🌙SIRENA🌙liskook

Capítulo 3:Lazos rotos.

Jungkook siempre fue un niño débil y sensible. Por eso su hermana mayor era su todo y su ejemplo a seguir, la amaba, era su mejor amiga y siempre que le querían hacer bullying, ella llegaba al recate.

Cuando él inicio primaria ella se encontraba en segundaria, era la chica más linda y amable, por eso todo mundo la amaban. Jungkook era un chico inocente y tímido, por eso sufría mucho de malos tratos. Al irse su hermana cuando él solo tenía ocho años, hizo que él se sintiera confundido, no se despidió de él, nunca supo porqué se había ido. Ella era joven, ¿porqué se iría a los catorce de casa?

Esa era su pregunta, los abusos empeoraron, su asma empeoró y por esa razón nunca le dijo a sus padres, quienes eran muy trabajadores y siempre llegaban tarde, eso y por las constantes amenazas de sus abusadores.

Jungkook ya había perdido un hermano, y no quería perder a su hermana, sin embargo ella también se había ido cuando más la necesitaba.

Por suerte, llego su mejor amiga y ya no le molestaban tanto.

Pero aún así, había quedado un vacío en su pobre corazón.

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Jungkook nunca supo la razón del porqué se había ido, hasta aquel día lo supo. O mas bien la vio.

-. Mami, quieto saber si...-  Sus ojos rasgados pasaron por todos y su piel pálida contrastaba con su cabello cenizo.

Jennie miro a Jungkook con los ojos abiertos, este se quedó quieto y paso sus ojos cafés por su madre que solo observó por otro lado y su padre tragaba sonoramente.

"Así que ese era él motivo"

Una carcajada resonó en toda la habitación y la pequeña hija de Jennie se rió también ignorando lo que sucedía. La mamá de Jungkook lo miro enojada.

Y los abuelos solo silenciaron.

-. Vaya, nunca lo creí de ti hermana. Siempre pensé que te había pasado algo peor o que incluso tenias algún problema igual que yo, pero embarazarte y huir para no ser la burla, eso si supera mis limites.- Ajustó sus lentes y camino hacia ella.- Cuando crecí, creí que te habían incluso hasta violado o secuestrado.- Jennie abrió sus ojos enormemente y sus lágrimas caían por su mejilla.

Miro a sus padres y su mirada sería e indescifrable los hizo sentir su corazón quebrarse.

-. Y ustedes.- Los señaló y les dijo.- Que creen que tengo cinco años, por Dios ya soy grande. Son unos padres muy sobreprotectores, sin embargo de que sirve, si nunca están cuando uno los necesita.- Sin mas paso al aldo de su hermana herido y con ganas de gritar al mundo.

-. ¡Jungkook!- La mamá de Jungkook lo quiso seguir, pero su padre seriamente la detuvo.

-. Pero...- Sus ojos llorosos lo observaron.

-. Dejalo, el tiene razón.- Jennie le dijo en un susurro a su hija que le dijera a sus bisabuelos que les enseñaría su nueva receta de galletas.

-. ¡Abuelitos les quiero enseñar, una nueva receta!- Gritó emocionada mientras tiraba su mochila y ambos bisabuelos iban detrás de ella.

-. Yo...quiero estar un momento a solas.- Su delgado cuerpo paso a su lado y subió a su cuarto.

Mientras ambos padres se abrazaban llorando, creyendo que todo era su culpa.