(Perdón por tardar con esta historia)
La vida es una mierda, y es más cuando apenas estas descubriendo todo sobre ti y el amor. Kagome lo está sintiendo ahora mismo, realmente no comprende mucho sobre ella pero el dolor que esta experimentando es horrible, lo suficiente para que se encerrara en su cuarto si querer ver a nadie, ni siquiera a Inuyasha que le ha suplicado verla al menos unos minutos.
-¿En serio dejaras a tu mejor amigo afuera de todo?—Pregunto su mamá detrás de la puerta de la habitación de su hija, su voz se escucha triste. —Él esta esperando en la sala desde hace una hora.
-¡Dile que se vaya!—Grita la adolescente molesta, no quiere ver a Inuyasha para que le diga que siempre tuvo razón de su primer amor, su corazón no puede soportar el regaño ahora. —No quiero verlo.
Escucha el suspiro de resignación de su mamá y como sus pasos se alejan de su habitación, sabe que su egoísmo también daña a su mamá pero no tiene las fuerzas necesarias para decirle ella misma a su mejor amigo que se largue. Le pedirá perdón a su mamá después.
Conecta sus audífonos a su celular y se los coloca, la melodía triste invade sus oídos y siente sus lágrimas bajar por sus mejillas.
-¡Sobrevivo por pura ansiedad con el nudo en la garganta!—Comienza a cantar, bueno a gritar, sumergiéndose en la canción de RBD. — ¡Sálvame del olvido! ¡Sálvame de la soledad!
No puede creer lo tonta que llego a ser por un chico que jamás gusto de ella y solo jugo con sus sentimientos, y aunque Sango dijo que el primer amor es la enseñanza de vida para futuros romances... Ella quiere olvidar todo; quiere olvidar el dolor que siente.
Se cubre con todo su cobertor mientras que sigue cantando en un susurró, sabe que se ve patética, una chica que tal vez hace un drama, sin embargo quiere tener su noche de dolor para recuperarse pronto.
-No me dejes caer jamás...
La puerta de su habitación es abierta con brusquedad, haciendo que Kagome se levantara asustada y destapándose en el momento. Inuyasha esta en la puerta con el ceño fruncido, se ve realmente molesto.
-Tú.
-¿Yo?—Kagome traga saliva con nervios.
Su mejor amigo camina con prisa, su expresión enojada no cambia hasta que la envuelve en sus brazos, solo en ese entonces los dos sienten que todo estará bien.
Su hogar, su refugio ante todo son ellos. Solo un abrazo de parte de cualquiera de los dos puede calmar los pensamientos malos y tranquilizarlos.
-Aquí estoy. —Dice Inuyasha con suavidad, su mano recorre el cabello de Kagome y comienza con mimos para darle a entender a la chica que no se ira.
Se quedan en silencio abrazados, tratando de normalizar su corazón necio que solo quiere acelerarse en la presencia del otro. Aunque solo uno se da cuenta de sus verdaderos sentimientos por el otro.
Los minutos pasaron, los dos mejores amigos decidieron acostarse en la cama y ver una película de terror a petición de Kagome que esta cansada de ver películas de amor que solo te mienten.
-¡No vayas, estúpida!—Grita Higurashi señalando la pantalla de su televisor, bufa cuando la chica de la película la matan. —te dije~
-Uhmm ¿si sabes que no te escuchan, verdad?—Inuyasha agarra un poco de las palomitas que la mamá de Kagome les dio hace unos minutos y se lleva algunas a su boca.
-No me importa, pero no entiendo por qué siempre muere la chica rubia. —Bosteza al sentir sueño. —Es muy cliché.
Inuyasha niega con la cabeza, no quiere comentar sobre el cliché en las películas porque al final a todos nos gustan, por lo cual es mejor disfrutar sin quejarse. Deja el tazón de las palomitas en el suelo, abraza una almohada rosa de su mejor amiga y sigue viendo la pésima película pero con una sonrisa en los labios al notar que la tristeza se alejó de Kagome.
-Me doy cuenta de algo. —Dice la chica sin despegar su vista de la escena sangrienta.
Inuyasha hace un ruido para darle a entender que la está escuchando.
-No estamos comiendo helado. —Se levanta y mira con el ceño fruncido al chico. —Que mal amigo eres, sabes que en un momento de decepción amorosa es necesario el helado.
-Ah, sí. —Inuyasha rueda los ojos. —Porque es mi obligación engordarte por tu decepción, mejor te acompaño a cortarte el cabello para que cierre el ciclo.
-Jalo.
Inuyasha suspira, será una tarde larga.
(...)
-¿Qué?—Miroku se dio un golpe en la frente al escuchar las palabras de Inuyasha. —Debes estar loco, en serio.
-No, estoy demasiado cuerdo. —Dice un poco ofendido. —Es lo mejor para todos.
Miroku quiere golpear a su mejor amigo, lo necesita para que recapacite de su locura o al menos reconsidere que su plan esta mal. Algo saldrá muy mal de todo esto, lo que es peor, es más que seguro que Inuyasha terminara lastimado.
-Inu, debes considerar tu plan. —El moreno trata de encontrar las palabras correctas para hablar. —Tus sentimientos, no, olvida tus sentimientos, todo de ti estará destruido.
-Miroku, no puedo profundizar mis sentimientos hacia Kagome. —Dice con una expresión de dolor. —Eso significaría arruinar mi amistad con ella.
-¡No lo sabes!
Inuyasha suspira. —Lo sé y lo mejor de esto es aceptar que Kikyo es lo mejor para mi.
-¡Inuyasha, deja de ser un cobarde!
-¡Cállate y escucha!—Inuyasha se levanta de la cama de su mejor amigo.—Kagome quiere a un mejor amigo no a un chico que este...Este cayendo enamorado de ella, así que debo olvidar esos sentimientos y estar con Kikyo que me ha dicho que le gusto.
Miroku no está de acuerdo con este plan, es una estupidez tratar de olvidar a una persona con otra ¡dios! Incluso él que es el más inmaduro de todos lo sabe. Necesita decirle a Sango sobre la locura de su amigo, entre los dos pueden convencerlo de no hacerlo.
Solo espera que no sea tarde cuando se involucren.

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F R I E N D S
FanfictionSon amigos desde la secundaria, su amistad es lo más sagrado para ellos y nada ni nadie les hará cambiar de pensar, sin embargo cuando creces y experimentas nuevos cambios, es difícil seguir siendo los mismos. Kagome e Inuyasha descubrirán que su am...