Un padre encantador (Un darks encantador#3)

Katherine

Mary Katherine se encontraba asustada y confundida, cerca de veinte hombres los rodeaban, estaban a unos cuantos metros de distancia pero caminaban normal, sabía que su plan era asustarlos, frente a ellos a la distancia frente a la puerta más grande y principal se encontraba el más aterrador de ellos.

Volteó a ver a los dos chicos que se encontraban en el mismo peligro que ella, se estaban protegiendo entre ellos, cada uno volteando a un lado vigilando a los extraños sujetos. Notó que estaban asustados todos ellos, podía escuchar como sus corazones se habían sincronizado para sonar a una velocidad bastante acelerada, pero no lo demostraban en sus rostros, tenían que mantener la compostura, no podían mostrarle a los sujetos que les temían.

Sabía que su hermano podía saber algo de lo que estaba sucediendo ahí, ya que cuando se encontró a los dos mientras escapa de los sujetos que lo perseguían actuó como si supiera la verdad, debía preguntarle.

—¿Puedes decirme que mierda está pasando aquí?—Le soltó a su hermano.

—Papá es.... bueno, muy largo contarlo de esa manera, y estoy muy estresado como para pensar una mejor manera de contarlo.

—¿Podemos debatir esto después y ver la manera de escapar de esto?—Soltó Thomas.

Venían de las tres entradas principales, la de enfrente y la de los lados, los chicos apresurados caminaron hacia atrás donde se encontraba un negocio cerrado con rejas por lo que salir por ahí no era una opción aun así se recargaron para no estar en el centro.

Los tres tomaron sus manos con fuerza.

—Perdón—Soltó Jared—, disculpa por mi comportamiento de mierda todo este tiempo, solamente no sabía que sucedía conmigo, estaba asuta—

Katherine no lo dejó terminar, se lanzó contra su hermano y lo abrazó como nunca lo había hecho, como había querido hacer todo ese tiempo, lleno de amor, protección y confianza.

—Siempre puedes hablar conmigo, cualquier problema que tengas podemos resolverlo juntos, siempre, ¿sí? Te amo tonto, mi alma gemela.

—Alma gemela—Soltó el chico aguantando las lágrimas—. Disculpa si nos hice perder el tiempo y ahora por fin logramos estar bien pero en medio de nuestra muerte.

Por fin estaba bien con su hermano, lo que más quería y no podía permitirse perderlo, como tampoco quería perder la oportunidad de ver al chico que amaba, su mejor amigo y mucho menos a sus amados padres, lucharía, no los habían educado para dejarse vencer tan sencillamente.

—Chicos, tenemos que combatir, no podemos permitir que nos ganen sin intentar nada de nada—Soltó a la chica intentando motivar a los chicos.

Vio cómo se observaban entre ellos, después de todos estos meses por fin habían podido arreglar las cosas, por fin podían permitirse amarse libremente y sin nadie que se metiera, ella sabía que los chicos estaban dispuestos a combatir por su amor.

—Espero que no estén tramando nada—Soltó fuertemente el hombre que venía por la puerta de enfrente, era él calvo que más malvado lucía para la chica, el solo verlo le daba escalofríos sin olvidar su voz igual de penetrante—, lo digo porque sería un desperdicio de su energía, y también para mí, esto solo es un mensaje claro para su padre.

—¿En que está metido su padre?—Soltó Thomas con confusión.

—Es complicado—Respondió Jared—. En resumen los abuelos, bisabuelos estaban en la mafia o algo parecido, y papá junto a mamá tuvieron que combatir ya que sería un caos entero, ahora este calvo quiere matar a papá para convertirse en el líder de la mafia o eso.