❁꙰ ❭Born To Shine ✧ J.Jk x P.Jmˎˊ-

Sobre el Cielo

Estaba al borde de un desmayo. A punto de un colapso.

Se había escapado de casa —como las últimas cuatro semanas— para ir a casa de JiMin a hacer tareas. No es que hubiesen proyectos en pareja, era simplemente que el de cabellos rosas era sumamente bueno en química y filosofía, por lo que a JungKook le parecía una mejor opción que le explicase a qué le pasara la “copia.”

JiMin había aceptado con entusiasmo, NamJoon en cambio solo le había advertido con una mirada mientras abandonaban la sala, dejándolos solos. Solos.

Aquellos deseos de días atrás, JungKook los estaba viendo cumplidos en ese instante. JiMin había tocado sus manos por “accidente” al menos tres veces, luego había negado y reído suavemente. JungKook sentía que parecía un chile maduro, por ardiente y rojo.

Como si eso fuera poco, cada que le explica algo le mira fijamente a los ojos, alguien debería explicarle que no puede prestar atención adecuadamente si cada vez que lo mira se pierde en sus bonitos ojos.

Sabe que lo estaba provocando, JungKook no es un tonto, además aquella sonrisa coqueta lo delata siempre. Desea darle una probada de su propia medicina, sin embargo presiente que podría darle un infarto al intentar provocarlo.

—Kookie~

Odia cuando usa su voz suave, porque seguro que ha notado que así puede manipularle, porque no importa lo que intente, JungKook no puede ignorarlo, su mirada se dirige directamente hasta donde el dueño de aquella bella voz está.

—Tomemos un descanso~

JungKook asiente antes de pensarlo un poco, ¿Cómo podría negarle algo si le sonríe de aquella forma tan bonita?

Se pregunta si JiMin sería capaz de dominar al mundo solo con su sonrisa, o si necesitaría también de sus pucheros para mantener a los rebeldes a raya. Quizá también sería necesario usar su voz de berrinches mientras se cruza de brazos.

No sabe si JiMin sería capaz de ello, pero sabe que lo tiene a sus pies, enamorado de una manera tan mal que, con solo algunos meses, JiMin ha transformado todo su mundo para bien, le ha retirado la venda de los ojos y le ha mostrado que vivir a su manera, con sus gustos y diferencias está bien.

—JiM...

JungKook traga sus palabras al instante, pues los labios gruesos y suaves de JiMin no dejan que hable. Que ese chico de cabello rosa y aura brillante le robe su primer beso, es lo más maravilloso que alguna vez ha podido pasarle.

¿Que ser gay es malo? A la mierda con ello, besar esos labios rosados es igual a estar en el cielo flotando, y si eso es lo más cercano que podrá estar de ello, JungKook va a disfrutarlo por completo.