Sueños Corruptos - Dreammare

Final neutral

"La historia se repite"

Sus pasos decididos golpeaban el suelo con violencia ante su inminente ira, la oscuridad en su cuerpo hacia un sonido asqueroso y lascivo, y sus tentáculos se movían en una danza amenazante y tétrica. Irradiaba oscuridad, negatividad, la ira destacaba en su mirada tan afilada como la de un depredador fijando su presa, la cual se acercaba lentamente, haciendo crujir tanto las hojas como ramas bajo él.

Produjo un sonido parecido a un rugido enojado, pero mas distorsionado y ahogado antes de cortar los arboles a su alrededor en un intento estúpido e impulsivo de asesinar a su hermano con desesperación.

Los arboles se vinieron al suelo haciendo un ruido estruendoso, y él igual, deshaciéndose en la sombra de estos como si la sombra y su oscuridad fueron uno.

Y Dream sintió que despertó un sexto sentido, el cual fue un sentimiento de peligro que se volvió un reflejo lo suficientemente rápido para darse la vuelta y lanzar flechas en dirección a los tentáculos que se acercaban, haciendo que se detengan antes de que siquiera lo tocasen, escucho el grito de ira de Nightmare, hizo una mueca, inseguro de lo que hacia.

Los tentáculos con flechas celestes cargadas de energía positiva regresaron velozmente hacia su punto de salida, siendo arrancadas por otros tentáculos, observo con odio a Dream, pero no tuvo tiempo a reaccionar cuando mas flechas impactaron en su cuerpo, una tras otra clavaron en él con facilidad.

El guardián de los sentimientos positivos se acerco, volviendo a cargar su arco haciendo aparecer sus fechas de la misma nada, y volvió a disparar, con unas ligeras lagrimas amenazando con caer, pero un rostro que no demostraba sentimientos de piedad.

Nightmare no se sentía capaz de disolverse con tantas flechas en él, dejando caer parte de su negatividad, gruño, arrancándose todas las flechas posibles para desparecer lo mas rápido posible en el suelo, deslizándose en las sombras de los arboles caídos hacia un lugar mas seguro.

Pero no sirvió, el dolor se clavo en su espalda, y se vio obligado a tomar una forma física, Dream logro acertar mas de un par de flechas en él pese a ser una simple sombra en suelo.

- Lo siento - Se disculpo en un murmuro suave, dejando que una de las lagrimas cayera por su pómulo, y seguido otra del lado contrario, ambas tan brillantes y doradas como su alma.

¿Por que lloraba? No lo sabia, y no era momento de pensarlo.

Los tentáculos se dirigieron de nuevo hacia él con el objetivo de dañarlo, pero otra vez, de manera rapida Dream evito que algunos lo atacaran, pero no pudo con todos, se vio obligado de retroceder en un salto y volver a disparar estando en una distancia segura.

Liquido negro y flechas de un celeste deslumbrante resaltaban en todo el bosque, era la guerra de dos hermanos que se tomaban en serio el vencer al otro, teniendo objetivos distintos pero determinados en ello.

Ese lugar era un caos, los sentimientos negativos y positivos se mezclaban, sofocando a ambos, se hallaban cansados, pero seguían de pie, no se rendirían solo por cansancio, era todo o nada.

Llego un punto donde Dream tenia varias cortaduras y golpes que pronto serian moretones, si es que salia con vida. Y Nightmare tenia flechas clavadas en sus tentáculos, espalda, pecho, cráneo. Estaban seriamente heridos y no darían su brazo a torcer, en sus cuencas se notaba la fijación a ganar.

Fue ahí donde, por segunda vez, Dream tuvo un mal presentimiento; pero esta vez no sintió ese reflejo de atacar inmediatamente, al contrario, se lanzo hacia adelante, cayendo en el pecho de Nightmare quien clavo sus extremidades extras en su frágil cuerpo, atravesando sus costillas y casi rompiendo sus brazos.

Empujo el cuerpo de aquel ser pútrido hacia atrás, y ambos cayeron en un portal hecho por Dream, quien nisiquiera, sintiendo su cuerpo quemarse ante aquel liquido viscoso contra su cuerpo. Golpeo con ferocidad la costilla de Nightmare, y cuando sus cuerpos cayeron uno encima del otro pudo romper sus costillas, escuchando un grito a la vez que los tentáculos eran retirados de su cuerpo solo para volver a incrustarse.

Por suerte, cuando logro sentir algo en su mano, cuando sentía que su mano quemaba al punto de volver polvo, fue lanzado con ferocidad hacia el suelo a varios metros de Nightmare.

El ser oscuro jadeo, para luego gruñir y rugir cual vestía salvaje y rabiosa, pero no pudo hacer nada cuando una guadaña se clavo en su cráneo, partiéndolo. Pensó que se fundiría en su cuerpo como cualquier otra arma, pero al contrario, esta parecía absorber su energía.

Dream, débilmente, viendo su cuerpo casi hecho polvo, se levanto débilmente para ver a Reaper pelear contra Nightmare.

- ¡Yo me encargo, huye! - Grito la parca, esquivando un tentáculo que al final logro golpear su cráneo, pero no evito que cortara el tentáculo con su guadaña segundos después.

Sintiendo su intento de alma golpear su pecho con fuerza, sollozo por lo que iba a hacer.

No habia llegado hasta ese punto para nada.

Observo la manzana oscura en su mano, dejando caer en el muerto pasto de Dreamtale sus lagrimas de dolor, tristeza, impotencia.

- Por f-favor ... N-No cometan los mismos er-errores .. que yo - Rogo en un murmuro con la voz rota, excavando débilmente con su mano en él suelo muerto, haciendo un agujero casi del tamaño de su mano.

Y de su pecho una luz dorada broto, dejando expuesta su manzana dorada.

Observo ambas manzanas, el equilibrio del universo roto en sus manos.

Lloraba, su cuerpo dolía y su pecho pesaba, se sentía exhausto, quería hacerse una bolita y seguir llorando, pero no pensaba con claridad cuando sentía que iba a morir.

Ambas manzanas fueron dejadas en aquel hueco, pero siquiera antes de poder cubrirlas con tierra; sintió su cuerpo golpes el frio suelo.

Sus cuencas quedaron abiertas, observando sus pies volverse polvo, observando como Reaper no paraba de golpear a su hermano que parecía un ser deforme ante tanto daño.

Y luego, simplemente dejo de ver.

De sentir.

De pensar.

Y de existir.

Pero el ver el cielo de Dreamtale de un color celeste como en sus días de gloria, un árbol crecer de forma apresurada, la vida volver de una forma mágica ...

Fue magnifico saber que pudo remendar su error.