Lornar

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   El guerreo caminaba con cuidado entre los callejones del pequeño pueblo con mucho cuidado, por que la que fue su prometida hasta hace unas horas atrás, estaba de seguro buscándolo por el asesinato de su hermano.

-Estúpida mujer- dijo en voz alta mientras miraba por todas partes ya que de seguro todos sus ex-compañeros lo buscaban también.

-ahora todo se ha complicado, y como si fuera poco, ese viejo mañoso me convenció para entregarle el cofre-, mientras seguía hablando solo y se escondía de callejón en callejón, Lornar muy a pesar de su cautela y su mirar a todos lados, no noto que lo seguían muy de cerca una pequeña figura semejante a un niño descalzo.

   Cuando el guerrero llegó a una de las calles principales, se detuvo para asegurarse que nadie conocido estuviera en ella, y así poder ir al bar de borrachos donde se suponía debería estar el viejo hablando con un tal Alphan, el cual debería poder abrir el cofre.

La Daga Negra

Los seis hombres de capas con capucha negra caminaban rumbo al Este hacia una torre de magia que había en Sirgel.

-Están seguro de confiar en ese tal Lornar?- pregunta uno de los seis encapuchado.

-Realmente no confió en nadie-, responde Adamd, después agrega, - además él y su grupo me la deben por lo que paso en la ciudad de Mystal-.

-Entonses por que lo dejaste irse sólo?- pregunta otro de los encapuchados a Adamd.

   Después de un rato de silenció, Adamd con una sonrisa responde - Quien dijo que estaba solo?-.

   Los seis llegan rápidamente a su destinó, era una torre hecha en piedra la cuál media no mas de siete metros de altura, ubicada en medio de lo que pareciera una plaza llena árboles y una cómoda grama.

-Llegamos, y ahora que?-.

   Adamd mira para todos lados, luego señala a un árbol en donde estaba sentado debajo de este, un pequeño mediano que fumaba una pipa, -Allí, allí esta nuestro contacto-.

- Es un mediano?-, pregunta uno de los compañeros de Adamd con cierto tono de decepción.

  Adamd ignora el comentario mientras camina en la dirección donde se encontraba el mediano, al llegar y pararse en frente del pequeño ser que seguía fumando su pipa, este lo mira muy calmado, luego de un momento pregunta.

-Dime por que debería darte a ti el contenido de ese cofre?-.

-Por que de no hacerlo, tú y tu pequeño grupo seria exterminado, quedo claro?-, responde Adamd sin temor y en tono de amenazas.

  
   El mediano sonrió como si esas palabras fueran una inocente broma, después le indico con un gesto de la cara que se sentara a su lado, a lo cual Adamd asintió.

   Después de un momento de silenció mientras miraban el despejado cielo, el mediano dice con una sonrisa dibujada en sus labios, -hay mas gente interesada, y me ofrecen algo mejor que tu banda de roba gallinas-.

4 Grandes Reinos SirgelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora