School Secrets

Capítulo 2: Pervertido.

Intente mirarlo amenazadoramente, pero al ver como su sonrisa se ensanchaba más supe que era inútil.

-Basta...-. Murmuré-. ¡¿Que quieres de mí?!-.

-De ti nada, a ti-. Confesó con cinismo en su tono de voz.

Pego su cuerpo más al mío y sujeto mi cintura con fuerza uniendola a la suya.

-Para... Ahh por favor-. Supliqué.

El solo sonreía divertido de... ¿Mi sufrimiento?

Observe temeroso como se desabrochaba el cinturón y a continuación el pantalón. Deslizó aquella tira de cuero por mis brazos y apretó con fuerza dejándome atado.

-¡Ah!-. Me queje por el dolor que me había causado, posteriormente me sujeto con fuerza de los hombros y me forzó a hincarme, me sujeto del cabello y me acerco a su entre pierna.

Su sonrisa no se iba a borrar nunca al parecer...

Me sujeto delicadamente de la barbilla y paso su pulgar por mí labio inferior, lo miré "asustado"

En realidad quería tragarmela toda...

Pero después de todo, no estaba dispuesto a perder la pizca de decencia, dignidad u orgullo que me quedaba, me aleje un poco, me gustaba desesperarlo. Al notar mi leve movimiento hacia atrás, uso su mano para tomarme bruscamente de las mejillas y con la otra libero su aprisionada erección.

¡No mames! ¡Tenía una puta erección enorme!

En realidad, no tenia ni idea de cómo me las he arreglado para que "eso" entre en mi.

Al ver como me acercaba a su miembro, cerré mis ojos y espere, a los pocos segundos sentí como lo introducía completamente, lo sentía en la garganta y me estaba asfixiando. Comencé a alejarme  poco a poco, usaba mi lengua para lamer toda si extensión y presionar la punta con mis labios, el estaba demasiado excitado, se notaba por el palpitar de su miembro en mis labios, sus expresiones y por los roncos gemidos que soltaba. El no dejaba de marcar el ritmo de una manera brusca.

¡Puta madre! ¿Que no ve que me ahogo?

Sin avisar, se corrió de una manera abundante en mi boca, tosi varias veces para escupir todo, apenas podía respirar. A los pocos segundos sentí como su miembro se endurecía de nuevo, al mismo tiempo que sonaba la campana por toda la escuela, el me miró tipo "De la que te salvaste"

Se acomodó la ropa y el cabello, estaba por irse, de no ser por qué su pantalón era algo grande para su cadera, regreso y me libero del cinturón, solo observe como se iba y se colocaba el ya antes mencionado cinturón.

Me quedé temblando en el piso.

Sinceramente ya no me importaba demasiado, podría hacerlo con el todo el día, pero el inconveniente era que si alguien llegaba a descubrirnos iba a ser un gran problema, por los 9 años de diferencia de edad, y por el hecho de quién y que era para mi, nada más y nada menos que mi profesor de anatomía.

Me encontraba caminando de vuelta a casa, Niko estaba a mi lado hablándome de no se qué cosa, no le prestaba nada de atención, tenia cosas más importantes en las cuales pensar, un ejemplo, era el encuentro que había tenido hace poco.

-¿No crees Joaco? ¿Joaquín? ¡¿Joaquín me estás escuchando?!-.

-¿Eh? ¡Ah! sí... Si claro-.

-¿Oye estás bien?-.

-Si... ¿Por que lo preguntas?-.

-Estas raro wey-.

-Nah wey no es nada, solo estoy algo cansado-.

-Mmm bueno-.

Seguimos caminando sin darle más vueltas al asunto, llegó el momento que teníamos que separarnos para que cada quien se fuera a su casa, cuando estuve en mi puerta me percaté de que no había nadie en casa, entre y arrojé mi mochila al sofá, subí rápidamente a mi habitación y cerré con llave. Todo lo ocurrido pasaba como una película en mi cabeza una y otra vez, sonreí.

No bromeaba cuando decía que si alguien se enteraba que tenía relaciones con uno  de mis profesores, sería malo, muy malo, y estoy seguro de que él lo sabía de sobra, pero continuaba haciéndolo, continuaba buscándome y provocandome, yo nunca lo busqué y no planeo hacerlo, cómo había mencionado antes, no iba a perder más de mi dignidad (O al menos la poca que me queda) pidiendo más como una puta, estaba seguro que eso era, una puta, pero no actuaría como tal.

Además, si alguien nos descubriese, en el peor de los casos, considerarían que fui violado múltiples de veces o algo así, sin duda no soy eso, para que te tachen de violado, se supone que alguien te obligo a tener sexo con él y que tú no querías.

Y... ¿Quien dijo que yo no quería?

Se que soy un pervertido, pero lo importante es, que no aparento serlo, solté una leve carcajada y mordí mi labio.