Memorias de mis infortunios amorosos.

VI

El mundo es demasiado ambiguo, y hay un millar de salidas para una situación, el problema es como te afectan a ti esas diferentes salidas. Los pongo en contexto, aunque esto ya se sabe, sigo prendado con una persona que no puedo leer y no tengo ni la más mínima idea de lo que pasa por su cabeza en ningún momento, todo iba tan bien que me duele recordarlo, y no se que hacer al respecto. No nos hemos visto desde que esto empezó, y básicamente ya no hablamos. Vivo todos los días leyendo frases y publicaciones que me tientan a ir de un lado a otro. Por una parte están estas publicaciones cursis que dicen que hay que luchar por el amor si es verdadero, porque al final del camino siempre valdrá la pena, otros religiosos que dicen que tal vez Dios puso a esa persona en tu camino pero luego te coloca pruebas a ver si la mereces. En la otra mano tenemos las que dictan que se debe velar por el propio bienestar emocional y desechar todo lo que te afecte de forma negativa, esto es muy fácil decirlo pero no hacerlo, es de estas cosas que mucha gente predica pero muy pocos aplican. Entre lectura y lectura me enfrento ante un dilema, no tengo ni idea de que hacer. Por un lado, podría hablar con ella y explicarle mi situación, y tratar de buscar una explicación entre ambos, pero el terror de qué le importe de 0 a nada es demasiado, no se si podría seguir viviendo de la misma manera si ella ahora mismo me dice que ya lo superó completamente y no le afecta en absoluto. Por otro lado puedo yo tomar la decisión de olvidarla, desfijar su chat porque básicamente ya no hablamos y dejar que el tiempo pase y las cosas fluyan, pero lo que recuerdo de ella, el amor que le tengo, lo mucho que la extraño y las ganas que tengo de verla no me lo permiten, ella en mi vida es una quimera, y no me puedo permitir abandonar a alguien así, a menos de que sepa que no tengo ninguna oportunidad. Nuestras últimas conversaciones al respecto de algo que se pudiera considerar "Nosotros", al menos para mí fueron bastante confusas, y eso me impide reaccionar de la manera correcta, entre el miedo, la indecisión, mi cobardía, su apatía, poca atención, y mi incesante imaginación forman un cóctel que no me permite dormir tranquilamente. No le he escrito para nada, a pesar de que cada día algo me la recuerda, lo cual es muy triste por las cosas con las que mi mente la ha relacionado. Ya no puedo escuchar "Que lloro - Sin Bandera" sin recordarla, o cualquier otra canción de amor o desamor. Es demasiado estresante, hasta el punto en que he dormido aproximadamente diez horas en una semana. Doy excelentes consejos a todo aquel que me pregunta sobre su vida, pero mis relaciones interpersonales son un fracaso. Últimamente siento que nada me sale bien, y no se a qué dedicar mi tiempo. De alguna forma en mi cabeza funciona que si no le escribo y no interactúo con ella es como si nuestro tiempo se detuviera, lo cual ojalá hubiera pasado, desearía poder volver en el tiempo o manipularlo de alguna forma, en medio de estos sucesos, el concepto de nosotros es como una especie de gato de Schrodinger, que existe y no existe hasta que me atreva a preguntarle.