Capitulo 7 La caída

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El espejo mágico observó el nuevo aspecto de la reina malvada que cogía una capa para abrigarse con la intención de salir de la estancia

- majestad.... - empezó el objeto mágico - Si os vais hacer pasar por el príncipe Edward debéis saber que el nombre de Blancanieves es White y nunca.... Lo llama por su antiguo nombre - añadió.

La bruja sonrió ante esa información antes de desaparecer del castillo y adentrarse esa vez con un caballo en el bosque prohibido en busca de la cabaña de la organización de los siete.

Galopó entre los árboles y los matorrales notando el viento que chocaba en su cara antes de volver a ver la cabaña aislada en medio del bosque prohibido, observó los alrededores esperando no ver demasiado movimiento, la situación parecía la misma que las otras veces, supuso que los siete seguían fuera. Sonrió bajando del caballo y caminó a pasos rápidos hacia la puerta de madera con una sonrisa de satisfacción en su rostro. La puerta se abrió antes que pudiera golpear, el muchacho de cabellos negros y ojos penetrantes lo observó al mismo momento que sus ojos se cruzaron. Cambió su expresión dibujándosele una sonrisa de satisfacción mientras se tiraba completamente encima de él abrazándolo cayendo los dos en el suelo.

- Edward... os he echado de menos - comentó en un susurro aun rodeándole con sus brazos

- Y yo a vos - susurró el muchacho que le rodeaba con los brazos - Puedo quedarme unos días antes de partir de nuevo - comentó el muchacho con una sonrisa

- ¿Y los demás? - preguntó desviando la mirada hacia los alrededores al ver solo un caballo

- Me adelante... - susurró - Os echaba de menos y necesitaba veros - susurró acariciando el rostro del bello príncipe

- Me alegro que os adelantarais - comentó el príncipe con una sonrisa acercándose a su rostro.

- No soy el único que os echa de menos mi príncipe - susurró cerca de su oreja consiguiendo que White parara por completo los movimientos de darle un beso - Observad... - añadió Edward en el momento que desviaba sus propios dedos hacia sus pantalones desabrochándolos mostrando su miembro.

White sonrió en el momento que se colocaba entre sus piernas abajando levemente la mirada hacia su cuerpo, seguidamente acercó su rostro hacia el miembro del muchacho

- ¿Os lo vais a tomar verdad? - preguntó Edward con una sonrisa segura

White sonrió ante su pregunta y seguidamente sacó su lengua para pasarla por el glande del muchacho, pero cuando lo hizo empezó a notar un leve mareo que consiguió que parara completamente sus movimientos y se colocara la mano por encima de sus ojos. Noto como un extraño calor le envolvía notándose completamente incomodo, todos los arboles parecían que rodaran a su alrededor, perdió completamente la fuerza y el cuerpo del bello muchacho cayó en el suelo completamente inmóvil.

El príncipe Edward se levantó del suelo en el momento que observaba el cuerpo inerte del príncipe, cogió las riendas del caballo y subió encima escuchando como uno de los siete, Tabernero llamaba a White.

Tabernero se acercó al ver la puerta de la entrada abierta, extrañado salió, vio el cuerpo de White en el suelo alarmándose completamente. Se colocó a su lado e intentó sacudir su cuerpo mientras le llamaba por su nombre pero el muchacho no reaccionaba. Tabernero corrió hacia la primera paloma que encontró y escribió un mensaje colgándole en una de sus patitas, volvió a salir y dejó que el pájaro saliera volando hacia el cielo azulado para que avisara al príncipe y a sus compañeros de lo que había pasado.

Cuando recibieron la paloma mensajera el príncipe y los seis luchadores se dirigieron hacia sus caballos y cabalgaron durante toda la noche para llegar a la cabaña donde White permanecía completamente inmóvil.

WHITE SIN MANZANAWhere stories live. Discover now