«𝙡𝙤𝙤𝙠𝙞𝙣𝙜 𝙛𝙤𝙧 𝙙𝙖𝙙» → chanbaek #1

«16»

Baekhyun se sentía aliviado por haber encontrado su llave y por fin estaba de vuelta en su departamento. En el bolso de su hijo comenzó a guardar algunas ropas, biberón y demás cosas que Changkyun necesitaría mientras estuvieran en la casa de Luhan. Una vez que terminó de guardar todo, abrió la puerta del departamento para salir, encontrándose con Jongdae del otro lado.

—Hola~

El castaño lo miró confundido.

—¿Qué haces aquí?

—Auch... ¿Así soné esta mañana?

—¿Qué es lo que necesitas?

—¿Me dejarás pasar?

—No, tengo prisa y debo irme —dijo, cerrando rápidamente la puerta y queriendo avanzar.

Pero el pelinegro lo detuvo.

—Espera, espera... escucha, quiero hacer un trato contigo. Sé que tener un hijo con una celebridad es el sueño de muchas personas, pero no puedes andar divulgando información falsa por ahí.

—No sé de qué diablos hablas, y en serio debo irme.

—¿Cuánto quieres?

—¿Eh?

—¿Cuánto quieres para no ir hacia la prensa? ¿Huh? Dime la cantidad, tengo una bolsa de dinero en el auto.

Baekhyun se sintió ofendido y completamente hastiado.

—¿Qué demonios...? Yo no quiero su sucio dinero, tampoco quiero ir a la prensa a hablar sobre esto. No me interesa, no necesito nada de Park Chanyeol —escupió con molestia.

—¿Entonces qué sentido tiene hacer todo esto? Hacer un escándalo, mintiendo y usando a tu hijo en una farsa... no cualquiera se atrevería a algo así, eso me hace pensar que algo quieres y solo te estoy preguntando qué.

—Solo necesitaba que él lo supiera. Nada más que solo eso.

—Supongamos que todo esto de que tu hijo es también hijo de Chanyeol y que es real... ¿Por qué sólo querrías que él supiera? ¿Sin intereses económicos, legales...? Agh —bufó —Eso no tiene sentido ni lógica para mí.

—Lamento que tu vida gire entorno al dinero, pero afortunadamente, no todos somos así —le dijo, caminando por su lado, yéndose.

Jongdae se volteó mirándolo.

—Puedes ir a la cárcel, Baekhyun —amenazó —lo que estás haciendo es un delito, por calumnias e injurias va mucha gente presa con multas millonarias.

El castaño se detuvo, apretando su puño al costado de su cuerpo. Entonces se volteó para mirar al otro que estaba a unos metros.

—Yo no estoy mintiendo. Ojalá recuerdes la noche de hace dos años en el bar de la avenida central —dijo, mirándolo —Yo recuerdo la molestia en tu rostro cuando fuiste a buscar a Chanyeol a ese motel donde estaba conmigo... también recuerdo que él se rió y te dijo que no había usado condón.

El rostro Jongdae fue decayendo de a poco, su sonrisa transformándose en una línea recta.

—¿Qué...?

—¿Qué es lo que hace un mánager además de cuidar el culo de sus artistas? —prosiguió Baekhyun —¿Ustedes no son los encargados de que las celebridades sean reconocidos en todas partes...? —inquirió, entonces sonrió con burla —Creo que tu trabajo no está sirviendo, porque jamás supe quien puta mierda era Park Chanyeol hasta hace unas semanas.

—¿Entonces por eso te estás aprovechando ahora? ¿Porque descubriste que él es famoso y tiene dinero?

—Eso no me importa —aseguró —Si te estás preguntando porqué no hice esto hace dos años... la verdad es que, ni siquiera sabía su nombre. Aguanté casi tres malditos años solo con mi hijo, buscándolo como un imbécil para decirle la verdad, pero jamás lo conseguí. Y ahora mismo, no me importa quién es él ni lo que tiene.

