capítulo: 10 parte 2

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Capítulo 10- 2
Prov. Kagome
Vamos camino a la hacienda de mi madre, estaba cansada este viaje ha sido muy cansado
-¿Te acomodo la almohada? Me pregunto Kohaku, yo asiento y el lo hace amablemente-Este fue un viaje muy largo
-Si pero ya vamos camino a la casa y mama ya se dio cuenta que todo está bien. Dije
-¿Por qué te fuiste? Me pregunto y lo miro
-Por miedo a algo que ahora estoy segura que Inuyasha nunca haría. Dije y una lagrima sale, el me toma la mano-Me deje envenenar de mama, ella me dijo que me podían quitar a mi hijo. Me sentía tan culpable-me fui sin despedirme y en ese exilio que yo misma me impuse me di cuenta de lo feliz que el me hace. Dije
-Lo bueno es que ahora estas con nosotros y se que en el corazón de todos ahí perdón. Me dijo y sonrió
-Por favor no vayas a decirle a mama que La señora Irasue estuvo estos dos meses conmigo. Le pedí
-No te preocupes yo sé que será para problemas. Me dijo-Pero que sería lo más grave que pasó entre mama y la señora para que exista tanto odio
-La señora Irasue era el eterno amor de mi padre. El me mira asombrado
-Un problema de pantalones. Dijo me reí -Si al parecer ella si amo a un hombre pero porque se fue, no entiendo por qué te dejo sola. Levante los hombros en símbolo de no saber, miro por la ventana y ya llegamos, al bajar todo se veía en silencio, ingresamos a la casa y unos mariachis empiezan a bajar las escaleras, no pude evitar sonreír y llenarme de melancolía
-ay, ay, ay, ay canta y no llores por que cantando se alegran cielito lindo los corazones, de la sierra morena cielito lindo vienen bajando un par de ojitos negros cielito lindo de contrabando. canta sango mientras baja con los mariachis, me sorprendí
--de la sierra morena cielito lindo vienen bajando un par de ojitos negros cielito lindo de contrabando, ay, ay, ay, ay canta y no llores por que cantando se alegran cielito lindo los corazones salió rin cantando del despacho con unas rosas me los entrega, susurro un gracias
-ay, ay, ay, ay canta y no llores por que cantando se alegran cielito lindo los corazones. cantamos las tres-ese lunar que tienes cielito lindo junto a la boca no se lo des a nadie cielito lindo que a mi me toca, ese lunar que tienes cielito linRin junto a la boca no se lo des a nadie cielito lindo que a mi me toca. las lágrimas comenzaron a salir y las dos me abrazaron
ay, ay, ay, ay canta y no llores por que cantando se alegran cielito lindo los corazones. ellas seguían cantando a pesar de las lágrimas
-ay, ay, ay, ay canta y no llores por que cantando se alegran cielito lindo los corazones. Volvimos a entonar las tres, sango agrego a Kohaku al abrazo, el solo sonreía, los cuatro aplaudimos a los mariachis, me abrazan muy fuerte
-Perdónenme. Dije ellas me abrazan
-No hay nada que perdonar. Me dijo Rin-Nosotros te dejamos ir por tanto tiempo. Me dijo
-No las volveré a dejar sola. Ella me abraza
-Y nosotras no te dejaremos ir sola. Me dijo-Te vez hermosa. Dijo Sango mientras tocaba mi vientre-Nuestro sobrino, muy pronto vamos a conocerlo. Dijo con una enorme sonrisa
-Tienes que subir a tu cuarto ahí tienes una gran sorpresa. Me sonrió Rin y las dos me llevaron escaleras arriba, paramos frene a una puerta-Este será tu cuarto y el del bebe, mama nos pidió que te lo arregláramos. Dijo con una enorme sonrisa, yo abrí la puerta, entre y era una réplica exacta de mi habitación, no pude evitar sonreír tenía al lado de la cama una cunita, esta tenia adentro regalos, en la cama tan bien habían y un enorme peluche, lo mire esta hermoso
-Todo esta hermoso. Dije y ellas sonríen, Sango me guiña el ojo y cierra la puerta, me quede parada mirando extrañada
-Más hermosa estas tú. Esa voz volteo a ver y del armario salía Inuyasha
-Inuyasha. Dije su nombre y mi corazón late con mucha fuerza, manos sudorosas y muchas ganas de correr a sus brazos eso me provoca el, las lágrimas comienzan a caer-¿Qué haces aquí?
