»Still Love Me?« »JENLISA« »G!P«

°•Deja vù•°

Una semana.

Una jodida semanas desde que Lisa había tenido que estar llendo de un lugar a otro sin descanso alguno y con la cabeza hecha un gran lío.

Iba desde el casino, que no podía dejar desatendido, hasta el paradero de Lia para después dejarla con Seulgi y seguido de ello había tenido que estar pasándose por la corte.

Por alguna extraña razón Seulgi se había enterado de todo lo que había pasado y aprovechó la oportunidad para quitarle a Lisa la custodia de su hija del todo y además ponerle una pensión obligatoria de la mitad de sus ganancias, y todos sabemos que todo ese dinero, poco sería para Lia y lo demás sería ocupada para tratamientos inútiles de belleza o porquerías de las que Seulgi solía comprar cuando estaban casadas, únicamente por el afán de gastar el dinero.

Está de más decir que Seulgi estaba siendo vengativa, egoísta y muy cruel. Fuera de que no hayan quedado en el mejor acuerdo al divorciarse, lo peor que le pueden hacer a una madre es quitar de sus brazos a su propia hija.

Cuando comenzó a avanzar el caso, se le ordenó a Lisa que por lo menos mientras investigaba no podía estar con la niña. Ella no podía recogerla más en la escuela y nisiquiera la podía ver en la hora del almuerzo, y no tienen idea de cómo eso le dolía.

Ahora se encontraba sentada en su despacho en el casino con un vaso de Whisky escocés, un cigarrillo entre los labios y un terrible dolor de cabeza.

No había podido ver los últimos días a Jennie y eso la traía loca. Había preguntado en el colegio de Lia el por qué de su ausencia y le habían dicho que la castaña había pedido una licencia. Lisa había ido a su casa un par de veces y ella no estaba ahí, o en su defecto no le quería abrir.

Lisa no estaba bien, estaba dolida y por desgracia estaba ebria.

Pero la pregunta era ¿Por qué sufrir por una mujer? ¿Por qué estar enganchado a alguien que no tenía interés en estar con ella? ¿Por qué no podía ser la Lisa que un día fue?

Una semana despues de aquella noche se vió la diferencia.

Lisa volvió a ser la mujer que sus hermanas destestaban hace años. Una mujer arrogante, mujeriega y despreocupada y tenían miedo, pues si seguía así lo más probable es que terminara por echar a perder todo con Lia.

(ᵔᴥᵔ)(ᵔᴥᵔ)(ᵔᴥᵔ)(ᵔᴥᵔ)

Ya habían pasado dos semanas desde que había pedido su licencia en el colegio y ya era hora de regresar.

Se sentía mucho mejor y la hinchazón en su ojo y su cabeza ya habían bajado considerablemente. Había tomado los medicamentos necesarios y en la dos semanas que estuvo fuera de la ciudad ni hubo problemas con algún tipo de ataque de ansiedad o algo parecido. Se sentía más que preparada.

A parte de volver a Seúl para su trabajo, también le era algo urgente ver a Lisa. Por supuesto que seguía molesta con ella, pero estaba preocupada por lo que Dahyun le había dicho cuando recién la dieron de alta en el hospital. Lisa estaba peleando por la custodia de su hija y había sido en parte su culpa, así que necesitaba verla para al menos saber que estaba bien.

Ya estaba en su departamento y había pasado la noche ahí, pero como llegó bastante tarde, no pudo ver a Lisa ese mismo día.

Al día siguiente, se alistó en la mañana para salir al colegio y se extrañó un poco de no ver a Lia. Tal vez tenía un resfriado o algo parecido y por eso no había asistido.

Al terminar las clases para los pequeños, se dirigió hasta la universidad. Tenía miedo de encontrase a Mino y que le quisiera hacer daño, pero se sentía con la necesidad de dejar todo en buenos términos con él.

Al llegar, los alumnos al verla regresar la saludaron con respeto y algo emocionados, pues si creían que ella era estricta y a veces "mala onda", eliminaron esa idea de su cabeza al conocer al maestro sustituto que llegó en el lugar de Jennie. De más está decir que la habían extrañado.

Al llegar al salón de maestros para dejar sus cosas, había un par de personas, y entre ellos estaba Mino.

Jennie simplemente entró y en su pequeño locker dejó un par de cosas y sacó unos libros, pero automáticamente fueron quitados de sus manos.

-Déjame ayudarte- Dijo la voz de Mino por detrás -Sé que no quieres verme y tienes razón, pero déjame acompañarte a tu clase- Dijo mirándola a los ojos. Jennie únicamente asintió.

El camino fue silencioso e incómodo, hasta que Jennie finalmente habló.

-¿Que quieres Mino?- Dijo con voz suave.

-Jen... Sé que fuí un idiota y de verdad lo siento. Tu no mereces a alguien como yo y lo sé, los siento de verdad-

-Estás perdonado- Dijo Jennie parando en la puerta de su próxima clase. -Pero seguro eso no era lo único que me venías a decir-

-Me encanta lo bien que me conoces- Dijo Mino sonriendo. Aún se llegaban a ver algunos rasguños y moretones en su rostro, pero notoriamente había mejorado. Había decidido no levantar cargos contra Lisa por qué sabía que había tenido una buena razón para dejarlo de esa manera. Ciertamente estaba arrepentido.

El timbre sonó, haciendo saber que ambos tenían que ir a sus clases correspondientes.

-¿Salimos a tomar algo más tarde?- Dijo Mino algo apurado.

-Ehmm... Yo no estoy segura-

-Solo beberemos algo y hablaremos, no habrá más ¿Si?-

-Está bien- Dijo Jennie derrotada y no muy segura de su respuesta. -Pasa por mi a las ocho-

Mino asintió y finalmente se retiró.

El día pasó rápidamente y al terminar, Jennie apurada se dirigió a un lugar que creyó nunca volvería a pisar. El casino Manoban, para ser exactos el "Black Night".

Aún había un poco de luz del Sol y debía apresurarse para que no llegara tarde.

Al llegar, un hombre simplemente le pidió su identificación y la dejó pasar sin problema alguno.

Al abrir la puerta del lugar, miles de recuerdos inundaron su mente, algunos malos y otros muy malos, pero al adentrarse más y llegar hasta la puerta del despacho de Lisa, todo fue como un deja vù.

Encontró a Lisa empotrando su pene contra una mujer bella, pero esta vez pelirroja y con pechos y un culo grande.
Jennie se quedó pasmada y en realidad no sabía que hacer.

-¡Lárgate! ¿Que esperas?- Le dijo la mujer a Jennie

-¿Te nos unes Jennie?- Dijo Lisa con así arrogante expresión y una macabra sonrisa

-Eres una idiota- Dijo saliendo y azotando la puerta detrás de ella.

ʕ·ᴥ·ʔʕ·ᴥ·ʔʕ·ᴥ·ʔ

¿Que les pareció el nuevo cambio de la historia?

Ya volví chicos, gracias por la paciencia y lindas palabras que me dedicaron.

Trataré de comenzar a actualizar seguido como antes ;)

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