El pelinegro notó que el chico parecía completamente seguro y sincero con lo que decía, pero él no podía bajar la guardia y simplemente creer.

—¿Sabes qué? Conozco mucha gente como tú, Baekhyun... sé como juegan, sé como lo hacen. No vas a conmoverme.

—No estoy buscando eso. Solo quiero que me dejes en paz. Y tampoco te preocupes acerca de la prensa y todas esas cosas... no me gustan los escándalos y no soy ese tipo de persona —finalizó, volviendo a caminar para bajar las escaleras e irse.

[...]

—¿Y...?

Jongdae se desplomó en el sofá y tomó un poco de agua.

—Esto va a matarme.

—Cuéntame qué sucedió, hyung.

—Confirmado. Es el chico.

Chanyeol tiró de su cabello hacia atrás, negando completamente.

—No, no... no puede ser, yo... no creo que sea él.

—Me recordó la maldita noche que estuvimos en el bar, hasta imitó mis muecas cuando entré a la habitación del motel y los encontré juntos, Chanyeol. Es él —resopló —Me dijo algo interesante también.

—¿Qué?

—Que no te conocía. No tenía idea de quién eras y ni siquiera sabía tu nombre.

—Bueno... esa noche ni siquiera recuerdo su cara en realidad —se quejó, frustrado —Solo sé que bebimos demasiado y también me dio un nombre... Hyun.

—¿Hyun? ¿Como Baek–Hyun...?

—Ugh, cállate. Hay mucha gente llamada de esa manera.

—Sí, pero justamente es este sujeto quien sabe qué malditas muecas hice ese día. Incluso recuerda lo que dijiste. No usaste condón, imbécil —regañó —También lo recuerdo y quiero matarte ahora mismo.

Chanyeol abrió los ojos avergonzado.

—¿Estás bromeando? ¿Él dijo eso?

—Sí, idiota —contestó Jongdae, masajeando su sien —De verdad me hizo dudar... pude sentir su sinceridad mientras hablaba.

—Hyung, yo... no lo sé.

—Mira, quizás esto no te va a gustar... pero tengo una idea.

—No una maldita prueba de ADN —rogó, negando.

—Una prueba de ADN —dijo, asintiendo levemente —Saldremos de dudas y podremos proceder legalmente si es todo una farsa.

—Eso es peor aún, hyung.

—No lo es, simplemente es una forma de adelantarnos y quitarnos esto de encima antes de que comiencen los rumores. Siempre hay que ir un paso adelante.

—No lo sé...

—No es una pregunta, Chanyeol. Es lo que haremos —dijo firmemente —De todos modos no hay que preocuparse, en cuanto salga negativo, ese chico deberá pedir disculpas ante un juez-—sonrió —pero supongo que no querrá verme de nuevo, así que es tu turno.

—¿Qué?

—Debes hablar con él. Cuando esté de acuerdo, iremos a hacer esa prueba y todos contentos, ¿bien? Mientras más rápido mejor, así que... creo que deberías buscarlo ahora. Si está de acuerdo, mañana por la mañana podríamos hacer los análisis y salir de dudas.

Chanyeol lanzó un suspiro no muy contento y con desgana, tomó su abrigo.

—¿Me acompañarás?

—No. Debo hacer algunas llamadas y asegurarme que las aguas sigan apaciguadas... te espero aquí. Por cierto, al parecer no iba a estar en su departamento.

—¿Eh?

—Cuando fui a hablar con él, iba saliendo de su departamento con un bolso y solo. Su hijo no estaba con él, así que... podrías buscarlo nuevamente ahí, pero dudo que se encuentre.

El rubio asintió y salió del edificio. Subió a su auto y cerró de un portazo. La situación lo estaba volviendo loco, pero el solo pensar en miles de posibilidades le hacían doler la cabeza. Encendió el vehículo y comenzó a andar.

Debía acabar con todo esto de una vez.