Marinette se vistió esa noche con un vestido simple pero bonito que como de costumbre, era una de sus creaciones personales y espero a Félix en el primer piso de su casa, estaba nerviosa, ni ella misma entendía por qué, aunque sospechaba que las atenciones de Félix habían comenzado a afectarle... desde hace tiempo.
Félix llego poco después, Marinette aún no se sentía lista para verle y cuando fue a saludarle se sintió un poco torpe.
- Hola Féli...x – tartamudeo y él le dio una de esas sonrisas confiadas que hacían que Marinette se pusiera aún más nerviosa.
- Buenas noches Marinette, bonito vestido te vez preciosa – lo dijo tan relajadamente que Marinette volvió a sentir que sus mejillas se encendían como focos.
- ¡Gracias! Tu también... te ves bien porque evidentemente no llevas vesti... me gus.... Te ves bien hoy – tartamudeo Marinette y Félix estuvo a punto de reírse.
- ¿Vamos?
- Si...
La llevo a un restaurante elegante y acogedor no muy lejos de su casa.
- Sé que esta algo cerca... como me pareció que dijiste que a tus padres no les gustaba que fueras muy lejos de noche – comento Félix, Marinette estaba tan perdida en sus pensamientos que tardo un poco en reaccionar.
- ¿Cómo?... a sí... en realidad no les importa mientras sepan donde este.
- Ah... Debí haber entendido mal, cambiar con Adrien no era necesario... no se lo cuentes ¿Si? – suspiro Félix, en realidad nunca había malentendido las palabras, pero eran una excelente justificación para cambiar de lugares y empujar a su hermano en otra dirección que no fuera hacia donde estaba la chica que le gustaba.
- ¿Contarle que a Adrien? – pregunto Marinette algo perdida, entonces se acercó el camarero a tomarles la orden.
- El también tenía planes hoy, con Kamagami como parece que mal interprete tus palabras, le pedí que cambiáramos para no tener que llevarte lejos de tu casa – contesto Félix con una sonrisa tímida que hizo que el corazón de Marinette se acelerara, mientras tanto él chico examinaba su reacción, buscando cualquier señal de celos de desánimo, se sorprendió gratamente al no encontrar ninguna, su plan estaba saliendo mejor de lo que habían planeado.
- No le diré nada ¿A dónde fue él y Kagami entonces? – pregunto Marinette tan sorprendida como Félix de su escasa reacción a esas palabras.
- A la torre Eiffel... otro día me gustaría llevarte allí ¿Qué dices?
- Seria genial.
- Bien.
El resto de la cena fue acompañada por una cómoda conversación, varías sonrisas discretas y coqueteos disimulados, cuando llego el postre Félix se encontró pensando en sí debería declararse esa noche o sería demasiado pronto, desde hace días estaba siendo mucho más abierto de lo que usualmente era, pero le estaba costando bastante esfuerzo no encerrarse en sí mismo... declararse seria mostrar más de él de lo que había hecho nunca, y era aterrador.
Aun así por algún giro caótico de los acontecimientos Félix se encontró confesándose antes de que pudiera detenerse a pensar mejor lo que estaba haciendo.
- Marinette me gustas – dijo rompiendo el silencio que hace unos segundo se había instaurado sobre ellos mientras terminaban el postre, en cuanto lo dijo se sintió inseguro y volvió a sentirse tímido, quiso recuperar las palabras que había dicho aún más cuando Marinette parecía haberse congelado en el aire -. Discúlpame... olvida lo que dije.
- ¿Y si no quisiera olvidarlo? – pregunto ella sorprendiéndolos a ambos, ese coqueteo discreto que tenían quizá la había envalentado más de lo que pensaba.
- ¿Hablas en serio?
- Si.
Una sonrisa se extendió en los labios de Félix y cuando salieron del restaurante, iban tomados de la mano, poco le importaba a Félix ahora que tal lo estuviera pasando su hermano, tampoco le importaba que no hubiera tenido que hacer uso de las trampas que había puesto para hacer que Marinette fuese perdiendo poco a poco el interés en Adrien.
Ahora nada importaba y antes de que Marinette bajase del auto, se sintió más envalentado que de costumbre y le planto un tierno beso en los labios, que por ser la primera vez que lo intentaba, duro poco debido a que no sabía si lo había hecho bien.
- ¿Serias mi novia? – le pregunto mientras la ayudaba a salir del auto.
- Si – contesto Marinette en un susurro tímido mientras sus mejillas se encendían.
Cuando Adrien y Kagami subieron al auto estaban hablando sobre esgrima y los próximos entrenamientos, ellos dos solo seguían siendo amigos pero la velada los estaba haciendo llevarse mejor, Félix era casi inconsciente de esto mientras miraba por la ventana perdido en sus pensamientos.
FIN
__________________
¡Al fin lo acabe! He tenido un bloqueo con esta historia así que no esta tan bien como me gustaría pero no quería dejarla incompleta, lamento la tardanza.
ESTÁS LEYENDO
Detrás de la máscara
FanficCat Noir actúa extraño, no hace sus bromas acostumbradas y parece que ha comenzado a memorizar poesía. Ladybug esta extrañada por el nuevo comportamiento de su compañero de batallas. Marinette por otra parte, tiene que detener los avances de Lila c...