☯lesbian [stories]

Reuniones íntimas.

Soy una mujer de unos veintiocho años, estoy casada con un increíble empresario, el más reconocido de la ciudad, y soy madre de una niña de tres años.

Si tuviera que describirme físicamente, soy una mujer alta, castaña de ojos oscuros, para ser honesta tengo una muy buena fijura, a pesar de haber tenido una hija mi cuerpo está muy bien trabajado, tengo bastantes pechos y no tanto culo, pero bien firme y parado, tengo muy buenas fijuras y un abdomen plano pero marcado.

A lo largo de mi matrimonio mi marido siempre fue pasable en la cama, no digo bueno porque lamentablemente no lo era, intentamos todo pero nunca lograba hacerme satisfacer por completo, siempre faltaba como ese toqué que te hace sentír en las nubes.

Era sábado y mi esposo y yo estábamos invitados a una cena con uno de sus clientes, lo cual tuvimos que irnos bien presentables aunque fuese en una casa. Dejábamos a nuestra niña con mi madre así que nos empezamos a preparar para la cena.

Me coloqué unos pantalones de vestir tiro alto, negros y bien ajustados, lo cual resaltaban bien mi culo, en la parte superior me coloqué una camisa blanca medio transparente con encaje y buen escote, finalmente en mis pies me puse unos tacos, no eran tan altos como solía usar.

Finalmente era la hora de salír y fuimos a la cena con los clientes.

Al llegar nos recibieron muy bien, y habían bastantes personas, lo cual me llamó sumamente la atención porque pensé que era algo privado...pero no era así, se podía decír que era como una fiesta de empresarios, digo empresarios porque era la única mujer o eso creía.

Me voy para el lado del living de la casa, mejor dicho mansión, me siento en un sofá y noto algunos ruidos salir de una puerta, me paré y me fui por donde provenían esos ruidos, y eran desde una habitación, trato de fijarme que no me vea nadie y abro despacio la puerta, al ver que era me quede cob los ojos abiertos.

Habían dos mujeres follando descontroladamente, y los "ruidos" eran sus gemido, me quedé ahí parada y ellas me miraban pero no dejaban de hacer lo que hacían y yo no podía dejar de mirarlas a ambas, admito que era muy excitante la escena y sentí que mis partes gritaban ayuda.

Agarra y una de las mujeres me hace seña con el dedo de que me una a ellas, no podía dejar pasar esto, estaba realmente excitada pero no me acerqué a ninguna de las dos sólo cerré la puerta y empecé a masturbarse mientras las veía, en una agarran y me se me acercan, una de ellas va hacía mi vagina y la otra me enpieza a besar, esto era mejor que tener sexo con un hombre.

Siento que una de ellas penetra su lengua en mi y la otra baja hacía mis senos y empieza a mordisquiarlos, no paraba de gemir ante esto, agarran y me acuestan en una cama, ambas van a mi intimidad y me comienzan a chupar las dos, era tan hot esto, sentía sua lenguas jugar con mi clítoris y morderlo, se queda una en mi intimidad y la otra sube hasta mí y me pone su concha en mí cara, la cual chupaba como loca, era genial sentir a otra persona en tu boca, la seguía lamiendo y me seguían lamiendo a mí, la chica que estaba haciéndome sexo oral empezó a penetrar sus dedos en mí con mucha velocidad y pasión, de la calentura que tenía debore por completo la vagina de la chica que estaba en mi boca, sentí todos sus jugos y oía de fondo sus gritos de lujuria y pasión.

La otra sigue penetrandome y empiezo a sentirme como nunca antes, mi cuerpo se tensó y no podía más, ella aumentó su movimiento y expulse todos mis líquidos vaginales enseguida la otra chica bajo y absorbió todos ellos.

Sentía tanto en ese momento.

Una de ellas se corrió y se masturbaba mientras veía como la otra y yo hacíamos la famosa tijerita, ese sentimiento de que nuestas intimidades rozar esa una explosión, estábamos tan húmedas que seguimos frotandonos y ambas acabamos al mismo tiempo.

Una vez que terminamos nos cambiamos las tres y salimos de ahí.

Ahora a todas las reuniones que tienen nuestros maridos y vamos las tres, nos juntamos en nuestro lugar favorito para divertirnos un rato y tener nuestras reuniones íntimas.