Misterio [jb] PAUSADA

18. ''Primeras fiestas''

Era 24 de Diciembre, y era la época en donde todo el centro de Hole Valley se iluminaba con luces adornando cada tienda, en el kiosko central siempre se colocaban noche buenas y siempre Skylar recordaba con nostalgia como su madre solía buscar algunas para acomodarlas. Lo único que Skylar no toleraba era el clima, siempre le costaba más trabajo levantarse para salir a correr y la tentación de quedase en cama todo el día era más fuerte. 

Su bufanda color negro le cubría incluso la boca, Skylar odiaba que sus labios se resecaran para después partirse. El centro estaba lleno, pero con todo lo que había pasado en los últimos meses a Skylar se le había olvidado comprar algún detalle para Lucius y Shane. No esperaba encontrar mucho porque sabía que los mejores detalles iban a estar agotados, pero ambos siempre apreciaban cualquier detalle, sobretodo Shane, era un acumulador. 

Skylar camino hacia la cafetería, no podría caminar sin tener cafeína en su sistema. Había mucha gente esperando para ordenar y se hubiera salido si no su necesidad por algo caliente no fuera una urgencia. Skylar se concentró en el hombre que estaba frente suyo, llevaba un abrigo coló negro que hacía ver sus hombros más anchos, estaba zapateando en el piso mostrando su impaciencia por el servicio lento y la estaba sacando de quicio. Iba a pedirle que dejara de hacerlo, pero cuando el hombre se puso de perfil, se sonrojó. Era el detective Morgan. Si Alessandra estuviera ahí, le diría lo guapo que era y no de una manera discreta, sino que procuraría que él la escuchara. 

—Buen día, señorita Mayer —la saludó el detective cuando la notó también esperando. 

Ella sonrió incómoda. 

—Skylar —dijo—. Y buen día, detective. 

Él sonrió y Skylar no pudo evitar ver sus labios. Estaban un tanto rojizos, eran gruesos y que siempre se curvaban en un sonrisa enigmática. Era joven, apuesto, inteligente y que conseguía ponerla nerviosa. Skylar aún recordaba su interrogatorio, el detective Morgan parecía saber que ella le estaba ocultando algo y ella no quería ser transparente frente suyo. 

—Este servicio es una porquería —murmuró él y Skylar se mordió el labio. Notó que la miraba y de nuevo, le sonrió—. Llevo esperando 10 minutos. 

—¿Qué tal va la investigación de Alessandra? —se atrevió a preguntar. El detective Morgan inclinó la cabeza a un lado y su sonrisa desapareció. No estaba mostrando su placa, pero él nunca haría menos su profesionalismo—. Perdone, pero... quiero saberlo. 

—Sabes que no puedo discutir eso contigo, Skylar. 

Ella frunció el ceño. 

—¿Por qué no? Era mi mejor amiga y es a mi a quien le han enviado... 

Se calló antes de que pudiera arrepentirse. No podía confiar en nadie, ni siquiera en el detective. Porque Skylar estaba segura que aquellas fotografías no habían sido enviadas también a la comisaría y lo último que quería era volver a estar en aquel cuarto gris, obscuro y sucio respondiendo preguntas que aún no había podido resolver. 

El detective Morgan se cruzó de brazos y la vio con atención. Skylar se distrajo un segundo, de nuevo estaba observando sus labios; tenía que dejar de verlo, le doblaba la edad. Sintió una presión su pecho porque si Alessandra estuviera ahí, no hubieran dejado de hablar del detective. Sabía que tenía que concentrarse. 

—Señorita Mayer —dijo entrando a su papel—, ¿tienes conocimiento de algo que nosotros no? Porque si es así, es tu deber reportarlo, de lo contrario, estarías obstruyendo la investigación. Es un delito. 

—Sé muy bien lo que es —espetó con dureza—. Y no, yo no sé nada. Es su turno, para pedir —especificó. 

El detective Morgan era un hombre con experiencia y Skylar puso su cara de poker, porque sabía que él podía detectar con facilidad cuando alguien estaba mintiendo. No le dijo nada más, simplemente se giró para ordenar. Skylar por fin pudo respirar normal, estuvo a punto de arruinar todo porque tenía la certeza de que si la policía llegaba a enterarse de la persona anónima que le ha estado enviando las fotografías, junto con la autopsia de Alessandra, dejaría de obtener cualquier detalle sobre la muerte de su amiga y a la falta de comunicación por parte del detective Morgan, Skylar prefería obtener respuestas de otro lado, aunque aquello implicara confiar en un desconocido.