coraline 2: el misterio de la otra madre

Capitulo 26

Liam dio un paso hacia atrás, alejándose lo más rápido posible de Coraline, la joven se levantaba con lentitud como si su cuerpo aun no tuviera un control total, Liam noto la mirada confundida de Coraline noto lo grande de sus ojos, ojos llenos de miedo, confusión y rabia, los labios de la joven eran una fina línea y la forma en la que el cuerpo de la joven temblaba solo le decía que estaba llena de ira...o talvez...miedo. Coraline llevo sus manos hacia sus ojos, sintiendo el dolor palpitante de la herida que la llave le había provocado, eso solo provocó que la sangre volviera a fluir, pero la a la joven no parecía importarle

-padre, saca a Mel y a wybie de aquí...llévatelos lejos- la voz de Liam era imponente y al mismo tiempo desesperada

El cuerpo de Charlie reacciono rápidamente tomando en brazos a Mel y al wybie y corriendo rápidamente hacia afuera haciendo que Coraline no tuviera el tiempo de atacarlos, la Beldam se mantuvo en silencio, sus piernas no reaccionaron, aun sorprendida por la velocidad del hombre, lo que la atrajo de nuevo a la realidad fue el sonido de la puerta que se abría con rapidez y al mismo tiempo era cerrada. La Beldam miro a Coraline la cual realmente no parecía querer ir tras ellos, su vista se centraba solamente en Liam, su instinto de madre gritaba que ayudara a Liam...a su hijo.

- ¡vete! - grito Liam sacando a la Beldam de su ensoñación – ayúdalos a escapar...yo me encargare de Coraline

-ella te matara- contestó inmediatamente la Beldam, realmente no le importaba que algo malo le pasara a Mel o a wybie- no te dejare solo

-se defenderme- contesto Liam, la voz del joven denotaba molestia-ellos necesitan más tu ayuda, mucho más que yo...solo yo puedo devolverle la conciencia a Coraline

-puedo ayudarte-la Beldam sonaba insistente, no le importaban las palabras de Liam

Liam miro a la Beldam por el rabillo del ojo, una mirada que hizo que a la mujer se le erizaba la piel, su propio hijo le causaba gran temor, nunca en su vida se había sentido tan asustada por una sola mirada, el ceño fruncido del joven le hacía replantearse si debía huir...todo su cuerpo le gritaba que hullera lejos de él...que su hijo era peligroso

-se lo que has hecho-murmuro Liam con una voz espectral- se de todo el daño que le causaste a Coraline y a esos niños que devoraste...no eres de fiar.

El corazón de la Beldam se estrujo, un dolor casi insoportable que se había instalado en su pecho y por un momento sintió que había dejado de respirar, realmente quería darle una explicación, realmente deseaba hacerlo...pero... ¿Qué le diría?, no había nada que la justificara, lo que había hecho había sido inhumano, no había perdón para todo lo que había hecho durante esos años, pero a fin de cuentas ella no era la verdadera culpable, ella hubiese sido buena madre y una buena esposa e incluso una buena amiga de no ser por Karina...si ella no la hubiese convertido en monstruo, su vida hubiese sido pacífica.

- ¡yo la ayude! - grito la Beldam, mientras sus manos señalaban a Coraline, intentando dar una explicación

-lo hiciste por interés- contesto Liam con rapidez evitando que la Beldam diera más escusas-lo hiciste porque sabias que tu poder no sería nada a comparación del de Karina...querías que ella forjara el arma

-Karina me convirtió en este monstruo- grito la Beldam con insistencia, quería que su hijo le creyera, deseaba le creyera-si tan solo supieras...si supieras quien so en realidad

-se quién eres-interrumpió Liam, su voz sonaba como veneno, un veneno letal y amargo-lo sé... madre

La Beldam lo miro con asombro, los botones en sus ojos comenzaron a sangrar, Liam sabia la verdad siempre la supo, pero, ¿Por qué la odiaba? ... ¿porque la miraba con tanta frialdad?, la Beldam no podía evitar llorar, el sentimiento de dolor oprimía su corazón... ¿Qué había hecho para merecer todo lo que le había ocurrido?