8.

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Había comprado un boleto para irme del país luego de firmar el divorcio con Martina. Sería muy difícil para mí alejarme de ella, pero yo cometí un error y lo mejor para ella es que yo me aleje y la deje vivir feliz.

Prendí el celular que había apagado y pude ver que tenía más de cien llamadas de Martina y algunos mensajes de voz. También tenía mensajes en WhatsApp y audios. De seguro quería que volviera, pero tenía que dejarla hacer su vida.

Fui una estúpida, como siempre. Siempre arruino las cosas y no creo que mi relación con Zabdiel vuelva a ser la misma. No sé porqué me siento tan mal de que se haya ido si fue él el que arruinó nuestra relación, el que prefirió una aventura antes que a su esposa. Fue él el que nos hizo todo esto.

No sé porqué se le vino a la cabeza que yo estaba de novia con Nicholas cuando él es sólo mi mejor amigo.

Sólo falta una semana para firmar nuestro divorcio y nosotros estamos cada vez peor.

El timbre sonó y con pereza me levanté de la cama con la esperanza de que pudiese ser Zabdiel que se había arrepentido y quiso volver. Abrí la puerta y me encontré con la persona que menos quería ver: Carolina.

— Hola, Tini. — Dijo falsamente y entró a mi casa sin pedir permiso.

— Sabes que cuando entras a una casa ajena debes pedir permiso, ¿no?

— No necesito pedir permiso ya que esta casa no es tan ajena que digamos. Pasé las mejores noches aquí con tu esposo. — Mordió su labio inferior.

— ¡Vete de mi casa! — Grité furiosa.

— Mmmm no lo creo. — Su mano viajó hacia el bolsillo trasero de su pantalón y de ahí sacó un arma.

— ¿Qué haces Karol? — Hablé asustada.

— ¡SIEMPRE TUVISTE TODO LO QUE ERA MÍO! ¡SIEMPRE TE HA ENCANTADO SER EL CENTRO DE ATENCIÓN! ¡CUANDO ERA TU MEJOR AMIGA ME DEJABAS DE LADO Y SIEMPRE TE ENCANTABA HABLAR MAL DE MI A MIS ESPALDAS, Y ¿AHORA ME QUIERES QUITAR A MI ZABDIEL? NO. ESTÁS COMPLETAMENTE LOCA SI PIENSAS QUE TE VOY A DEJAR A ZABDIEL SÓLO PARA TI! — Gritó apuntándome con el arma.

— Nunca hablé mal de ti y nunca te dejaba de lado. Ya baja esa arma Karol, tú no quieres hacer esto.

— ¿Ahora quieres manipularme como lo hacías siempre? Ya no más Stoessel, ya no más.

— No te he manipulado nunca y tampoco quiero hacerlo Carolina. Suelta esa arma porque vas a hacer algo que no quieres hacer.

— Jajajaja quiero hacerlo hace tiempo, pero no sé si quiero matarte a ti o a Zabdiel. — Dijo mirándome.

— ¿Por qué matarías a Zabdiel? — Pregunté.

— ¡PORQUE EL TAMBIÉN ME QUITÓ LO QUE ERA MÍO! — Gritó.

— ¿Qué? Estás loca Karol. Él nunca te hizo nada ni mucho menos te quitó algo.

— No estoy loca. — Dijo acercándose a mí mientras me apuntaba con el arma. Cuando se acercó a mi oído me susurró. — Me quitó a ti.

Zabdiel.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora