𝑩 𝑳 𝑼 𝑬 | 𝐇𝐞𝐚𝐭𝐡 𝐋𝐞𝐝𝐠𝐞𝐫 One Shots

《Nuevo Papi》

| Heath |

Es increíble la forma en la que yo terminé en este lugar, viviendo sobre un techo ajeno y manteniendo la calma para no caer en el pecado.

Recuerdo cuando conocí a Ashley:

Era un viernes por la noche mis amigos y yo habíamos decidido ir a un bar. En aquel entonces yo estaba soltero y recién graduado, listo para hacerme responsable de la empresa de mi padre.

Cuando llegamos al lugar había pocas personas, mis amigos y yo nos sentamos en una mesa al fondo ahí tenía la mejor vista, podía apreciar todo el lugar. Mis amigos decidieron ir bailar cada uno de ellos se acercó a una chica que veían en el camino y yo, bueno, me quedé en mi lugar observando todo. No es es que no me gustara bailar, de echo yo soy un buen bailador pero siemplemte en ese momento no sentía ganas de eso.

Estaba apunto de dar un trago a mi bebida cuando una mujer se sienta a mi lado. Ella traía un vestido de color rojo con tirantes y su cabello rubio caía a sus lados, la mujer no era fea.

-tu cara me es conocida-comento con una voz algo ronca yo veía cada movimiento que ella hacía.

-no lo creo, yo nunca la había visto-pronuncie.

-por favor, háblame de tú-me dijo con una sonrisa coqueta -¿te habían dicho que tienes unos ojos muy bonitos?-me pregunto manteniendo aún la sonrisa.

¿Acaso esta intentado coquetiarme?.

Yo en aquel momento no sabía que decir, solo la veía y escuchaba, a todo lo que decía asentía y bueno, yo me sentía como un completo idiota.

-no me lo habían dicho, pero gracias-murmure bajo
-¡pues lo son!, mi nombre es Ashley Green, por cierto- me ofreció su mano
-Heath ledger- correspondi su saludo.

Y de ahí no se despegó de mi en toda la noche. Fue algo increíble saber que ella tenía 33 años, parecía que su forma de vestir, el corte de cabello y el maquillaje ayudaban pues yo hubiera apostado que tenía 27 tal vez un poco más de años.

Como dije desde esa noche no se separó de mi y yo que puedo decir, me sentía solo y ella parecía querer algo conmigo. 4 meses después de nuestra relación (si es que lo puedo llamar así) ella me propuso que viviéramos juntos, decía que era muy difícil viajar de su casa hasta la mía solo los fines de semana y que además estariamos más cerca, y que fue lo que yo hice, decir que si.

Como si todo esto no fuera suficiente dos días antes de mudarme a su casa me confesó algo muy importante para mi

-Heath todo el tiempo que he estado contigo ha sido maravilloso pero hay algo que tu debes saber y es que yo no vivo sola. Tengo una hija de siete años.....

¿Y cuál fue mi reacción?

Solo mirarla con la boca abierta y sin parpadear, eso era increíble, no me molestaba el echo de que tuviera una hija, lo que me molesto es que no me dijera nada. Pero como todo lo demás, seguí con ella.

El día que llegamos a su casa yo no sabía que hacer, ¿cómo iba a presentarme con su hija?, ¿nos llevaremos bien?, ¿será una niña berrinchuda?,¿que opina su padre de esto?. Pero nada de lo que imagine pasó. Victoria resultó ser todo lo contrario, ella era encantadora muy diferente a su madre tanto físico como mentalmente. Ella tenía el cabello obscuro y ojos cafés, su piel era morena.

Realmente fue muy gracioso en ese momento eramos dos niños y un adulto.

Y de esa forma fue por la que termine aquí.

Mi vida no fue mala compartiendo techo con Ashley y Victoria, de echo fue buena. Mi relación con Victoria se fue haciendo más grande cada día. Ella me compartía demasiadas cosas de su vida personal pero todo esto empezó a cambiar cuando ella entró a la adolescencia. Empezando por su cuerpo, Victoria creció demasiado, su altura era muy considerable, seguía siendo delgada pero sin mostrar signos de desnutrición, su peso era el adecuado, sus caderas se hicieron anchas, su trasero creció y sus pechos vaya que tomaron una forma. Todo esto para mi era muy difícil, la niña que cuide y protegí ahora convertida en mujer me resultaba difícil no mirarla con otros ojos.

Mientras mi situación con Victoria mejoraba cada día por otro lado con Ashley empeoraba. Ya no hablamos con frecuencia, casi no convivimos y para finalizar dormiamos separados, todo esto gracias a que ella alegó que necesitaba su espacio y bueno yo dije que si. Pasaba tanto tiempo fuera que no se daba cuenta de las insinuaciónes de Victoria hacia mi. Si, he notado todo lo que ella hace para llamar mi atención, la forma de actuar enfrente de mi, su forma de vestirse pero sobre todo los cariños que suele hacerme.

Todo esto es difícil pero es algo de lo que no quiero alejarme me agrada estar aquí pero siento que si miro a Victoria con otros ojos me estaré traicionando a mi mismo por querer algo con la niña que cuide por muchos años.

Como dije es algo difícil, trataré de buscar una forma para sobrellevar todo esto. Pero por ahora disfrutaré de la dulce compañía de Victoria.

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