y un parche para el ojo, pero de esos accesorios, decidió solo usar las lentillas, no le vio razón a usar lo demás, su cabello era lo suficientemente largo como para que Jin le peinara como el personaje y quería hacer notar la lentilla que tenía una estrella de cinco picos en su centro.

Jin peino y maquillo primero a la chica, para después ayudarle a colocarse el corsé blanco que venía también con el atuendo, después le coloco el vestido y al final ato las cintas de este que iban a su espalda, claro está que antes de todo esto, Soonie ya se había colocado su body para ocultar su impresión y evitar cualquier situación con los invitados humanos a la fiesta.

-Listo linda, ya quedaste- indico Jin al tiempo que hacía a la chica girar frente al espejo que tenía en su habitación –Es hora de bajar- la tomo de la mano y la llevo escaleras abajo, donde todos los chicos ya se encontraban ahí, con sus elegantes trajes negros, acompañados de una camisa roja de seda, zapatos y corbata igualmente negros. Lo que más resaltaba en cada uno, aparte del leve maquillaje pálido con sombra un poco oscura que Jin les aplico, era el par de colmillos falsos que se habían colocado.

Yon-Soo sonrió, todos sus hermanos se veían muy bien, incluso Yoon-Gi, quien solo se había puesto un pantalón formal negro y una camisa blanca que resaltaba la palidez de su piel.

-Antes de irnos- hablo la chica y todos la miraron atentos –Quiero pedirles algo- continuo algo nerviosa –Necesito que, por nada del mundo, se alejen de mi esta noche, salvo que sea sumamente necesario- los miro apenada –Por favor- termino su petición a modo de súplica.

-Claro que si linda- respondió Jin, quien aun sin entender por qué la chica les pedía eso, decidió hacerle caso, ya que, si ella lo pedía, debía ser por algo.

Todos abordaron la camioneta y salieron rumbo al lugar que Hyun-Soo le había indicado a Nam-Joon.

Al llegar ahí, los recibió el valet y comenzaron a descender del vehículo, la última en hacerlo fue Soonie, quien bajo con ayuda de Tae.

Yon-Soo de inmediato comenzó a percibir la presencia de los vampiros Idols y se tensó, trato de disimularlo, ya que Tae la llevaba tomada del brazo. Los demás chicos iban detrás de ella, como escoltándola y protegiéndola.

Las puertas de salón a donde llegaron se fueron abriendo poco a poco e incluso antes de que todo el grupo hiciera acto de presencia en el marco de esta, al menos 20 de los presentes ya estaban mirando en esa dirección.

De estos 20, todos eran vampiros y lo que los hizo voltear en aquella dirección, fue la fuerte jerarquía que se sintió de repente. Los más atentos a esto, fueron Kang Daniel y Lisa, quienes no reconocieron la presencia y se desconcertaron, ya que se suponía a la fiesta irían solo personas conocidas.

Pero al ver quiénes eran los que atravesaban las puertas y comenzaban descender las escaleras, ambos se desencajaron, ya que la primera vez que vieron a la chica, a pesar de la edad que esta tiene, su jerarquía no era tan imponente.

Fue muy clara la mueca de molestia que ambos chicos pusieron al verla pasar frente a ellos, porque, aunque intentaran resistirse, la jerarquía de la chica los obligaba a bajar la cabeza. Acto que realizaron todos los vampiros presentes en la sala. Al menos casi todos.

Había solo un par de vampiros que no lo hizo. Yon-Soo lo noto, la jerarquía que estos tenían era más imponente que la de Yon-Soo, pero la chica no hizo por investigar quienes era, aunque una de esas presencias se le hizo demasiado familiar y se puso en alerta.

Los chicos siguieron avanzando hasta el lugar donde serian acomodados, pero varios entre ellos Jin y Ho-Seok, se sintieron incómodos al sentir tantas miradas encima.

-¿Sera que nos vemos demasiado bien?- pregunto Jin tratando de relajar el ambiente.

-O demasiado mal hyung- respondió Jimin quien incluso estaba temblando de lo nervioso que se sentía.

-Claro que no chim-chim- respondió Ho-Seok, tomando discretamente la mano de su pareja para tranquilizarlo –Te ves hermoso y muy sexy- añadió, diciéndole esto al oído, provocando que el pequeño chico se estremeciera y se sonrojara ligeramente.

-Tranquilo Jin oppa- hablo al fin la chica abrazándose al cuello de su hermano mayor –Te ves extremadamente bien, por eso no dejan de mirarnos, no por nada eres mundialmente hermoso- dijo la chica con una pequeña risilla, sabía que esa oración siempre animaba a su hermano, siendo tan vanidoso en algunas ocasiones, amaba que le dijeran eso.

-Tienes razón mi niña- respondió muy animado, e ignorando las miradas.

La fiesta siguió su curso, Yon-Soo era consciente de la cantidad de ojos que la observaban, pero hizo su mejor esfuerzo para mantener oculto su nerviosismo y que sus hermanos disfrutaran la fiesta lo mejor posible.

Eran pasadas las 11:30 de la noche y a pesar de que llevaban poco tiempo ahí, todos los chicos, incluida Soonie, acordaron irse ya a descansar, tal parecía que aquellas difíciles semanas, aun les estaban cobrando factura.

Antes de abandonar el lugar, Daniel se acercó a la chica, coloco un pequeño pedazo de papel en su mano y en un susurro prácticamente inaudible le hizo una petición.

-Ven aquí a las 3:00 am- y regreso a su sitio con sus compañeros de grupo.

Llegaron al departamento alrededor de las 12:10.

-Vaya- exclamo Nam-Joon –Que fiesta tan mas... extraña- menciono y se dejo caer en el sofá de la sala.

-Cierto- respondió Jin -¿Por qué todos nos mirarían de esa manera tan extraña?- cuestionó, pero su pregunta fue más al aire que dirigida a alguien.

Un sonoro suspiro resonó por la estancia y todos miraron alertas a la chica, quien tenía un semblante un tanto afligido y preocupado, sus ojos magenta salpicados de verde, delataban su estado de ánimo y más aún porque ya se había quitado las lentillas desde que entró al departamento.

-¿Todo bien Soonie?- pregunto Tae, quien no podía ocultar el semblante de preocupación.
-Si TaeTae… es solo que…- la chica sopeso la idea de realmente decirle a sus hermanos la realidad del mundo donde viven.

-¿Qué pasa linda?- Jin se acercó a ella un poco preocupado y deslizo varias veces sus manos por los brazos de la chica para darle tranquilidad.

-No sé si sea la mejor idea decirles esto oppa- suspiro nuevamente –Es solo que ahora que saben lo que soy… quizás deban estar al tanto del alcance que tiene mi mundo en sus vidas.

Un bufido exasperado se escuchó en la sala. La cara de pocos amigos que tenía Yoon-Gi dejaba en claro que no tenía la paciencia suficiente para tantos rodeos, lo cual se reflejó en los ojos magenta de la chica.

-Las miradas de esta noche sobre nosotros eran por una razón en específico- Yon-Soo agacho su mirada y continuo la explicación –En mi mundo, las cosas se manejan por jerarquías, primero es por edad, un vampiro con más años siempre será más imponente y fuerte que un vampiro menor, después esta ser líder de clan, esto se logra cuando vas ante el vampiro más viejo que existe en este mundo y reclamas el territorio donde vives, aunque para ello, debes de haber logrado convertir al menos a un humano, a ellos no se les puede matar fácilmente, solo entre líderes se pueden hacer daño, pero debajo de ese rango, entre vampiros comunes si podemos matarnos, aunque se requiere cierto nivel de habilidad y armas específicas para poder lograrlo.

