La Casa De La Calle Green [CNCO]

Chapter Seven

ㅡLe dije que lo hablariamosㅡdijo la castaña mientras se paraba al lado de la rubia, quien lavaba una pequeña
taza de té

ㅡNo hay nada de que hablarㅡdijo cortante la rubia ignorando a la castaña en sentido visual

ㅡAmiga, hemos rechazado muchos casos pero cuando se trata de una familia no nos hemos negadoㅡexplica la castaña mientras se apollaba en el taburete

ㅡTuve una visión en Amytiville, fue la misma que tuve hace unos años. Fue una premomición de tu muerteㅡdijo con lástima la rubia

ㅡEs por eso que te aislaste varios días? Solo por que me viste morir?ㅡpreguntó la castaña

ㅡTu también lo has visto, las 2 hemos visto mismo espiritu inhumano. El demonio de tu pintura..... es realㅡdijo la rubia mirando a los ojos a su acompañante

ㅡTus visiones son un regalo de Dios! Y entiendo que estes atemorisada pero.... no dejes que el temor te impida ayudar a otras personas que necesitan de tiㅡaconsejó la castaña mientras la tomaba de los hombros

La rubia suspiró

ㅡSi vamos y hacemos esto.... tienes que prometer que solo iremos a ver. Prometemelo Candelaㅡordenó la rubia

ㅡSi! Te lo prometoㅡla castaña abraza a su amiga más pequeña

~•DÍAS DESPUES•~

ㅡSe supone que ese tal Mauricce nos vendrá a buscar?ㅡpreguntó la rubia sentada en una silla

ㅡSi y no lo trates como si fuera alguien de tu edad. Tiene 47 años tratalo con respetoㅡhabló la castaña

ㅡHola? Señorita Candela?ㅡpreguntó una voz gruesa detrás de ambas jovenes

Ellas voltean dejando a su vista un hombre de estatura media, era un poco rellenito, su cabello estaba despeinado y los lentes le venían a su traje de corbata color gris.

ㅡOhh! Usted debe ser Mauricce Gross, y gusto. Soy Candela Gutierres y ella es mi mejor amiga y socia.... Rosi Castillo

ㅡUn gusto señorㅡdice la rubia mientras estrechaban sus manos

ㅡBueno, me da gusto que en estos días hayan decidido quedarse en la casa de los chicos. Y será mejor que nos vallamos llendoㅡhabló Mauricce

Subieron sus bolsos con poca ropa al maletero para después subirse al auto y comenzar su rumbo. Se dirigieron a la calle en donde se encontraba su casa.

ㅡSi nos hubieran dicho que por esta calle sería el caso, no nos hubieramos movidoㅡsusurra la rubia

ㅡYa lo sé, pero disimula.ㅡdijo la castaña para despues bajarse del auto

La menor se baja del auto, para apreciar la casa, su mirada reflejaba neutralidad para despues darse cuenta de que había un castaño en la entrada.

ㅡÉl es Christopher Veléz, el mayor de los 5 jovenes y el que está a cargo de la casaㅡdijo Mauricce

ㅡHola! Un gusto conocerlasㅡel castaño miró fijamente a la castaña, reconociendola de inmediatoㅡBueno! Pasemos. Ahora solo estamos Erick y yo, los demás se estan hospedando en un hotel en el centro de la ciudad.

ㅡDónde se encuentra Erick? Quisiera compartir palabras con el unos minutosㅡpreguntó la rubia

ㅡEstá en el patio trasero, columpiandoseㅡdijo el castaño

La rubia asintió

Ella caminó hasta el pelinegro que se encontraba columpiandose con su mirada en el suelo