CONEJITO 小兔子 JELSA

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Los ojos de Elsa comenzaron a cristalizarse, poco a poco.
Jack lo había notado, e inmediatamente cambió su expresivo molesto a uno más preocupado. Se acercó a Elsa, sabiendo que era una situación sensible para ella y la sostuvo por los antebrazos.
Elsa le observó, preocupada y nerviosa, y luego Jack le sostuvo las mejillas con suavidad.

-Elsa, si no lo deseas, no vamos a abrir la puerta. Ese idiota puede quedarse gritando afuera lo que quiera, no me importará.

Elsa pudo haberlo tomado como una broma, pero el semblante de Jack representaba seriedad total. No había espacio en su rostro que no demostrase seriedad.

-Y-yo...

15 minutos después...

-¿Qué pretendes con Elsa?

Tadashi estaba sentado frente a Jack y Elsa. La última nombrada bajaba la cabeza a la par que jugaba con sus dedos, mientras que Jack se cruzaba de brazos con semblante duro, y observaba intimidante al ahora pelinegro, Tadashi. El muchacho Hamada estaba perturbado. No es como si tuviese miedo de Jack... Pero lo tenía. El muchacho se veía brutalmente molesto con la presencia del muchacho pelinegro, y lo cierto era que, si, le molestaba en mayoría porcentual.

-Elsa, ¿Quién es él? -Preguntó Hamada, frustrado.

-YO SOY QUIEN HACE LAS PREGUNTAS, HAMADA.

-Jack... -Murmuró Elsa suavemente.

-¿Jack? -Dijo Tadashi.

-Cállate, feo. -Se dirigió Jack a Tadashi y luego a Elsa- ¿Qué pasó, Elsa?

-¿Elsa? - Tadashi se levantó- ¿Es t-tu novio?

Elsa no comprendía por qué Tadashi se escuchaba dolido. No podía comprender nada.
”¡Él terminó conmigo!”. Elsa estaba frustrada. No sabía el por qué de la presencia de Tadashi ahí, y Jack actuaba como un perro bravo ante su presencia.

-Jack... -Elsa le observó cuidadosamente- ¿Podrías dejarme hablar con Tadashi un momento?

El rostro de Jack se desfiguró por completo. Casi como si le hubiesen dado un balazo. Como si Elsa hubiese dicho algo hiriente.

Sus ojos brillaron antes de correr la mirada hasta Tadashi, y apretar los labios.
Jack soltó un suspiro pesado, antes de asentir.

-Bien.

Y luego de que se levantase, Jack fue a la habitación, cerrando esta de un potente portazo estruendoso.
Elsa guardó silencio para que Tadashi comenzase a hablar, y lo cierto es que no tardó demasiado.

-Yo... Elsa, yo sé que ha pasado tiempo... Pero yo venía a pedirte perdón. Yo... Hace un año me di cuenta que... T-te quiero. Lo hago... Lo hago de verdad. Y-yo... Tuve una revelación hace un par de días... No sé cómo pasó pero desde que te vi en el barco... Un día solo quise llamarte y pedirte perdón. No sé quién sea el muchacho ese...

-¡JACK PARA TÍ, IMBÉCIL! -se escuchó de otra habitación.

Elsa quiso reír, pero no lo hizo. Procesaba lentamente toda la información que se le estaba cediendo. ¿Tadashi pidiendo perdón? ¿Qué significaba eso de una "revelación"? ¿Tendría que ver con... El deseo no oficial de Elsa hacia Jack? ¿Hamada estaba... Hechizado, quizás?

-Tadashi, yo no...

-Escucha, Elsa. -Tadashi se volvió espontáneamente un muchacho amoroso- Si aún se puede, yo te quiero devuelta.

-No... No, Tadashi, eso no es...

-Elsa, no puedes enamorarte tan rápido de ese chico. -Hamada comenzó a molestarse un poco- No sé cuánto tiempo tendrán juntos, pero nosotros estuvimos todo un año... Te conozco más de lo que cualquiera puede hacerlo, Elsa.

Entonces, Elsa comenzó a pensar.
Tadashi estaba hablando a través de la rabia que lo consumía por el rechazo, y la idea de Elsa con alguien más. Pero él tenía un punto. ¿Podía ella... Enamorarse tan rápido de Jack?

Sentía algo. Quizás le gustaba. Pero habían muchas cosas que descubrir con respecto a Jack aún. ¿Estaba dispuesta? ¿Y si después no le gustaba? ¿Jack desaparecería? Era todo demasiado complejo.

-N-no sé... Tadashi, yo no sé...

¡PAM!

Portazo.

Elsa volteó asustado por la sorpresa del golpe, y solo pudo ver la puerta de la habitación abierta, y la de entrada.

Mierda.

Jack había salido. Quizás confundió los titubeos de Elsa con indecisión. Oh, cielos. Eso era malo. Jack podría ir a cualquier lado. ¡No sabía qué podría hacer enojado y solo! ¿¡Y si explotaba?! ¿¡Podía explotar!?

Elsa se levantó inmediatamente, seguida por Tadashi, y antes de salir, tomó su chaqueta, y le dijo a Hamada:

-Escucha, Tadashi. Jamás te engañé ni nada por el estilo, pero ese muchacho ha estado conmigo más tiempo del que crees. Es cierto, no tenemos mucho tiempo siendo... Algo, precisamente denominado. Pero... Me gusta. Él me gusta mucho. Y yo ya no puedo estar contigo. Lo siento mucho. -Dijo antes de jalar a Tadashi con ella, fuera de su departamento, y cerrar la puerta.

No alcanzó a escuchar lo que Tadashi le gritaba, sin embargo, tampoco le interesó.

Jack podría estar en cualquier lado, creyendo algo que definitivamente no era así. Podría ser peligroso.
Demasiado.

¡Jack se ha ido! :00