39 Las Niñeras

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Camino de un lado a otro pensando en que hacer, si ellos notan que yo los vi me moriría de la vergüenza y todo sería muy incomodo; mataré a Lana por no decirme nada de esto pero en realidad yo también le he ocultado cosas y no he sido sincera así que puede matarme también. 

Me armo de valor y me arriesgo a volver, agarro las cosas que he dejado sobre el mesón y camino de regreso, mi plan consiste en disimular que recién he bajado las escaleras por lo que ruego que ninguno de los 2 estén pendientes de las escaleras. Cuando estoy cerca me asomo, Zayn esta de espaldas y Lana está totalmente concentrada en él, doy los primeros pasos para poner en marcha mi plan pero su conversación me para en seco.

-Yo la vi saliendo de tú habitación, ¿que esperabas que pensara?.- Lana trata de alejarse pero él le agarra del rostro impidiéndoselo.

-Tienes toda la razón cariño.- Tapo mi boca y abro los ojos con la emoción a flor de piel causándome.- Pero no sucedió nada entre ella y yo, Lola me busco en la noche y eso no te lo voy a negar pero la detuve dejando las cosas claras.    

-Eso yo no lo sé, ella salio y me dijo cosas horribles... cosas que aún duelen.

-Lana, estoy perdido por ti.- Empiezo a dar vueltas saltando de la emoción y cuido de no hacer mucho ruido, ¡yo lo sabía!.- Lola y yo, bueno... follaba...-Mi mejor amiga lo interrumpe alzando una mano.

-No lo digas, odio que lo digas.- Él acaricia sus mejillas y ella evita mirarlo.

-Nunca hubo una relación entre ella y yo, nunca hubo nada más que... más que eso pero, ¡joder, Lana! yo lo quiero todo contigo; desde que te vi me gustaste aunque no lo quise aceptar porque eres la hermanita de mi mejor amigo y pensé que solo era algo físico que se pasaría pero cada día que paso contigo, cada día en que te voy descubriendo más me doy cuenta de que estuve hasta la mierda de equivocado.- Lana trata de no sonreír pero se le hace imposible tanto como a mi, las manos me sudan y tengo el pecho lleno de ternura.- No sé que mierda hice y lamento mucho que te hayas hecho una idea equivocada sobre Lola y yo pero...-Él suspira y se acerca más a ella, yo estoy explotando de la emoción.- ¿Me perdonas?.

Una vez más empiezo dar saltos acompañados de un baile y mi corazón estalla de ternura, el sonido de un beso vuelve a sonar y sé que es mi oportunidad perfecta para volver a subir; ambos están muy ocupados como para notar como vuelvo a subir las escaleras, a medio camino el timbre suena por toda la casa y siendo una oportunidad perfecta para fingir mi bajada.

-¡YO ABRO!.- Grito muy fuerte anunciando mi presencia, bajo las escaleras por 2da vez a velocidad con cuidado de que nada se caiga de mis manos y sin dar ni una mirada hacia ellos. Admito para mi misma que me da vergüenza haber escuchado lo que hablaban sin mencionar los besos.

Lizy me sigue ladrando y corre detrás de mi, acomodo la laptop entre mis manos y el timbre vuelve a sonar más veces con impaciencia pero la pastor alemán me hace difícil el camino, dejo todo sobre un mueble cerca de la puerta y miro por el pequeño agujero.... que alguien me ayude. El timbre vuelve a sonar con más insistencia y escucho pasos aproximándose desde la sala, respiro hondo antes de abrir.

Harry me mira, como siempre claro esta, molesto no lleva bandana ni gorra y su cabello se mueve ante el viento frió de hoy; lleva puesta una camisa negra llana y jeans del mismo color, sus botas han sido remplazadas por vans y me encuentro admitiendome a mi misma que se ve muy bien. Soy una completa tonta.

-Estaba a nada de derribar la puerta .- Ahora yo lo miro molesta y él parece notarlo.- Pensé que alguna mierda había pasado.

Al menos se excusa de  horrible saludo, como nunca, ¿verdad?.

-Buenas Tardes Harry, ¿que haces aquí?.- Trato de sonar tranquila y educada pero la realidad es que estoy nerviosa, confundida, enojada y quiero golpearlo.

My GirlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora