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El amor es un tema bastante delicado y subjetivo, cada persona lo ve, lo siente y lo expresa de distinta forma. Por eso muchas veces personas que se aman no terminan juntos y no porque no haya amor, sino porque no estan en sintonía. Para algunos el amor es estar allí con la persona y procurar su bienestar y su éxito de la forma más abnegada posible, para otros es dejarlo ser libre en una relación abierta donde la otra persona se siente cómoda y feliz, otros nunca pensarían en dejar que su pareja estuviese con alguien más, otros disfrutan eso mismo.

El amor se manifiesta de muchas maneras, y te golpea de frente cuando menos te lo esperas, durante tu infancia, a los 30 años, cuando te acabas de divorciar o recién terminada tú relación de año y medio.
Hay personas que se enamoran a primera vista y lo persiguen hasta el final como el protagonista de "Big Fish" una película que me gusta mucho, o puede aparecer en una persona que conoces hace mucho de la cual nunca lo esperaste, o en una que siempre pasó desapercibida pero ahora que lo notas tiene mucho sentido.
El amor para muchos es una droga, para otros es una distracción, otros no le prestan atención y así van por el mundo sin poder dar testimonio de lo más cercano a una experiencia divina que puede tener realmente un ser humano: "estar enamorado".
Hay personas que lo toman con calma y dedican el tiempo para analizar todo, pros y contras de la situación, y otros que se lanzan a ojos cerrados dejándole a su futuro yo que se preocupe por las consecuencias, en realidad no sé cuál es peor porque he estado en ambas posiciones.
Algunos dejan pasar las oportunidades de amar por pensarlo demasiado y otros ven oportunidades donde no las hay y se estrellan.
Y así vivimos cada uno con sus propios relatos amorosos e historias fascinantes de cómo ese maravilloso sentimiento esotérico les cambió la vida o al menos la forma en que la ven.
Yo, en especial, creo estar definido por cada caso que acabo de señalar, siempre tengo una historia para contar y otras que no son aptas para todo público. He pasado por cada faceta que el amor puede ofrecer, y gracias a ello he reído, llorado, sufrido, me he divertido, la he pasado súper bien y muy mal, pero lo más importante: he amado. Me han rechazado, he rechazado, he amado en silencio por años, y he tenido relaciones paradisíacas con finales infernales. No tengo preferencias a la hora de enamorarme de alguien, simplemente lo hago, por eso no sé cuándo me va a golpear la próxima vez, es impredecible y sorpresivo la forma en que el amor llega. Ves a esa persona y quedas en shock, puede que sea la primera vez que la veas o la primera vez que la veas con esos ojos, en ambos casos es igual de extraordinario. Sientes que el cuerpo se te paraliza, todo se ilumina, las nubes se abren, un haz de luz baja del cielo, un coro de ángeles al unísono en el fondo entonando: "te jodiste".
En el momento en que te das cuenta de todo eso es demasiado tarde, tienes ya un pie dentro,, solo te queda rezar para que esa montaña rusa a la que llamamos amor no se descarrile, caiga desde 100 metros de altura y te estrelle de cara contra el suelo.
En el mejor de los casos para ti ese amor es correspondido, te sientes en el cielo, todo es color de rosa, tus sueños se cumplen, la suerte está de tu lado y te embarcas en una aventura más peligrosa y emocionante que las de Julio Verne. Al principio las relaciones de este estilo son una maravilla, se sienten en una burbuja de amor los dos solos alejados de la sociedad, es un mundo perfecto, ideal, una utopía donde solo existen ustedes dos en armonía. Hasta que recuerdan que son seres humanos, el ser humano es un ser demasiado complejo y lleno de un montón de resentimientos, inseguridades, miedos, fantasías, y una que otra locura, para luchar contra todo esto se necesita un nivel de madurez con el que lastimosamente no todos cuentan y a razón de esto terminamos teniendo conductas autodestructivas que en la mayoría de los casos afectan a la otra persona, los mayores enemigos del amor somos nosotros mismos.

Memorias de mis infortunios amorosos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora