Me enamoré del Niño Rico | editando

Capítulo 14

KAI

"América"

Durante todo el vuelo desde Londres a Boston no pude evitar sentirme emocionado y feliz por todo lo que me estaba pasando, porque me habían aceptado en una buena universidad... una a la que nunca hubiera aplicado a no ser por el nuevo trabajo de papá.

Gracias a todo eso, yo me encontraba en este avión con Jane.

En cuanto ella agarró mi mano, sentí cómo el estómago me daba un vuelco... no es exactamente ella a quien yo hubiese traído a Estados Unidos conmigo, pero de todas maneras sabía que por parte era mi culpa.

No podía evitar sentirme fatal por todo lo que estaba sucediendo entre Sommer y yo, pero también sabía que no tendría que dejarme influenciar por eso en cuanto llegara a mi entrevista con las autoridades. Si bien estaba distraído gracias a Sommer y todo nuestro drama, tenía que tener una meta en la mente y enfocarme en ella.

—Al fin hemos llegado —anunció Jane cuando aterrizamos en el aeropuerto de Boston.

Estaríamos hospedándonos en un hotel en el centro de la ciudad durante una semana, mientras que dos días nos iríamos hacia Cambridge para conocer el campus y a enfrentarme a una "pequeña charla", como decía en el mail, con las autoridades de Harvard.

Tenía miedo, pero estaba tan emocionado con la idea de conocer el campus que eso era lo de menos por el momento.

Todavía no tenía claro si debería vivir allí o buscar un apartamento en las afueras de la universidad. Todo tenía sus pros y sus contras, como por ejemplo vivir con alguien extraño que podría robarte tus cosas y comenzar con los conflictos desde el primer día. Sin embargo, podía entablar buenas y nuevas amistades, ir a grupos de estudios, audiencias a tribunales, entre otras cosas.

—Espérame aquí, iré al baño y pediré el auto para irnos al hotel.

—Está bien —ella se acercó para darme un beso. Sin embargo, inconscientemente, corrí mi rostro para darle el lugar a mi mejilla.

Me sentía lo bastante mal como para hacerlo, pero si lo hacía sólo me sentiría peor. Agradecía profundamente todo lo que ella hacía y ha hecho por mí, pero sinceramente ha estado manejando mi agenda a su antojo... manejando mi vida.

Entendía la frustración que sentía Sommer cuando me expresó todo lo que sentía, Jane me ha estado organizando todo en base a su conveniencia para que tenga un evento tras el otro. Necesitaba un respiro, un respiro de verdad. Y al volver a Londres, pensaba tomarme uno.

Saqué mi celular y abrí la mensajería.

KAI: Sommer, ¿cómo estás? Quiero hablar contigo, por favor.

Esperanzado de que me devuelva una respuesta, me desilusioné solo. En cuestión de segundos, apareció el "leído" debajo de mi mensaje. Ella tenía razón en demasiados sentidos, pero nunca aceptaría que me tratase como un niño rico. Aunque, debía admitirlo, Jane hacía que cada acción que tomase se viera de esa forma.

Guardé el celular suspirando y tomé las maletas al ver que Jane se acercaba para irnos.

—¿Qué ocurre? —preguntó al ver mi cara.

—Nada, ¿ya nos vamos? —intentó descifrar mi rostro, pero yo intenté aún más esconder todo lo que sentía por dentro.

—Sí, el auto está afuera.

Tardamos al menos media hora en llegar al hotel. Éste quedaba justo en el centro de Boston por lo cual había un tráfico impresionante. De todos modos, disfruté mucho las vistas que la ciudad ofrecía.