F R I E N D S

01

-Ugh, no entiendo porque ves estos videos. —Kagome aparta su mirada de la pantalla de la computadora de su mejor amigo.

-¿Qué?—El chico pausa el video y mira a su mejor amiga. — ¿Sabes lo difícil es pasar Dishonored matando a todos sin que te toquen? Este chico es un campeón.

-Que raro eres. —Dice la chica con una mueca en sus labios, se acuesta en su cama y prefiere revisar el Facebook. —Por eso no tienes novia.

Inuyasha se siente ofendido y piensa decirle algunas palabras no aptas para menores de edad, sin embargo el video es más importante que molestar a su amiga, prefirió seguir viendo e ignorarla.

Inuyasha Taisho y Kagome Higurashi han sido amigos desde que entraron a la secundaria, algunos pesaron que a los pocos meses se harían novios como suele pasar, aunque ellos no lo hicieron, se convirtieron en grandes amigos, se cuidan mutuamente y se molestan constantemente, parecen más hermanos ante los ojos de las familias de ellos.

Kagome baja su celular y frunce el ceño, tiene el presentimiento que olvido algo pero no recuerda precisamente qué, entonces prefiere ignorarlo y seguir navegando por el internet. Un trueno se escucha fuera de la ventana, haciendo que los dos adolescentes saltaran de donde se encontraran y se abrazaran. No recordaban que la lluvia fuera tan fuerte, pensaron que solo era una llovizna.

-Odio cuando caen truenos. —Inuyasha se separa de su mejor amiga. —Me altera hasta la mierda.

-Lo sé. Inuyasha, ¿no sientes que olvidamos algo?

El chico lo piensa por unos segundos para posteriormente negar con la cabeza, está lloviendo y es domingo, sus tareas ya se encuentra realizada y la ropa tendida dentro de la casa de su mejor amiga, así que nada debe estar fuera de su lugar. Los dos alzan los hombros despreocupados, es su último día de libertad antes de comenzar u nuevo año en la secundaria y deben aprovecharlo viendo netflix y comiendo palomitas.

O ese era su plan hasta que la puerta principal de la casa de Kagome es abierta y azotada con fuerza después. Inuyasha se levanta de inmediato igual que Kagome, los dos toman lo que tenían cerca para defenderse de cualquier que se atreviera a meterse a la casa, no lo saben, pero estos jóvenes son un peligro con un... ¿Almohada? Y ¿Una revista de chismes?

-Tú lo distraes con tu almohada y yo lo golpeo con la revista. —Susurra Inuyasha, su mejor amiga asienta con la cabeza.

Bajan silenciosamente por las escaleras, saben que arriesgan sus vidas al enfretarse a un loco pero les vale caca, prefieren luchar que morir cobardes.

-Quiero que mi tumba diga "Murió por jugarle a la verga."—Dice Inuyasha y sonríe cuando recibe un golpe en el hombro por parte de Kagome. —Broma... O algo así.

-Cállate pedazo de animal, nos puede escuchar.

-¡Huy, perdón! Déjame decirte algo Kag....

-¡Así los quería encontrar, imbéciles!—Una tercera voz interrumpe a Inuyasha. Los dos adolescentes gritan y avientan sus armas al rostro. — ¡Auch, idiotas!

Kagome se queda quieta por unos segundos reconociendo la voz de la persona, abre los ojos como se lo permite sus parpados y señala al hombre frente a ellos. Inuyasha al reconocer a su hermano sonríe, al final solo es un idiota.

-¡Hola, hermano!—Saluda el peli negro, al observar un poco más de cerca puede notar que se encuentra completamente mojado de la cabeza a los pies. —Uh, ¿no llevaste un paraguas?

Kagome se da un golpe en la frente al recordar lo que debían hacer y estrictamente sus mamás le dijeron que era un asunto sumamente importante y no podían olvidarlo como siempre. Sesshomaru Taisho debía ir a realizar su examen para el ingreso a la universidad, y no llevo paraguas, por ello los menores debían ir a recogerlo. Pero bueno, se quedaron viendo videos y se les olvido el chico.

-Perdón, Sesshomaru. —Trata de hacer su mejor sonrisa inocente, sabe que el mayor tiene una debilidad por ella al verla como su pequeña hermana menor. —Fue culpa de Inuyasha.

-¡¿Qué?!—Inuyasha mira a su amiga con horror, él sabe que su hermano mayor no le tendría piedad como a ella. Hija del mal.

Sesshomaru suspiro, agarro la almohada que había caído a sus pies y la alzo hacia Inuyasha. El menor de los Taisho dio un grito demasiado agudo y comenzó a correr. Kagome lo grabo el momento en que la almohada se estrelló en el rostro de su mejor amigo.

-Por comerte mis chocolates. —Sonrió y le hizo zoom a su rostro con mocos.

Sí, ellos dos son los mejores amigos para siempre...O algo así.