-¿Armas especificas?- interrumpió Jungkook, quien calló de inmediato al sentir el apretón que su pareja le dio en la pierna y agacho su mirada triste.

-Si- fue Tae quien respondió –Como la daga que tiene Soonie, la que saque de la cajita aquella vez- Yon-Soo se estremeció ante el recuerdo de las dos ocasiones que Tae ha tenido algo que ver con aquella arma.

-Así es- respondió ella –Ese tipo de armas.

-Y todo esto a ¿Que viene Soonie?- cuestiono con voz calmada Nam-Joon.

-Como empecé a decirles, viene al tema de las miradas esta noche- respondió –Desde que la sangre humana entro de nuevo en mi sistema- empezó –Mi jerarquía recobro su fuerza natural… mi edad nuevamente pesa sobre los demás vampiros, cosa que nadie noto cuando la presentación o cuando fuimos el evento de premiación, ya que en ese momento a pesar de que se podía percibir ligeramente, no la sentían totalmente como hoy- concluyo.

-Espera- dijo Ho-Seok alarmado -¿Los demás vampiros?- su tez palideció aun más de lo que el maquillaje aparentaba –¿Hay más?
Los ojos de la chica se tonaron esmeralda, eso era lo que no quería, causar pánico en sus hermanos y era justo lo que estaba provocando.

-Sí, Ho-Seok oppa, hay más- respondió –En cada grupo de Idols hay por lo menos dos vampiros.

La sala se quedó en total silencio. Incluso Yoon-Gi se quedó pasmado, eso era algo que no se esperaba, tanto tiempo conviviendo con esas personas y no saber nada, ahora ni el mismo sabía que sentir acerca de la chica, se sentía mal de haberla juzgado así. Se sentía extraño, pero no quería cambiar su opinión acerca de ella, no aún.

-Bueno- exclamo Tae –Si Yon-Soo existe siendo lo que es, yo creo que era obvio que tenía que haber más como ella- trato de poner su mejor sonrisa para relajar el ambiente.

-Tienes razón Tae- continuo Jin –Además, hemos convivido mucho con esas personas y jamás ha pasado nada, pienso que no tiene por qué cambiar la situación ahora- también sonrió -¿No crees Nam?

-S-si, para nada- respondió el aludido –Son cosas sin importancia, mejor vayamos a descansar.

Todos asintieron y se fueron a sus habitaciones.

A estas alturas, ya a nadie se le hacía extraño ver a Tae y a Soonie entrar juntos en la habitación de ella, esto se había hecho costumbre, ya que constantemente la chica tenía pesadillas y Tae era el único que lograba tranquilizarla.

Al principio Tae dormía en el piso, pero después optaron por cambiar su cama a la habitación de Soonie, así lo único que los separaba era la mesita de noche.

Tae se acercó a Soonie para ayudarle a desabrochar su vestido, para después darse la vuelta mientras la chica se lo quitaba y se ponía su pijama.

-Soonie- hablo mientras seguía dándole la espalda –Tengo curiosidad en algo- hablo es chico y una ligera risilla invadió el lugar -¿Por qué te ríes?- se giro sin pensar.

-¡Tae!- exclamo apenada la chica y ambos se pusieron sumamente rojos.

-L-lo siento- fue lo único que el chico logro articular y regreso a la posición en la que se encontraba antes.

-Me reí, porque ya se me hacia raro que no me llenaras de preguntas- contesto ella aun con el rubor en sus mejillas y el magenta en sus ojos.

-Aaah- dijo Tae –Es que…- intentó hablar, al tiempo que enredaba sus dedos en su cabello –Me quede con una palabra que dijo la mujer que vino a verte.

-¿Cuál palabra Tae?- cuestiono la chica, al tiempo que se metía dentro de las sabanas de su cama.

Tae se giro para mirar al fin a la chica.

-¿Qué es Donsuit?- pregunto sin más, dejando a la chica sin palabras y mas roja que antes.

TUS OJOS TE DELATAN (BTS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora