𝑨𝒏 𝒐𝒍𝒅 𝒔𝒕𝒐𝒓𝒚 𝒊𝒏 𝑳𝒐𝒔 𝑨𝒏𝒈𝒆𝒍𝒆𝒔

Epílogo

Daisuke juega con el cabello rosa de su madre, completamente alborotado al acabar de despertar y sonríe, nuestro hijo ríe y es música para nuestros oídos.  Sakura trabaja desde casa creando diseños para un hombre rubio que había intentado desesperadamente contactarla. El hombre estaba satisfecho por su trabajo y tenía, mucha paciencia.

En cuanto Sakura obtuvo los primeros diseños para su línea de productos, él los publicó y se encargó de reconocer a Sakura, por lo que muchas personas comenzaron a contactarla.

Su sueño se había cumplido y no se había dado cuenta.

Una copia mía llena de vida.

No he tenido arritmias cardiacas en estos meses. Y pese a que mi padre me ofreció mi puesto antiguo, estoy tentado en declinar la oferta. Me gusta mantenerme seguro en la oficina, y aun mas si puedo escaparme para ver a mi familia una hora.

Extrañamente, prefiero arreglar comprobantes fiscales o asuntos tales como multas sin pagar, que patrullar en la madrugada o encerrar personas. 

. SK
Mis manos tiemblan ante lo que mis ojos ven. No puede ser, esto esta mal, tiene que haber una equivocación.

"Positivo"

Mi anterior embarazo, había salido de sorpresa. Incluso si llevaba mas de doce semanas encinta, el sobrecargo de trabajo me tenia tan estresada que apenas note el retraso en la regla. Acababa de comprar una prueba de embarazo digital tras haber amanecido con nauseas por una semana consecutiva, pero no tuve tiempo de realizar la prueba, antes de que aquellos hombres irrumpieran en casa.

La puerta se abre y entra Sasuke preocupado.

—Ya he hecho la cita con el médico. Si te sientes muy mal, iremos al hospital. Ya llame a la oficina para saber que no iré hoy y t-..¿Sakura?, ¿estas llorando? Oh mierda, ¿tan mal te sientes?

Mi suelta el móvil  para sostener mi rostro pálido y darme un montón de besos en la cara.

— Seguramente es gripe con fiebre, tranquila, te daré un analgésico.

—¡Sasuke! — él da un respingo y sin decir nada, me lanzo hacia sus brazos enrollando mis piernas en sus caderas

—Dios cariño ¿Qué ocurre?

Yo sonrío y le extiendo la prueba de embarazo, Sasuke la toma extrañado y luego dice: "positivo", ¿que es esto?

—Sasuke ¡Estoy embarazada! —él palidece, piensa, lo procesa y después esconde su cabeza entre mi cuello apretándome con fuerza

— Dios Sakura— ambos sellamos el pacto de felicidad con un beso eterno, es el balbuceo del pequeño Daisuke quien gatea hasta nosotros lo que nos separa. Sasuke lo toma en brazos informándole la noticia incluso si no lo puede entender
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SKE

Sakura corre de nuevo al baño y sin pensarlo la sigo pero antes de que logre entrar, cierra la puerta y le pone pestillo por dentro, desde fuera escucho como su estómago regresa los alimentos y trago sintiendo el dolor en mi garganta de solo imaginar como se debe sentir.

Minutos después aparece tambaleándose y extendiendo mis brazos, la cargo y la recuesto en nuestra cama, el embarazo es difícil.

En el octavo mes, tiene contracciones, por lo que habían dicho los médicos, todo era normal, pero sin dolor. Sakura fruncía el ceño de dolor, había quedado muy lastimada del parto de Daisuke.

Nuevamente le asalta otra contracción y yo sostengo su mano hasta que se le pase, admiro a las mujeres.

En la oficina el trabajo es duro y agotador, trabajar sabiendo que Sakura esta en sus últimos meses es imposible. El teléfono lo tengo a la mano en todo momento. A la hora del almuerzo, mi padre, Itachi y yo comemos en la cafetería. Los tres dejamos el móvil en la mesa a todo volumen, pese a que se que mi madre se encuentra con ella, no me quita las ansias.

—¿Qué tal la vida de padre, hijo? — Yo sonrío pensando en Dai

—Nunca creí ser tan feliz, es como vivir únicamente para mi familia, cada cosa nueva que hace me llena el corazón de felicidad

—Has tenido un bebé hermoso, y estoy seguro que el que viene también lo será

Entonces mi teléfono suena,  el ambiente relajado cambia, contesto enseguida.

—¡Ya viene! — eso nos hiela la sangre y sin decir nada nos levantamos y nos ponemos  los abrigos

—¡Eh amigos. Sasuke Uchiha es padre de nuevo! — grita Kiba y los oficiales gritan y aplauden emocionados mientras me felicitan

Yo hecho un manojo de nervios sonrio de lado y tomo mis llaves para después salir corriendo con mi familia al hospital

Me encuentro sosteniendo la mano de mi esposa, adornada por un hermoso anillo que marca una unión conmigo. Con la frente llena de sudor, el cabello recogido y con lagrimas en los ojos, nunca había sido tan hermosa. Desde aquella vez en el altar cuando fue entregada en mis manos, me sentí el hombre mas afortunado del mundo, ella se encarga de hacerme sentir igual de afortunado todos los días. Me enamoro de ella todos lo días y simplemente no puedo pensar en alguien más.

Ella aprieta mi mano con fuerza y yo me mantengo firme, es increíble ver como hace todo ese esfuerzo para traer a alguien al mundo. Pensar en ella de la misma manera en la que esta ahora, pero sola, rompe mi alma en mil pedazos, nueve horas de parto y ella no puede ni con su propio cuerpo.

Entonces, un bebé llora, y los médicos corren. Nuestro peque a nacido.

— ¡Es una niña!— Sakura y yo sonreímos juntos, nuestra pequeña ha llegado al mundo y ahora estuve durante su crecimiento en el vientre y en su nacimiento 

La enfermera me extiende a mi princesa y observo su muñeca donde tiene escrito

" Uchiha"hab.411

Entonces veo una bebe con los cabellos rosas, inconscientemente comienzo a reír y cuando abre sus ojos verde limón, soy el hombre mas afortunado del mundo

— Sakura, es una pequeña copia tuya —Sakura sonríe cansada al ver a la pequeña pelirrosa, es simplemente hermosa— Bienvenida Sarada

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Mikoto feliz cargaba a su nieta mientras jugaba con el pequeño Dai. Sasuke suspira, al final. Mikoto se había salido con la suya.

Fin
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