Los brujos vigilan mis pasos
Las nubes negras me alejan de todo
Si alguna vez fui un amanecer
Fue ese que nunca llegó a iluminar
Roto en mi habitación
Quebrado como yo mismo
Busco salida en mis sueños
Sueños olvidados en la neblina
No voy a culpar al faro apagado
Porque estrelle mi navío en la nada
No voy a culpar al fuego
Por incendiar mi corazón
Las horas siguen siendo lo que son
Tres mil seiscientos segundos
Diez gritos ahogados por segundo
Llámale hora de pensar
Nadie me quita lo bailado
Pero nunca aprendí a bailar
Y lo bebido se fue por las cañerías
Por eso es que no sonrío
Dos de cada tres aves se alejan de mi
La que se queda no canta
Me mira con nostalgia
No te diré lo que me conversa
Las llaves sobre la mesa
Anuncian que no podré entrar
Las ventanas cerradas
Avisan que dios se olvidó de mi
Tu alegría al mirarme
A veces rompe mi armadura
Entonces oigo el tic-tac a la izquierda
Y se ata un nudo en mi garganta
Me ves como una piedra
Una piedra gigante
Una indestructible
Una que luce una pequeña grieta
Soy tan débil como el peor boxeador
Se que no lo ves y así está bien
Mil veces nade contra la marea
Y aún me sigo ahogando
Hay un camino que lleva al bosque
Debo confesar que lo seguí
Es un camino sin retorno
Un camino sin salida
Aquí hay sinceridad escrita en código
Así te saco una sonrisa
Así te oculto una lágrima
Será tarde cuando lo entiendas
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"poesía" y quizá algo más
PoetryPor aquí un camino mal hecho en el que hay piedras y troncos donde caer, a veces tropiezas con los mismos, otras veces te sales del camino, otras veces te das cuenta que ya estás atrapado