-Vine a verte Dijo y se acercó a mí, me tomo la mano-Kagome yo a ti te amo, tú volviste a despertar en mi algo que se murió hace cuatro años. Dijo y mis lágrimas salen
-Mentira. Dije y el me mira-Tú la vez ella en mí. Dije con dolor e ira lo extraño pero la realidad es otra
-No, si es cierto a ella nadie la poda remplazar pero le dije adiós a mi pasado y a mi dolor, porque me di cuenta que a tu lado soy feliz. Me tomo de la mano-Te amo. Volvió a decir
-No lo digas. Dije-No lo digas. Me toma de la barbilla
-Lo digo porque es verdad, te amo y te lo demostrare. Se acercó a mí y me beso, esto lo anhelaba cada noche, esto se había un bello recuerdo que ahora se volvió realidad  –permíteme demuéstratelo, acompáñame. Me pidió
-¿A dónde? Pregunte
-Muy pronto lo sabrás. Me dijo
-¿TU QUE HACES AQUÍ? Entro Koga de golpe a mi cuarto, yo volteo a verlo, el que hace aqui
-La pregunta es tu qué haces aquí. Dijo Kohaku al entrar a la habitación-Inuyasha que sorpresa. Sonrió-No creo que tú tengas permitido subir a la segunda planta. Le dijo a Koga muy serio
-Kohaku yo tengo permiso de estar donde quiera y me dieron la orden de que no entrara ningún Taisho a este lugar, sobre todo a este hombre. Dijo, escuchamos las habladurías de Sango y Rin, ellas detenían a mama mientras se acercaba aquí
-Hija. Dijo y entro, Sango y Rin me miraron-¿Usted que hace aquí? Le pregunto a Inuyasha
-Vine a ver a la madre de mi hijo. Dijo el y me abraza
-Quitas las manos del cuerpo de mi hija. Dijo está enojada-Por tu culpa ella se alejó de nosotros un largo tiempo, la has lastimado y yo no voy a permitir que te vuelvas acercar a ella, vete de mi casa Inuyasha Taisho o ordeno que te saquen a las patadas. Dijo la seriedad en su rostro
-Mama te recuerdo que es el padre mi sobrino y tiene el derecho de verlo y e saber de su estado de salud. Defendió Sango
-Cuando el niño nazca puede llamar pero no lo permito que ponga un pie en mi casa. Le respondió esta-Y ustedes están metidas en problemas, las miro muy serio, ya no puedo soportar más problemas
-Inuyasha. Voltee a verlo, se que a el puedo convencerlo-Por favor vete. Le pedí y el me mira-Yo no puedo estar bajo estrés o coger rabia, por el bien de nuestro hijo, vete. Le pedi y me toma de la mano
-¿Me enseñan la salida? Me pidió, no me atrevo ni a voltearme, le sonrió y le hago geste de que caminemos, pasamos por el lado de Mama, bajamos las escaleras-Sesshomaru me espera afuera. Me dijo y yo sonrió, los dos salimos de la casa y el estaba esperándolo en una moto, recostado en ella como todo un playboy
-Cuñada. Dijo y se me  acerque, me abraza muy fuerte y acaricia mi vientre-Mi sobrinito. Dijo y no pude evitar sonreír-Pensé que te ibas a demorar más. Mencionó a Inuyasha y le entrega el casco
-Midoriko apareció. Dijo este furioso
-Con suegras así para que brujas. Dijo este quejándose
-Prometo ir a visitarte. Le dije para tranquilizarlo-Estoy dispuesta a escucharte, volví porque tú eres mi felicidad. Confesé
-¿Cuándo? Me pregunto
-Yo te llamo y te digo, cuando pueda volarme lo hare. Dije y este se sube en la moto, nada contento-Inuyasha. El me mira-Quiero que me acompañes a la última ecografía del niño, pendiente de las llamadas. Dije,
-Kagome recuerda que el rancho sigue siendo tuyo. Menciono Sesshomaru y los veo partir, me doy media vuelta y ahí estaba mi madre
-Tenemos que hablar al despacho. Me ordeno, yo suspiro y voy tras ella, admirando sus zapatos, ingresamos al despacho y cierro la puerta de vidrio que esta tenia
-Kagome te ordeno que te alejes de Inuyasha. Dijo muy imponente
- yo te recuerdo que es el padre de mi hijo. Le dije-ni tu ni nadie puedes prohibirle ver a su hijo
-Si pero el niño no ha nacido y tu no puedes estar bajo estrés y ese hombre se ve que no tiene nada de consideración meterse a la casa como un vil ladrón, ese hombre y cualquiera de la familia Taisho tiene prohibido pisar mis tierras, me ordeno muy seria
-No te preocupes que ellos no pisaran tus tierras, yo iré hacia a ellos. Me levante de la silla
-Kagome tu no puedes perdonarlo. Me advirtió-Vas a salir lastimada
-Pero mama dime que puedo hacer si yo lo amo y mi hijo me unen a el. Dije Salí del despacho, cerrando la puerta tras de mí, inhala y exhala Kagome, una pequeña molestia en mi vientre
-¿Todo bien? Pregunto Rin
-Si, vamos al cuarto estoy cansada del viaje y tengo que desempacar. Dije y ella sonríe
-Nada de eso Sango y yo desempacaremos tus maletas. Dije y ella sonríe
-Claro que si, mientras la mama favorita se come esta rica ensalada de fruta. Dijo sango entregándome la una copa llena de frutas
-Esta bien. Dije
-¿Ya abriste los regalos? Preguntó Rin -Bueno voy a decirle a los empleados que suban las maletas. Dijo Sango, Rin me ayudo a subir las escaleras, nos acostamos en la cama, Rin comenzó a abrir los regalos me decía de quienes eran pero mis parpados pesaban. Abrí mis ojos y me senté por mi pequeña molestia era algo débil la verdad, Sango y Rin están atravesadas en la cama, me levanto necesitaba agua, veo las maletas bacía esparcidas por el cuarto, vaya ayuda, salí de la habitación, baje las escaleras y me dirigí a la cocina, me serví el vaso y me senté en la isla
-El embarazo te sienta bien. Volteo a ver a Koga y este se acerca, toma un vaso y se sirve agua, yo solo termino de tomar-Ese hijo fuera mío y no de el.  Menciono sentándose a mi lado
-Gracias a Dios es de Inuyasha. Dije y me levante de la isla y el me agarra del brazo
-Dime que tiene el que yo no. Dijo y lo miro
-Suéltame. Le pedí
-Solo te pido una respuesta. Se levantó y me agarro de ambos brazos-Que tiene ese BASTARDO QUE YO NO. Dijo
-NO LE DIGAS A SI, EL NO ES NINGUN BASTARDO. Le grite-ES MUCHO MAS HOMBRE QUE TU. Le grite
-ES UN BASTARDO IGUAL A TU HIJO. Me solté y le pegue, me vuelve agarrar-Te duele que te digan la verdad, tu hijo es un bastardo, te enamoraste y entregaste a un poco hombre. Yo suelto la risa
-Inuyasha es mas hombre que tu, MUCHO MAS HOMBRE QUE TU, EL SI SABE TRATAR A UNA MUJER.Dije
-Mírame KAGOME MIRAME, ALEJATE DE SE MALDITO. Me comenzó a sacudir-MIRAME KAGOME. Me volvió a sacudir y lo mire-MIRAME POR QUE YO SI SOY UN HOMBRE
-ERES UN DESGRACIADO, ERES UN DEMONIO, ERES POCA COSA. Le grite y me sacudió
-BUENO ENTONCES DIME QUE SE SIENTE A VER SIDO MUJER DE UN POCO HOMBRE DE UN DEMONIO. Decía mientras me sacudía-POR QUE TE REPITO FUISTE MIA POR MUCHO TIEMPO, TODAS LAS NOCHES YO TE HACIA SENTIR MUJER
-SUELTAME, AYUDENME. Gritaba nadie me socorría
-LO RECUERDAS VERDAD, QUE FUSITE MIA Y LO VOLVERAS A HACER LO JURO.
-ESE RECUERDO SOLO ME DA ASCO. Contra ataque, el me sornie
-Vas a hacer mía y yo criare a ese niño. Me lanzo al suelo

La Melodía del AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora