Capítulo 15

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-¿Que qué hago aquí? Es obvio, ¿no?- dijo aquel ser a media sonrisa.

-No dejaré que te lo lleves.- dijo Sasuke protegiendo a Naruto con su cuerpo.

-No puedes evitarlo, después de todo... soy el dios de la muerte.

-Maldito.- Sasuke lo miró con enojo.

-De todos modos, vine a verte a ti, aquel muchacho aún no está muerto.- dijo relamiéndose los labios de forma desagradable mientras miraba a Sasuke de pies a cabeza.

-Entonces... ¿hay una probabilidad de que sobreviva?

-¿Bromeas? Ese chico está más allá que acá, va a morir.

-Eres un-

-Me lo voy a llevar y tú no podrás evitarlo. Además yo lo inducí a suicidarse.- interrumpió a Sasuke.

Sasuke no dijo nada, apretó sus puños por la impotencia y miró al rubio... se le hizo un nudo en la garganta.
 
-Ya me viste, ahora vete.

-Ay Sasuke, cómo me gustaría llevarte de este mundo, lástima que tú moriste antes de tiempo... ¿qué mas da? Te esperaré.

-Para ser un dios eres muy borde.- dijo Sasuke mirando hacia otro lado. Se quedaron así por un gran tiempo. El azabache hasta llegó a pensar que el Shinigami se había ido pero por desgracia seguía ahí mismo, parado con esa horrible sonrisa.

Un declinamiento en el cuerpo de Naruto alertó a Sasuke desviando su atención del dios por un momento. Se iba a acercar al cuerpo del rubio pero la voz del Shinigami lo paralizó.

-... Acaba de morir.

El azabache quiso caminar pero sus piernas temblaron y cayó de rodillas, otra vez las lágrimas comenzaban a salir.

-Oye, tú sabías que era imposible que sobreviviera, nadie estuvo aquí así que nadie lo ayudó... resignate, está muerto al igual que tú.- dijo el Shinigami serio mientras se acercaba al cuerpo inerte del rubio. -Tres... dos... -contó el Shinigami, Sasuke levantó un poco la mirada aún de rodillas.

-Uno...- dictaminó seguro el dios de la muerte.

Del cuerpo del rubio comenzó a salir una luz, poco a poco fue desprendiéndose hasta que salió completamente y comenzó a tomar forma.

-Naruto... -dijo Sasuke haciendo el ademán de pararse, pero sus piernas no respondían.

-¿Sasuke?- preguntó Naruto mirándolo asombrado.

-Tú no deberías estar aquí.

-Yo... yo solo...

-¡Eres un imbécil!- gritó Sasuke fuera de sí aún con lágrimas en los ojos.

-Sasuke yo... perdóna-

-¿Por qué lo hiciste? ¡¿por qué?!- dijo Sasuke y cubrió su rostro con sus manos mientras sollozaba.

-... Porque te amo y no soporté estar más tiempo sin ti.- dijo el rubio serio haciendo que Sasuke lo mirara.

-Pues que bonita forma de amar.- dijo el Shinigami que hasta ahora solo había estado de espectador.

-¿Y tu quién eres?- preguntó Naruto examinándolo. -O mejor dicho, ¿Qué eres?

-El dios de la muerte- dijo sonriendo perversamente.

-Ah... Entonces tú... ¡No! yo no me quiero ir con esa serpiente. -Naruto dió pasos hacia atrás.

-No es tu decisión, es la mía. Vamos- dijo sonriendo de lado.

-Naruto...- una voz interrumpió las palabras que iba a decir el rubio en contra de la serpiente.

-¿Si?- dijo mirando a Sasuke ya levantado.

Naruto quedó sorprendido, Sasuke en un movimiento rápido,  le abrazó con todas sus fuerzas.

-¿Sasuke?- preguntó abrazando al azabache también.

-Yo, lo siento... por mi culpa tú te...-

-Yo tomé la decisión. Te amo tanto... ahora que estamos juntos, estoy feliz... no importa lo demás.- dijo Naruto acariciando la cabellera de Sasuke.

-Eres un idiota... tomaste una decisión tan estúpida que te golpearía hasta cansarme pero no serviría de nada, de todas formas tu ya estas aquí... y aunque suene egoista, yo... estoy feliz.- dijo hundiendo su rostro en el cuello de Naruto.

-Te amo...- dijo el rubio sonriendo y soltando unas pequeñas lágrimas.

-Yo también te amo.- Sasuke cerró los ojos esperando el anhelado beso.

-Wácala- se escuchó una molesta voz, la del Shinigami por cierto.

-Tu cara si que da asco.- Naruto le sacó la lengua.

-Naruto...- dijo Sasuke algo incómodo.

-¿Qué pasa Sasuke?

-Ya tienes que irte.- bajó la mirada.

-Pero... ¿Y tú? ¿Por que sigues aquí?- preguntó el rubio sin querer soltar a Sasuke.

-Mi muerte fue antes del tiempo, debo quedarme en este mundo hasta que sea la hora de irme también. Yo no pertenezco a ningún dios de la muerte.

-Vamos.- dijo el Shinigami.

-Yo... no quiero irme...- dijo el rubio con tristeza. Era fatídico que haya sido tan poco el tiempo que vio a su azabache de nuevo.

-Obedece o tendré que usar mi poder.

-... Te prometo que cuando vayas a allá te buscaré... no olvides que te amo Sasuke...- besó sus labios.

Sin quererse separar se alejó dirigiéndose hacia el dios.

-Adiós, Sasuke...- sonrió forzadamente y alzó la mano para despedirse.

Sasuke tomó medidas desesperadas al ver que el amor de su vida se iba, corrió y tomó de las manos al Shinigami y luego hizo lo que nunca pensaba que haría.

-No te lo lleves, por favor...-suplicó.

Naruto asombrado por la situación, no pudo retener sus lágrimas y comenzó a llorar igual que su azabache.

Tan solo sollozos se escuchaba. Sasuke sujetaba fuertemente las manos pálidas del Shinigami. Diciendo en voz baja aquella petición.

El ente luego de varios segundos en los que se hallaba metido en sus propios pensamientos, los miró y luego sonrió de lado.

-... Está bien.

-¡¿En serio?!- dijeron al unísono Sasuke y Naruto sin creerlo aún con lágrimas.

-Si, pero como ya saben, todo tiene su precio...

-¿Qué quieres a cambio?- dijo Sasuke poniéndose serio y luego sorbió por la nariz.

La única oportunidad (NaruSasu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora